Warehouse 13 (Serie de TV)

Inexplicable, a mi entender, éxito del cana SyFy (donde ya van por la segunda temporada), que nos sumerge en un interminable almacén donde el gobierno de los Estados Unidos atesora cientos de artefactos fuera de lo normal desde hace décadas (con un "sospechoso" parecido con el que guardaba el arca de la alianza en el primer Indiana Jones), que los protagonistas deben cuidar y completar, en la típica historia inacabable de "a ver qué encontramos hoy".
Tenemos el sabio antisocial (Saul Rubinek), y la parejita habitual, compuesta por chica-seria y competente (Joanne Kelly, a quien ya vimos de secundaria en series como Dresden o Castle) y el atlético-graciosillo con pseudoproblemas internos (Eddie McClintock, con apariciones en Bones). Añadidos: una pareja de hermanos "satélite" donde encontramos a A.Scagliotti en un personaje cuanto menos, de repelenta niña-vicente, y una jefa de ojos saltones (CCH.Pounder)con "grande misterio misterioso".
McClintock actúa (aunque muchísimo más histriónico y con menos materia gris) de forma tan similar a D.Bonearaz en Bones, que a veces uno tiene que parpadear para cerciorarse que no está viendo la serie equivocada. Su compañera hace lo que puede.
La historia de partida es un tanto simple, pero podría ser interesante. El problema es que todo falla por algún lado, sin saber exactamente por donde porque es un cúmulo de cosas: ni la pareja de tortolitos enfrentados tiene la más mínima química, ni los desarrollos son convincentes, ni uno se entera realmente de la "enjundia" misteriosa de los objetos más allá de alguna breve mención (en plan ooooh, la pluma de Poe, oooooh, y fin), ni acaba de convencer cómo los personajes llegan a las conclusiones que llegan, salvo que estén inspirados por la divina providencia o también ellos sean objetos raritos y clarividentes. De este modo, el capítulo avanza sin que nos importe demasiado qué sucede, porqué y cómo van a acabar nuestros chicos/as.
Démosle en todo caso, la confianza de que mejore según lleguen más capítulos, ya que tiene "tanto éxito". Pero no sé, no sé ...

Es una serie simpática, juvenil, sin grandes expectativas... sencillamente para verla y relajarte durante un rato.

No llega a despertar el interés histórico de "Cazatesoros" y si tiene un toque fantástico-ingenuo-infantil como "Embrujadas" aunque no llega a tanto.

La pareja prota es atractiva y trabaja bien...

Es mejorable, por supuesto pero no cae en el absurdo de tomarse en serio y eso... es un punto a favor. Yo le quitarían un pelín de fantasía a los artilugios... pero es mi opinión. Va dirigido a un público juvenil... está claro.

Podría haberse hecho algo más serio sobre artilugios guardados por el gobierno pero... entonces caeriamos en Fringe o Expediente X... y eso ya sería mucho.

¿Estará el "arca perdida" de Indi en ese almacén?

Para ser sincera, ya lo intenté con esta serie y la dejé después de cuatro o cinco episodios. Como estas navidades en la tele por cable la han puesto en bucle continuo, cual si de El Príncipe de Bel Air se tratara, he acabado por cogerle el tranquillo, principalmente porque la segunda temporada está mejor que la primera, aunque sin ánimo de cambiarle la vida a nadie: es una serie para pasar un buen rato y poco más.

El planteamiento pintaba bien: un almacén donde se guardan todas las cosas chungas que hay por ahí sueltas, igualito que el que acaba alojando el Arca de la Alianza en la primera peli de Indiana Jones. A partir de ahí, la serie engancha un estilo muy parecido al de la vieja serie "Misterio para Tres" (para el que no sepa de qué hablo, que es lo más normal, es de un par de primos que heredan una tienda llena de objetos endemoniados y el encargo de buscar los que ya estaban vendidos y ponerlos a buen recaudo; con familia así no hacen falta enemigos): todos los episodios consisten en i) aparece un objeto misterioso que alguien usa para hacer el mal; ii) mandan a los dos protagonistas a saltar de un lado a otro mientras el equipo de casa echa una mano cacharreando y buscando cosas por la red; iii) después de recibir una amable paliza (Pete, usualmente) recuperan el cacharro, lo embolsan en plástico reciclable a prueba de objetos chungos y lo almacenan en la estantería correspondiente.

Hay que dejar claro que no se da explicación alguna acerca de por qué los objetos son como son y que cualquiera que no oiga "Lanza de Longinos" y salte en el sillón al grito de "yo se lo que hace" tendrá que hacer voto de fé y asumir que es magia. Otro de los ganchos (para gente como yo) es el estilo steam-punk de los cacharros que aparecen: cuando Artie quiera le cambio mi smartphone por un Farnsworth sin rencores y no me atrevo a aspirar a una Tesla, porque se que la usaría.

En fin, hay un montón de guiños para el amante de la ciencia ficción de la época de Verne, un buen nivel de comedia (gracias Pete) y los actores mejoran conforme avanza la serie. Por lo demás, una producción para pasar un buen rato.

Serie de ciencia Ficción donde los principales protagonistas, a mi modo de ver, no son las personas sino los artefactos con poderes que deben ser guardados en un almacén secreto del gobierno. Es una mezcla, al principio extraña, de Indiana Jones y embrujadas pero con toques de gracia e historia.

Esta serie ayuda a ampliar la cultura general gracias a la información que se comenta en cada capítulo sobre uno o varios personajes históricos reales o uno o varios hechos históricos.

En cuanto al otro grupo de personajes, los otros protagonistas, forman un buen y típico grupo que sigue funcionando. Tenemos al jefe Arthur Nielsen, Artie para los amigos, cascarrabias e inteligente con muchos recursos en su maletín; la pareja principal Mika, la lectora y buena en detalles, y Pete, el gracioso, que siempre se pelean y la segunda pareja , el/la informático/a y el/la tercer agente.

Esta serie podría catalogarse como una mezcla de The X Files y Fringe, pero en versión tontorrona, como para toda la familia. Se podría transmitir perfectamente en Disney Channel. Más que de ciencia ficción, es de "magia ficción", ya que las explicaciones científicas (o pseudocientíficas) de por qué los misteriosos objetos guardados en el almacén hacen lo que hacen, brilla por su ausencia.

Personajes bobos, situaciones inverosímiles y humor un tanto absurdo para una serie entretenida, que se deja ver sobre todo por su liviandad y falta de pretensiones.