400 Days

Planteada como experimento sociológico -así tal cual- se presenta esta peliculilla de serie B que no sabría si calificar de pseudociencia-ficción, de pseudoterror, de pseudoexperimento-social, o directamente de pseudomierda-empanada-mental.

La premisa inicial es buena, muy buena diría yo, pues con planteamiento similar -el de encerramiento voluntario- aunque con objetivos diferentes, se rodaba Das Experiment (2001), para mi gusto con notables resultados, pero aquí esa idea primordial, la de encerrar en una nave espacial simulada a 4 individuos, aislados durante 400 días, pronto se deja llevar por los tópicos típicos y arquetípicos, para convertirse en una especie de programa al estilo Gran Hermano con situaciones estúpidas y de tensión muy previsibles. Los personajes se desdibujan con la misma facilidad con la que se presentan, porque el director, muy torpe, nos los introduce sin el más mínimo interés por desarrollarlos, salvo por la existencia de una relación anterior de los dos protagonistas, y un par de pasados traumáticos del gamba de turno y del sensible del grupo, más blandito que un limón repocho.
Los días pasan con una facilidad increíble, y a mitad de película, cuando quedan pocos días para el final del reto, de pronto, todo se torna por el arte del birlibirloque (aunque haya un precedente en la película que "intenta" con maniqueísmo puro justificarlo) en un western post-apocalíptico de terror surrealista. Y aquí es donde la película se convierte en otra cosa... en otra peliculilla, y nos introduce por los orificios sensoriales (también por el orificio anal) un pastiche amorfo de personajes trasnochados (en todos los sentidos) en una especie de escenario surrealista donde el más cuerdo fríe huevos con uranio (por hacer una comparación "ocurrente", vamos).

Y así, como el que no quiere la cosa, el director nos brinda en su ópera prima sus dos visiones de cómo hacer un bodriete con los colegas y pasar como algo original; que no lo es, por si no se habían dado cuenta. Cuando acaba a uno le queda la pena de ver cómo han desaprovechado un material original (ojo, sólo la idea del cautiverio voluntario en una falsa nave espacial) que podría haber dado para mucho en las manos adecuadas.

Por cierto: el apartado técnico bien; los decorados correctos; los actores horribles, sin excepción; el final abierto favorece, más si cabe, la sensación de pena por el paupérrimo resultado general.

Ridícula. No sabe lo que quiere ser. Del simulacro estúpido a la ambigüedad absurda. Terriblemente actuada y pretenciosa en intenciones. Entre la vergüenza ajena y el aburrimiento.

El único que parece haberse tomado con profesionalidad el proyecto es el director de fotografía (solo a ratos).

Más allá de la falta de rigor y coherencia absoluta del filme (propio de una película clase B), tengo que abonar a este que la idea de simular un viaje espacial de 400 días y las consecuencias psicológicas en la tripulación es más que interesante. Inclusive la primera mitad de la cinta (más allá de ciertos tropezones) tiene un potente tinte de drama psicológico. Ahora bien, esta línea argumentativa presenta un cambio radical a medida que avanzan los minutos, haciendo que todo se vaya a la basura. Una variedad de personas sin son ni ton desenfocan la idea inicial. Termina siendo una película más de buenos vs malos. Sobre los actores... sorprende la caída profesional de Routh, el resto del reparto no merece calificación.

Lo primero que se me vino a mente cuando empecé a ver la película, fue ¿quién fue el imbécil que eligió a Dane Cook como astronauta? Luego me percaté que la supuesta nave espacial tenía pinta de neo-gimnasio, y que el primer día de experimento uno de los tripulantes ya le pedía sexo a la única mujer de la tripulación. ¿En serio? ¿No hubo estudio de personalidad o similares para elegir los tripulantes?

Peliculita de ciencia-ficción, de textura telefílmica, aunque fue estrenada en cines en algunos países. Esa sensación televisiva proviene de un reparto procedente, en gran medida, de series del "Arrowverse" de la CW y de otras. La producción, aunque decente, tampoco es muy allá y su guión nos recordará poderosamente a las series tipo "La Dimensión desconocida" y sus versiones noventeras más recientes como "Más allá del límite".

Como ya han señalado anteriormente, la película tiene dos partes muy claras. La primera, que nos retrotrae a experimentos reales como "Biosfera 2" durante los años 90, en los que encerraban misiones de científicos en cuarentena durante cerca de dos años, para ver la viabilidad de la colonización espacial. esta es una parte sosa, en la que descubrimos a unos personajes demasiado arquetípicos, desde el héroe, al rarito, pasando por el salido violento. Diálogos de besugo, situaciones tontas y poco más. El diseño de las instalaciones es más que aceptable. El filme gana en interés, no mucho, en su segunda parte, con un giro propio de las mencionadas series.


Interpretativamente los actores son más planos que una tabla de surf, con excepción de Tom Cavanagh, que hace una composición más que notable de un personaje muuuy inquietante.

No es aburrido, pero es muy predecible, tanto en la primera como en la segunda parte del filme. Nada nuevo bajo el sol.

Para los amantes del cine de ciencia ficción cuando descubrimos un nuevo estreno de este género en la cartelera siempre nos da cierto "gustirrinín" ante la expectativa de descubrir nuevos mundos e historias... y más cuando lees el resumen de estos '4oo días'.

La película parte de una premisa bastante atrayente, y si encima ves su cartel... pues aún son mayores dichas expectativas. Aunque sólo hacen falta 5 minutos de película para que tus ilusiones se empiecen a venir un poquito abajo: típica presentación, de típicos personajes, viviendo típicos tópicos en sus primeros días en la nave... mal comienzo!

Pero aunque aquí me leas metido a crítico ocasional no me considero un gafapasta sabedor de la quintaesencia del cine, por lo que tampoco exijo mucho a las películas y me dejo engatusar con poco... por lo que mantego vivas mis ilusiones en este viaje de 400 días! Pero los días van pasando y lógicamente esa tensión que debería aumentar entre los miembros (y miembra) de la tripulación... no te llega a tí, y sientes que todo es más falso que una pelea de los Power Rangers. Esas sensaciones que debería transmitirte una buena película (angustia, nerviosismo, desazón, yo qué sé!!! algo!! ...) no acaban por traspasar la pantalla.

Por lo que el director decide cambiar las tornas y lo que se supone que era un retrato psicológico de 400 días encerrado en una nave en pleno viaje espacial se convierte en otra cosa... bueno mira, tal como iba la peli casi que mejor... pasamos al plan B!