Gimme Danger

Queda en manos de los fans de "The Stooges" si falta o sobra algo en este documental en el que Jarsmuch parece rendir homenaje y conmemorar el regreso en el 2013 de esta banda de Detroit de finales de los 60 (del 67 al 73) que marcó un antes y un después anticipando el punk-rock y con una puesta en escena acaparada por un "simiesco" James Newell Osterberg más conocido como Iggy Pop.

Jarmuch lo cuenta, dejándose la parte más obscena y desagradable de las actuaciones de Iggy en el cajón, de forma ágil y divertida mezclando de forma equilibrada los testimonios de los miembros de la banda, las imágenes de archivo y la animación en un montaje notable y atractivo, sin olvidar los temas más emblemáticos de sus tres álbunes principales que no tuvieron gran repercusión mediática, al contrario que sus inclasificables y siempre provocativos directos.

Seis años de vivir al limite de un grupo de jóvenes desarraigados que desarbolados por la droga vivieron su sueño de cambiar el mundo en un tiempo donde el rock parecía tener la fuerza para cambiarlo.

Ahora, algunos de ellos ya fallecidos, renacen en la pantalla y los escenarios para dar testimonio de esa frase tan sobada que dice que los viejos roqueros nunca mueren.

Es verdad que siento afinidad por este director que se remonta a su estreno en España de Extraños en el paraíso, lo que no me obliga a callar que esperaba más de él.
Gimme Danger es la clásica entrevista que ocupa gran parte de la cinta desde sus comienzos a la actualidad. Durante ese recorrido Jim J. refleja con la autenticidad de las manifestaciones personales de los Stooges deslizándonos sutilmente el giro que toman con los años cuando el dinero es importante y los peajes que la vida te obliga a pagar hace que te entren dudas si realmente querías haber llegado a esto.
Es de agradecer la muestra de fotografías, posiblemente personales y de imágenes de aquellos primerizos años lo que chirría en el documental es el abuso de tanta imagen en forma de dibujo animado tan obvia al hilo de cualquier comentario de Iggy.
Hecho en falta no sacar más provecho de familiares, gente cercana a ellos que nos ofrezcan diferentes puntos de vista de un hecho que consideren importante o aquel detalle que pudo marcar un acontecimiento.
Un último rasgo que podría afinar más el documental es la influencia que tuvieron en tantos otros grupos que los reivindicaron, entrevistas con sus componentes, con que canción los descubrieron, etc.
Jim J. si ha sabido sacar de la entrevista la visión contracultural que los Stooges ofrecían frente al hipismo imperante y las revelaciones que quitan glamour a los conciertos aparte de jugosas anécdotas del inframundo musical.
No puedo dejar de comparar este documental con el de Big Star, otro grupo no reconocido en su época y que considero es modélico a la hora de realizar este tipo de reportaje cinematográfico.

Supongo que si no te gusta la música de The Stooges o apenas la conoces, el interes en este documental decaerá bastante. Con todo, para los seguidores de la banda, los miles de fans de Mr. Iggy Pop, los melómanos y rockeros de todo el mundo, será una obra de referencia. Entretenida, bien hecha, por un director fan fiel del grupo como es Jim Jarmusch. Muy bien montada, bien documentada, basada en entrevistas a los miembros del grupo, managers, empresarios del negocio musical y toda persona relacionada con el mundo "stooge", Llena de infinidad de material de archivo (fotos y audivisual), en gran parte desconocido para el público. "Gimme danger" supone la biografia real y auténtica de The Stooges, el grupo americano de finales de los 60 que puso la primera piedra de lo que seria el Punk-Rock moderno y ha influido a centenarse de grupos, músicos y artistas del mundo

Los “Stooges” son una poderosa dinamo que aunó rock, free-jazz, blues y que dio comienzo a lo que posteriormente se conocería como Punk, con una actitud peligrosa, excesiva y totalmente nihilista. No se habla lo suficiente de la importancia que tiene para la historia del rock el seminal grupo de Detroit.

Estoy plenamente convencido que sin ellos el mundo del rock no sería tal y como lo conocemos, fueron pioneros, ángeles de cuero, sangre y sudor; unos verdaderos avanzados a su tiempo, tanto fue así que se les ha reconocido como quintaesénciales tras décadas de estar separados y este documental los sitúa en el lugar que se merecen.

Acercarse a uno de sus conciertos en los 70 era una experiencia peligrosa, enérgica, llena de electricidad y chispazos de violencia, con una actitud kamikaze por parte de uno de los más grandes frontman de la historia, Jim Osterberg o lo que es lo mismo, el único e incomparable Iggy Pop. Su actitud a medio camino entre un yonki arrastrado y una glamurosa estrella de rock y sus movimientos reptilianos, explosivos, totalmente arrolladores, hacían que la experiencia fuera única. Aún recuerdo una de mis más preciadas adquisiciones, un disco pirata llamado “Metallic K.O.” en la que, si bien el aspecto musical del grupo no se consigue apreciar debido a una grabación paupérrima, sí que consigue transportarte a un directo de los Stooges, en mis oídos aún resuenan las botellas explotando en el escenario y la actitud de Iggy, insultando y provocando al público, animándoles a seguir arrojándoles objetos. Punk puro antes del Punk.

El director, colega íntimo de la Iguana, y genio absoluto de esta maravilla llamada cine, consigue lo impensable, dejar su personalidad a un lado y dar todo el protagonismo a los músicos, consiguiendo una película honesta y con gran peso y valor documental.

Imprescindible para fans y para neófitos, un grupo capaz de alumbrar obras tan extremas como “Funhouse” y de pergeñar hitos musicales como 1969, I wanna be your dog, No fun, TV Eye, Search and Destroy, Gimme Danger… tendría que ser (re)conocido universalmente.

PD: y la carrera de Iggy en solitario da para otro documental, ahí te lo dejo Jarmusch.

Gran documental sobre Iggy PoP & Stooges. Un entrañable recorrido por los años salvajes, su música , su trayectoria, sus excesos... Altamente recomendable.