Sin ser de las mejores cintas de Brooks, la película me parece entretenida y muy emotiva por momentos. Destacables las actuaciones de Van Johnson y una encantadora Elizabeth Taylor. Creo que fue un título infravalorado en su época.

Título menor en la filmografía de Clark Gable, se trata de un western bastante previsible y plano en su estructura. Sólo recomendable para irreductibles fans del género o como material de coleccionista.

Vomitivo el libro y la película. Pretender dar credibilidad a la sarta de sandeces de Brown es increible y encima va de culto. La película igual o peor.

La película más valiente del cine español en mucho tiempo, molesta para el imperio del prisoe, los mismos que montaron los gal y que ahora se arrodillan ante los asesinos fascistas etarras.
Un soplo de aire libre en el tan sectario panorama del cine español.

Las católicos tenemos que tragarnos todo tipo de ofensas por parte de unos medios de comunicación paganos y que odian la religión católica. Ello se ve claro en el mundo del cine actual; en el Hollywood actual dominado por el lobby gay y los poderes fácticos anticristianos, por no hablar del almorránico panorama del cine español.
Los creyentes cristianos hemos tenido que aguantar auténticas blasfemias como "La última tentación de Cristo" o "La vida de Bryan"; por no hablar del más reciente y nauseabundo "Código da Vinci". Entonces por una vez que se hace una película que trata de reflejar el sufrimiento de Cristo con dureza, pero tal y como fue ( si es que en la realidad no fue más duro todavía), eso a mucha gente le parece mal y tachan a esta película de violencia gratuita, cuando es de las pocas veces que la sangre y la dureza de muchas escenas tiene su razón de ser, para que se vea claramente el sufrimiento de Cristo; sin duda la historia de amor más grande jamás contada. Sensacional y valiente Mel Gibson sabiendo que iba a recibir palos de todos los que quieren destruir y aniquilar los valores cristianos, a los que les repatea especialmente, que este peliculón lo que pretendía y logró es volver a revitalizar precisamente el mensaje evangélico de Jesucristo con el ejemplo demoledor del sufrimiento de éste.