Odd Taxi (Serie de TV)

A mi edad, Milennial acercándome la treintena, siempre pienso que ya estoy mayor para el anime, que no volverá a conectar conmigo, ya que con los años cambia tu visión del mundo, y con ella tus intereses. Este anime ha sido diferente, de hecho si no estuviera situado en japón, y bebiese de su ideosincrasia, parecería más otro tipo de serie occidental enfocada a un público adulto.


Odd Taxi es un anime peculiar, no se rige por los estándares generales del anime, pues es una historia mucho más realista y humana que la de muchas series de carne y hueso, algo paradójico al tratarse de animales antropomórficos, y una situación parecida a la que se da con Bojack Horseman, otra joya pero mucho más pesimista y cruda.

Tanto su personaje principal, como todo el elenco de secundarios alcanzan unas cotas notables de profundidad, mientras su trama te mantiene atento, pues es un pequeño puzzle que a medida que pasan los capítulos se va formando hasta alcanzar un final verdaderamente satisfactorio. A esto sumar que su diseño de pesonajes y atmósfera de cine negro en contraste con los brillantes colores de la noche japonesa ambientan muy bien la experiencia

Si buscas un anime de grandes peleas y enfrentamientos épicos, descártalo, pero si te interesa algo más psicológico y realista, esta es tu serie. Todo un descubrimiento.

Odd taxi atrapa desde el inicio con su estética y personajes. Rápidamente engancha más y más por la trama que va poniendo todas las piezas sobre el tablero por el que se mueven los variopintos personajes. Poco a poco se ahonda en una historia detectivesca con mafiosos, ganadores y perdedores. Lentamente los variopintos personajes que se han ido presentando se van colocando en la historia hasta que todo encaja.

Bien es cierto que no es una serie perfecta. Personalmente encuentro que no todos los personajes aportan mucho realmente, como por ejemplo los del dúo cómico.

En cuanto a la trama, está muy bien hilada y mantiene el interés hasta el final. Aun así, he encontrado que para lo que realmente se está contando tal vez se peque de incluir demasiados elementos y se enmascaren las cosas solo para tener un misterio del que estar pendiente.

Kotogawa, el taxista que protagoniza este anime, es un hilo conductor muy firme, aunque su progresión es un tanto precipitada. Pasa de ser una figura en segundo plano a meterse de lleno en la acción. Cierto que “la acción” empieza a afectarle a él y a sus compañeros más allegados, pero para alguien que ha sido más bien solitario y sencillo toda su vida, el cambio puede resultar brusco. No es tanto así gracias a la fluidez de la narración y del tono entre cómico y serio. En gran parte puedo aceptar la situación al tratarse de personajes representados por animales. Ya desde el principio se rehúye de la realidad y entro mucho más en lo que va ocurriendo. Sin embargo no es que se trate de una fábula, ni mucho menos. Se habla de temas muy reales y de actualidad.

La serie tiene un tono adulto, cosa rara y que aprecio en un anime, e incluso intenta contar algo más allá de la interesante investigación.

No cabe duda que los misterios que rodean este anime son interesantes. Sin embargo, la fórmula de darle a todas y cada una de las tramas la misma importancia hace que las más relevantes pierdan fuerza.

Si valoramos a esta serie por sus puntos fuertes, estoy de acuerdo que es uno de los grandes animes del 2021. El problema es que hay que valorar a la serie por el conjunto de apartados que la componen. La animación, aunque intencionada, no es ninguna maravilla. Los personajes, aunque con gran desarrollo, a veces actúan de manera incoherente. El propio ritmo de la serie es demasiado irregular. Aunque entretenida, por lo que se puede ver, a la serie se le pueden sacar varios peros.

La gran pregunta que siempre se me pasaba por la cabeza es: Y si los personajes fueran humanos en vez de animales? Mi respuesta es que no tendría tanto tirón y han aprovechado la moda de poner a animales en la piel de humanos cuando en verdad es totalmente innecesario y no influye a la historia en ningún momento.