Comet

Esta es una película infinita.

Esta historia te hace reaccionar en todos y cada uno de los saltos paralelos que hace. Personalmente, me ha hecho sentir tan viva como muerta. Triste a la par de fascinada. Emocionada y sin esperanza.
Las conversaciones entre los protagonistas han llegado a mi subconsciente sin darme cuenta y me ha hecho sentir que hay algo más en las personas y en las relaciones humanas. Algo complejo, escalofriante y excitante. Genera un sentimiento tan profundo que tal vez no todo el mundo llegue a entender.

Visualmente crea un clima de complejidad infinito. Juega con estímulos visuales a través de una fotografía elegante.
Maneja de una forma tan sutil el hecho de que el universo está relacionado en todo momento con todo lo que hay a nuestro alrededor que hace aun más intenso el sentimiento que se ha quedado dentro de mí al verla.

Cuando una película te hace sentir cosas creo que es algo extraordinario. Aunque es evidente que estos sentimientos son únicos para cada uno; dentro de las miles de posibilidades que existen... En mi humilde opinión, es exquisita.

No es una película para las masas, para la mayoría de las personas podrían tornarse engorrosos los constantes saltos de universo y tiempo y la divagante inestabilidad en la relación de esta pareja encarnada por Long y Rossum. Esmail sin embargo, logra coincidir con el rango de disfrute de algunos espectadores, como lo es mi caso, y llega al subconsciente de manera que sin darse cuenta, estos se ven envueltos por esta mezcla de música, palabras e imagenes que hace que se sientan identificados.

En conclusión, universos paralelos, un amor. Gran película, y si le encuentras significado: Mágica.

Es un poco frustrante que se te pongan intensitos cuando no hay medios ni se ha preparado el momento.
Como si fuéramos esa cita que no quiere dejar escapar, Sam Esmail nos tira todo el rato del brazo, nos echa la caña y, estoy seguro de ello, pone el corazón en cada jugada.
Qué lástima que yo no sea Emmy Rossum.

'Comet' tiene un gran problema del que está completamente cercada: "solo" habla de una relación.
Sí, una relación apasionada, turbulenta, irregular y atractivamente "bonita" cinematográficamente pero, hey, es solo una relación.
Y a cada paso que intento dar para que me importe más, para que me resuene... cambiamos de tercio y no logro empatizar con ella, demasiado volátil, ni con él, demasiado anclado en una pose de rarito que Justin Long no encarna aunque se esfuerce.

Me quedo fuera siempre.
Fuera de su supuesta conexión, de sus supuestos problemas y sus diálogos megachachiguays que no están basados en la vida real ni nada que se le parezca.
A mí me ha pasado, que me he equivocado, que alguna vez me ha faltado la palabra correcta.
Pero aquí en ellos no veo ni invulnerabilidad ni inundación de sentimientos: solo precisión en decir la frase adecuada y rigidez en clavarse en una marca para planos bonitos esquinados (frustrante decisión de dirección).

En fin, me puedo equivocar, pero las mejores historias de amor siempre tienen equívocos, renuncias y una agradable dosis de vida real.
Esta, intentando ser perfecta, se queda en un universo paralelo en el que deben de sentir de otra manera.

Comet parte de una premisa interesante a la que, sinceramente, creo que no sabe sacarle todo el partido que tenía.
Después de verla, debo decir que pienso que tiene momentos muy potentes pero que, al mismo tiempo, acumula una multitud de errores que no le permiten del todo despegar en ningún punto.

Empezando por lo positivo, creo que podemos hablar de la dirección. El director (esta es su opera prima y escribe también el guion) se encarga de usar planos cortos y jugar con las luces para dar una sensación onírica a toda la cinta. Hecho que creo que funciona bien con la premisa de los universos paralelos.
Además, aparte de en lo visual creo que el hecho de plantear en el guion los distintos momentos de una pareja jugando con el tiempo y el espacio le permite plantear situaciones más que interesantes donde va entrelazando las problemáticas del inicio de la relación en comparación a las que se producen en una relación de larga duración. Desde esa perspectiva, creo que la cinta funciona bien y que, probablemente, conseguirá resonar en algunas personas que puedan verse incluso reflejadas en alguno de los roles que enseña.

El problema es que no sólo se vive de buenas ideas. El primer error de bulto que creo que tiene la cinta es la falta de profundidad. Como ya he mencionado anteriormente, gracias a su original estructura la cinta se permite trabajar en distintos frentes pero, al mismo tiempo, por una falta de metraje o de selección de los temas, acaba no profundizando bien en casi nada. Y creo que esto le penaliza. Al menos, a mí me ha ido sacando en algunos puntos de la cinta. Quizá a gran parte del público le de igual, y quizá a mí en otro momento también me lo daría, pero en este primer visionado no puedo obviar la sensación de que intenta golpear muchos temas sin enfocarse realmente en ninguno.

Por otra parte, no puedo dejar de hablar de la construcción del personaje masculino. Por mucho que el actor tenga buena química con la actriz (cosa muy positiva para la cinta), pocas veces he visto un personaje que tenga unas líneas de dialogo tan incoherentes consigo mismo y que, además, sea tan sumamente estúpido. No pasaría nada si fuese intencional, pero viendo como va jugando con la relación de dos, juraría que no lo es. Este hecho a mí particularmente es el que más me ha molestado porque me dificultaba empatiza con él y con su drama interno.

En cualquier caso, y por no alargarme mucho más, quiero acabar diciendo que "Comet" no me parece una mala peli, a pesar de haber señalado algunos problemas importantes. Y no me lo parece porque considero que tiene el suficiente saber hacer como para compensar los fallos. En cualquier caso, creo que es una de esas películas que podrían haber volado mucho más alto de lo que finalmente lo hacen por carencias en un guion que peca de simple y, en ocasiones, autocomplaciente.