La ciudad del pecado

Nada como un anochecer en Sin City y disfrutar de unos labios teñidos de sangre. La ciudad del pecado se palpa, se huele, se siente... apesta a sudor, a alcohol, a rancio. Pero aún así hay algo que atrapa, hipnotiza e incluso estremece.

El cómic despierta en la pantalla y el espectador no puede despegar los ojos de una maravilla conceptual y, por supuesto, visual que hace hasta de Bruce Willis el perfecto justiciero. Tres historias entrelazadas sin un nexo coherente en común, salvo esa violencia sabiamente justificada que invade cada plano y cada secuencia.

Frank Miller, acompañado en la dirección por Robert Rodríguez y con el sello y la estética del nunca políticamente correcto Tarantino, nos invita a jugar a una estremecedora ruleta rusa de la que nadie, ni el mismísimo hijo de un senador, está a salvo. Estupendos Benicio del Toro y Mickey Rourke, correctísimo Clive Owens e incluso mención especial para una bufonesca Brittany Murphy.

Es la magnífica fotografía la que hace de Sin City una obra casi de culto, si nos olvidamos, claro está, de algunos fallos evidentes en el montaje y un guión que aunque grotesco y oscuro como la propia ciudad, nos deja por momentos con una sensación bastante fría; porque en medio de este lúgubre escenario ni los golpes ni mucho menos la muerte duelen.

Ladys and gentlemans, nadie es bienvenido en la Ciudad del pecado. Y no olviden que en versión original gana...

Ayer la vi por enésima vez. (Me la he comprado en blue ray, alucinante), y creo que sobre ella ya está todo dicho.
Sencillamente una obra maestra. Actual referente cinematográfico, clásico irrempazable en el futuro... y no tengo mucho más que decir.
Simplemente que por encima de la estética, la fotografía, la poesía envolviendo como un halo cada centímetro de celuloide, las sórdidas historias de fracasados que nunca consiguen salir definitavamente del agujero....por encima de eso, perdurará en mi memoria la interpretación de Mickey Rourke (Marv), para mí, el personaje más emocionante, conmovedor, sorprendente, inquietante, e incluso, me atrevería a decir tierno, de la historia del cine.

Nada más: un 10.

Creo que la velocidad de las historias es genial y cada uno de los personajes está brillante, especialmente el de M. Rourke. La ambientación del film engancha de sobremanera y la secuencia de las historias hace que sea mejor, solo me queda la duda de la relación existente entre todos los personajes en el cómic original.

‘Sin City’ fue llevada a la gran pantalla por los hermanos Weinstein, generalmente un seguro de calidad, en el año 2005. Teniendo en cuenta que el autor del cómic, Frank Miller, se volcó en la adaptación cinematográfica del mismo, y que sus compañeros de trabajo fueron ni más ni menos que Robert Rodriguez y Quentin Tarantino, muy mal lo tenían que hacer para que la cosa no quedará apañada y digna de admiración. Más aún, rizando el rizo, si vemos entre el reparto a gente de la talla de Bruce Willis (uno de mis favoritos), Mickey Rourke, Clive Owen, Benicio del Toro, Elijah Wood, Brittany Murphy, Rosario Dawson o Jessica Alba. Es decir, todo un lujo a la vista del cartel.

El film se estructura en torno a tres historias con distintos puntos de conexión pero que guardan suficiente independencia entre sí. La primera historia está protagonizada por Bruce Willis, un Don Nadie dentro del mundo policial que busca retirarse de una manera honrosa. Es decir, salvándole el pellejo a una niña de 11 años que está a punto de ser violada y asesinada por el hijo del Senador de la ciudad. No será fácil tarea. Conviene advertir que la historia se encuentra dividida en dos partes. La primera abre la película, en la segunda la indenfensa niña se ha convertido en una explosiva bailarina (lanzó al estrellato a Jessica Alba).

La segunda historia es, para mí, la mejor de las tres. Está interpretada principalmente por Mickey Rourke, quien se pone el traje de un tipo malo, rudo y con un físico facial alejado del concepto estándar de hermosura. Sin haber tenido nunca a una mujer entre sus manos, quedará prendado por Goldie, una encantadora rubia que le satisfará sus necesidades sentimentales y sexuales. Sin embargo, al amanecer la mujer no despertará. Alguien la asesinó, y él buscará venganza en la figura de un sicario muy sutil movido a través de las órdenes de un religioso que impera en la ciudad. Curiosamente el poder religioso y el político van de la mano en Sin City, pues éste líder espiritual no es más que el hermano del Senador.

En la tercera historia nos encontramos a una desorientada mujer, interpretada por una Britanny Murphy que ya nos ha dejado, que frecuenta compañías nada recomendables. Entre sus amantes se encuentra un violento Benicio del Toro, con ganas de marcha, atiborrado de alcohol y anclado a la puerta de la atractiva rubia, esperando que ésta abra. Lo que no sabe es que dentro del apartamento está Clive Owen, un sanguinario tipo que no dudará en eliminarlo. Historia irregular que combina el naufragio de Murphy con la miserable existencia de Old Town, el barrio donde la ley es la ley de las putas. Un barrio sin policía ni mafiosos. Un orden que no conviene alterar.

Sigue en spoiler

Me lo he pasado bomba viendo esta película, sobretodo por lo original de la propuesta. Además es de celebrar el regreso de Mickey Rourke que parecia perdido para la causa, realmente su papel lo borda. Más de lo mismo para Bruce Willis, que nunca será un gran actor pero siempre
da un saborcito especial a todo lo que toca.
Quizás como pero habria que decir que el interés de la película es decreciente, puesto que he encontrado menos interés en la última historia, pero aún asi es sin duda recomendable.