Probablemente la película más pretenciosa que he visto jamás. Un auténtico acto de egocentrismo hecho película.
Si hay algo que odio son los directores que abordan la realización de una película con la total convicción de que están haciendo una obra de arte.
Esta película no sólo no es una obra de arte, sino que es aburrida y con una narración tan entrecortada que elimina cualquier continuidad que pudiera pretender la película y la hace tediosa de ver.
La dirección es chapucera, ya que el director pretende innovar en la estética, pero para eso hay que saber. Y el señor Jarmusch ha demostrado con esta película que querer no es poder.
Esperaba mucho más de esta película. Que gran chasco, otra película sobrevalorada.

Uwe Boll tiene un plan. Es inteligente, mucho más de lo que todos nosotros creemos. Su plan ha sido estudiado a la perfección. Y todos nosotros formamos parte de él. Quiere pasar a la historia.
Pero eso no es fácil.
En un año, ven la luz cientos de películas en todo el mundo. CIENTOS.
¿Quién recuerda a la mayoría de directores anónimos que dirigen alguna que otra película que pasó desapercibida y de la que nunca más se supo?
Pocos directores llegan a tener nombre. No todo el mundo llega a ser Tarantino, Lynch, Carpenter...
Y sin embargo, todos conocemos a Uwe Boll. ¿Por qué?
Sencillo. Porque él lo quería así.
Sus films son malos. Muy malos incluso. Pero creo que no es por accidente. Una mano perversa dirige esas obras con malignos objetivos. Sé que Uwe puede hacerlo bien porque he visto "Postal" que, en mi opinión, es toda una declaración de intenciones por parte de mister Boll. Y no estaba nada mal.
¿Qué vemos aquí? "En el nombre del rey" parece escrita por (y para) un niño de 10 años. ¿Casualidad? Lo dudo. ¿Falta de talento? No lo creo.
Uwe Boll consigue lo que quería desde el principio:
1 - Los niños de 10 años (público al que va dirigido realmente esta película) saldrán encantados. A mí me habría encantado con 10 años. ¡Hasta la habría comprado!
2 - El nombre de Uwe Boll sonará en el mundo entero. Cientos de personas repetirán su nombre una vez, y otra, y otra. Para mal. ¿Y qué? Mejor ser odiado que ignorado.
3 - Todos sus enemigos irán a ver sus films para poder criticarle. Para tener más razones para odiarle... ¡Y eso es taquilla! Y taquilla... ¡son más films!

Yo con esta película me he reído mucho. A todos los que tengais ahora veintimuchos, como yo, os recuerdo: "Desaparecido en Combate", "El Guerrero Americano", "Tortugas Ninja"...
Hace 15 años nos habría encantado ver a los ninjas. Y no habríamos reparado en que los monstruos... ¿Crox? parecen "masillas" de los Power Rangers (película que ví hace más de 10 años y me gustó, y también a vosotros, seguro). Ni nos habría importado Que Ray Liotta ni siquiera vaya disfrazado. Ni tampoco nos molestarían las escenas calcadas de "El Señor de los Anillos", pero en casposo (más, si cabe).
Vedla con los ojos de un niño e intentad disfrutar.
O gritad furiosos las desvirtudes de Uwe.
Sea como sea, su nombre suena en boca de todos.
Ha ganado.

Van Damme lleva años intentando demostrar a la gente que es un buen actor. Durante años no ha parado de intentarlo (especialmente últimamente, con películas como Replicant). Y sin embargo, ahora que ya tiene muchos años a la espalda, al fin lo ha conseguido.
Aquí podemos ver a Jaen Claude Van Damme interpretando su personaje no sólo con eficacia, sino superando cualquier espectativa que pudieramos tener puesta en él.
Le otorga una melancolía y una decadencia al personaje que convierte a un personaje un tanto tópico (aunque en su premisa interesante) en un personaje profundo, reflexivo y que durante buena parte del metraje parece estara punto de tocar fondo.
Por otro lado, la dirección del film es más que correcta. Fellows apuesta por una estética sucia, un juego de cámaras interesante y unos tiroteos bastante realistas. Además, el empleo de la música casa bastante bien.
Las pegas: El guión del film sólo funciona a ratos (el final está francamanente fuera de lugar y da algo de vergüenza, dicho sea de paso), el resto de los actores no están a la altura y muchas de las escenas de acción son totalmente innecesarias en el film, haciendo que que pierda su calidad de forma innecesaria.
Conclusión: Si Van Damme aprende a juntarse con las personas adecuadas, pronto le estaremos aplaudiendo de verdad, porque ha dejado claro que ya no es luchador. Al rodar esta película se convirtió en actor.
Me quito el sombrero.

Pues a mí si.
Me gusta que no tengan que morir todos los personajes con más de una línea de diálogo como en todo el terror adolescente.
Me gusta que el asesino sea sencillo matando, y no absurdamente barroco.
Me gusta que la policía juegue un papel en el film.
Me gusta que no aburra.
Me gusta que el asesino se mueva por una motivación que no sea simplemente "matar".
Me gusta que no le guste a nadie más.
Y, sobre todo, me gusta que el asesino no lleve una careta estúpida.

Y con la de MIERDAS que he visto en el este género (por otro lado, mi favorito), esta se ha ganado su nota.

Pobre fotografía, guión mediocre, actores pésimos... producto nacido para ingresar en las anodinas listas de esos films lanzados directamente al mercado de DVD. Y, sin embargo, tiene algo. Una extraña capacidad para inquietar.
No sé exactamente qué fué, pero me hizo tensar los músculos más de una vez a lo largo de toda la película.
¿Cómo un film tan ínfimo y de tan baja calidad me gustó tanto?
Algo debe tener, aunque nadie se lo haya visto.