Matrix: Revoluciones

Viendo la nota que le pongo mi opinión está más que clara. Una auténtica bazofia. Por ello desgranaré a continuación algunos de los momentos que más me impactaron.

Momento 1, o como poner más profesiones inútiles: Sí, por si no teníamos suficiente con oráculos, hacedores de llaves, arquitéctos y demás, ahora aparece el ferroviario. Este fue el momento en que decidí que iba ser un truñal de film. Ver un homeless en la estación "mobil ave" junto a la familia de Apu era más de lo que mi mente pudo resisitir. Que alguien me conecte a Matrix please!

Momento 2 o donde narices están estas discos en mi ciudad: De repente entramos en un antro super fashion, lleno de tías buenas rollo gótico tocandose entre ellas. El mongo de Seraph y compañía aguan la fiesta. Impagable Monica Bellucci poniendo cara de orgasmo ante la violencia exhibida. Mientras tanto el amigo Merovingio sigue dando la brasa con sus discursos metafísicos sobre causalidad y demás historias.

Momento 3 o hemos cambiado la actriz del oráculo y tenemos como justificarlo: Aparece una señora mayor que dice que es el oráculo y que ha perdido bits. Cosas de la senilidad supongo. Eso si le siguen gustando los caramelos y las cookies y sus peroratas se ponen más plastas que nunca. Mientras la hija de Apu sigue por ahí sin saber muy bien que hacer.

Momento 4 o la definición del miedo: Trinity acompañará a Neo en su misión suicida (que sorpresa!). Tiene tanto miedo que tarda diez minutos en atarse una bota. Lo más grande. Aquí es cuando Los guionistas debían ir de ácido hasta los topes, otra justificación para la frase más absurda de la historia no hay. Impagable también la gran complejidad emocional que muestran los rostros de nuestros protagonistas, entre el tedio y el asco mutuo. Si señor, eso es química. Mientras Niobe dice que no cree en la profecía pero si en Neo. Admirable, ñoño y estúpido pero admirable igualmente.

Momento 5 o como confiar en los hombres: Dejan al principal sospechoso de cargarse dos naves y toda su tripulación bajo la intensiva y opresiva vigilancia de la médica de abordo. Lo que pasa a continuación? Adivínenlo, no es tan difícil. Lo que sí resulta de todo punto incomprensible es que el resto de la tripulación se extrañe de lo que ha pasado. Si todos los humanos son tan listos no me extraña que las máquinas ganaran la guerra.

Momento 6 o las gruas de Ripley pasaban por ahí: Vale, la escena de la batalla del muelle es lo mejor con mucha diferencia, apabullante, espectacular y responsable de la única estrella de mi valoración. Ahora bien, se ve que en Sión tenían los restos de serie de las gruas de "Aliens", así que nada un poco de tunning y a disparar.

Sigue en spoiler

Después de deslumbrarnos en Mátrix y habernos dejado algo indiferentes en Reloaded llega a nuestras pantallas Revolutions; la tercera y última entrega de la saga de los Wachowski. En esta ocasión se sigue apostando a nuestro pesar por lo romántico en cuanto a Neo y por lo cómico en cuanto a Smith. El salvador del mundo sigue empeñado en comerle la boca a la novia escena sí escena también. Para mi gusto sobra. Manía esta del cine de querer meterle cañonazos de amor a todo. Un mesías ha de estar centrado en lo que tiene que estar, como lo estuvo el bueno de Jesús. De veras que no se a que viene la escena del calentón en el ascensor. Hay producciones en las que no es necesario tirar de los enamoramientos; Y Matrix es una de ellas.

En cuanto a la imagen del agente Smith poco se podía hacer ya; en Reloaded metieron la variante de -chistes y coñas- entre él y sus fotocopias convirtiendo al malo en un graciosete poco representativo del papel que debería simbolizar. Ahora en la tercera resultaba demasiado tarde rectificar, el agente ya se lució en la anterior. Prefiero la condición seria y amenazadora que paseó únicamente en la primera; se antojaba de carácter mucho más atinado.


Aunque no todo son quejas. En Revolutions hallaremos un final de epopeya decente en donde junto a la lucha de Neo por acabar con el reinado de las máquinas asistiremos a una decente batalla entre Sion y las máquinas.
Resaltar las increíbles escenas de acción resulta inútil, ya que si hemos llegado hasta la 3 sabemos de sobra hasta donde se es capaz de llegar con una coreografía, una gabardina y una cámara lenta.
Lo que sí me apetece mencionar es lo espectacular de la lucha bajo la abundante lluvia. El agua le da un toque soberbio al combate. No se lo pierdan.

Una vez pudimos ver con amargura como una gran película como Matrix (1999) se devaluaba con una sucesora muy inferior (y sin sentido, pero con efectos especiales) como Matrix Reloaded, podemos decir tras el visionado de esta tercera y última (?) parte de la trilogía (que sigo opinando que nunca debió serlo) que es superior a la vista meses atrás.
En ella se adentra más en la historia de amor entre Neo y Trinity; se profundiza más en personajes que en Reloaded quedaban muy confusos y hay escenas de acción de gran espectacularidad (la batalla contra los centinelas en Zion). Además de todo esto, se resuelve la relación Neo-Smith (al estilo de dibujos manga, todo hay que decirlo) y se le da un final abierto para que la gente haga sus conjeturas.
En definitiva, para los que Reloaded les dejó muy insatisfechos (incluso cabreados como a un servidor) esta entrega de la peripecias de Neo y su profecía particular le dejará más satisfecho (Graham Hess)

Es cierto que "Matrix Reloaded" supuso una importante decepción, pero al menos se podía salvar en el aspecto filosófico-religioso, dejando un atisbo de esperanza en nosotros, los espectadores, sobre todo por su buen final. Así que "Matrix: Revolutions" tomaba un relevo algo complicado, en el que debía poner el punto y final a la trilogía a la altura de las expectativas. Sin embargo, nos encontramos con una película decepcionante, sí, llena de acción y con unos efectos especiales "alucinantes", pero tremendamente aburrida, incapaz de crear interés. Nada queda de aquel mundo que aquella fabulosa primera entrega había creado en nuestra imaginación. Sin ninguna duda, la peor de las tres. Para mí, sólo existirá un "Matrix". Puntuación: 3.

Tras un pequeño batacazo en una segunda parte más preocupada de ofrecer acción a raudales que en solventar el guión los WB consiguen poner un punto y final digno a una de las películas más influyentes de los últimos tiempos.

Épica poética para una película que casi nadie entiende y que todo el mundo critica. Si bien el guión no está del todo conseguido (sobre todo en el plano de la caracterización de los personajes) sí cumple (con creces) en la trama informática y electrónica llevándote a un mundo y un entorno absorbente. La batalla final se encuentra en un lugar privilegiado de mi lista de batallas memorables.

No llega a la intensidad narrativa de la primera parte (y no aporta la innovación que aportó esta) pero sí entretiene y absorbe (siempre que la entiendas. Es una lástima que los personajes tengan tan poca personalidad (con excepción de el Sr. Smith).