Ya no puedo esperar

Lo sé, ¿a quien se le ocurre ver esto? Pero uno se pone a hacer la cena... y tú dirás, o algún anodino programa del corazón, o esto, y puestos a elegir.. la Love Hewitt está más buena, carajo. Y todo por no hacer la cena a la hora que me toca, a una hora, digamos, corriente.

Leo aquí que se trata de una comedia juvenil (¿?) y no quepo en mi asombro, ¿donde está la comedia? ¿se trata de observar como un gilipollas con unas gafas de buzo intenta ligar en una fiesta universitaria (o lo que sea)? ¿de observar como un colegón del prota lo deja en evidencia ante la chica que pretende conquistar? ¿o en ver como una ninfa interrumpe las llamadas telefónicas de nuestro entrañable protagonista? No entiendo nada... si a esto le ponen la etiqueta de comedia juvenil, es que no me han visto a mi una noche festil y medio tibio a base de cerveza o lo que se me ponga por enmedio.

Suerte que ahí esta la Hewitt... cuyo carrerón acabo de observar y, vamos, o esta chica hace pelis por compromiso.. o no le llueven bodrios más gordos de milagro, pero bueno, la cuestión es que la muchacha está de toma-pan-y-moja, así que no me voy a quejar demasiado.
Y, para colmo, esta cosa está editada en DVD, ¿en qué pensarán las distribuidoras? Por diox....

Tiene todos los típicos personajes que puede haber en una película para adolescentes, y cada uno tiene sus problemas, con lo cual hay un sinfin de cosas que pasan en ella, y no se hace aburrida para nada sino todo lo contrario. Sí que es verdad, que toda la película transcurre en una fiesta, pero no se hace nada pesada, porque suceden demasiadas cosas. La recomiendo si te gustan las películas de adolescentes, esta es de las mejores que he visto en esa temática.

Preston acaba de graduarse. Su ilusión es ser escritor e ir a una buena universidad donde formarse, pero antes tiene otros frentes que solucionar. Se ha enterado de que Amanda, la chica que siempre le gustó, acaba de dejar al cachas guaperas que tenía por novio. Es su oportunidad. La hora de entregarle esa carta de amor que tantas veces ha repasado. ¿El momento? La fiesta de esa noche, la última de su vida como colegiales.

‘Ya no puedo esperar’ es una comedia juvenil estadounidense que sigue la estela ochentera de este tipo de films. Hay fiesta con un variopinto de personajes, desde el garrulo hasta la cachonda pasando por el friki. También hay alcohol, desmadre y mucha testosterona. Y, cómo no, un chaval romántico que buscaba camelarse como un loco, y quién no, a Jennifer Love Hewitt. La peli es la típica, sí. Pero tiene su cosa, su encanto. Andanzas de colegiales que entretienen y divierten. Eso sí, no esperen encontrar una American Graffiti en ella.

Sustituyan a Ethan Embry por Freddie Prinze y ya tienen la película del Box Office americano. Y es que me gustan las comedias pero con algo de gracia. Ver a Seth Green haciendo a cada frikada una tontería mayor pues como que no me hace gracia. Y es que esta peli me jode, porque tiene un reparto muy bueno, además la idea de que el film se base en una fiesta da para más bien poquito.
1) Seth Green, hace el patético de lo más, es una pena porque el tío es un cachondo (me encanta Robot Chicken) y aquí da un paso atrás.
2) La música es buena, es un clásico en las comedias, pero se aprovecha muy bien.
3) Breckin Meyer, Eric Balfour, Selma Blair, Jason Segel, Jerry O´Connell, coño con secundarios de estos se puede hacer cosas mejores, al menos con Meyer, Blair y Segel.
4) Lauren Ambrose, que es la encantadora hija de A dos Metros Bajo Tierra, está fatal y Ethan Embry, no sé nunca ha sido santo de mi devoción pero esperaba algo más.
Para mí es un fracaso y eso que me gustan este tipo de comedias.

No es para nada entrañable, y hay que reconocer que jamás fue un éxito comercial y le fue regular en la crítica, pero ‘Can’t hardly wait’ seguramente fue la producción que aportó cimientos para el futuro de la comedia adolescente moderna. Puede servir para ver a Love-Hewitt en su mejor momento en el que era la reina de las películas para el público joven, aunque este tal vez sea su trabajo más soso y el más poco aportante para su carrera. La historia del chico bobo que desea confesarle su recóndito amor a la chica más popular que ni sabe que existe ya se ha visto muchas veces en el género, como también fijar la atmósfera en la magnificente fiesta horas después de la graduación, pero evidentemente la película se alimentó de esta situación cotidiana para convertirla en un claro tópico que ha servido para las demás comedias de ‘high school’. Pero aparte de esta situación que se lleva el protagonismo, la película también pretende mezclar las diversas historias paralelas de los demás personajes en los cuales se retrata la pérdida de la virginidad, el valor de la amistad y el abandono total de los estereotipos. Respecto a sus actores, pues bien, tiene un buen reparto pero las interpretaciones no son para nada trascendentales –o bueno, al menos Love-Hewitt fue nominada a un MTV Movie Award- y estos son acompañados de una infinidad de extras que interpretan personajes unos en mayor o menor importancia pero que divierten y se aprende a tomarles simpatía.

Aunque la película no es considerada un clásico y realmente está en el olvido total, los directores intentan hacer un buen trabajo en el que el dinamismo por presentar a los personajes y sus posteriores experiencias no se confunden e intentan captar toda la atención aunque el resultado muchas veces sea fallido. Optaron también por elegir una bonita banda sonora en los que se destacan clásicos y canciones rock/pop muy pegajosas del 98.

No me sorprende la nota, es verdad, a muchos no les gusta, porque puede que decline un poco a ratos y no sea la super comedia. Para mí, el resultado final es sobresaliente, con seguridad que no será para ver todos los días pero sí en un buen momento para recordar lo que fue el colegio alguna vez.

Lo mejor: Banda sonora y personajes.
Lo peor: La gran cabida que le daban a las patéticas y muchas veces aburridas escenas de Kenny.