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Voto de Luciérnaga:
4
7 de marzo de 2011
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los pingüinos emperador tienen el canto como recurso tradicional para encontrar pareja y tener descendencia. En una ocasión, sale del cascarón uno que no sabe cantar, Mumble, aunque con talento para el baile. La trama versa, principalmente, sobre las dificultades que se encuentra este pingüino para ser aceptado por los demás.
En un principio, la película puede tener gracia, aunque siempre proviene de los mismos elementos. Tiene un trasfondo interesante, la contaminación y la sobreexplotación humana de los recursos, pero no se trata de una manera realista ni se aprovecha al máximo. Parece que ya está todo solucionado, pero no es así. Parece que todo es muy fácil, porque los humanos pueden hablar con los pingüinos.
Esta película no trata sobre un principio ecologista porque luchar para que el medioambiente y sus especies perduren no es fácil. Se crea un sucedáneo para terminar con un final feliz y rosa.
Además, presenta saltos temporales*en momentos cruciales que te hacen pensar que el guionista no sabía cómo sacar al pingüino de esa situación, y numerosas incoherencias**. Quizá el público más pequeño pase por alto esto, pero obviamente aquel que pueda mirar la película con un poco más de crítica, se dará cuenta.
Es cierto que tiene a su favor la calidad de la animación y la música, pero todo lo que tiene en su contra ha hecho que haya sido una experiencia más mala que buena.
En definitiva, película para entretener a los más pequeños.
En un principio, la película puede tener gracia, aunque siempre proviene de los mismos elementos. Tiene un trasfondo interesante, la contaminación y la sobreexplotación humana de los recursos, pero no se trata de una manera realista ni se aprovecha al máximo. Parece que ya está todo solucionado, pero no es así. Parece que todo es muy fácil, porque los humanos pueden hablar con los pingüinos.
Esta película no trata sobre un principio ecologista porque luchar para que el medioambiente y sus especies perduren no es fácil. Se crea un sucedáneo para terminar con un final feliz y rosa.
Además, presenta saltos temporales*en momentos cruciales que te hacen pensar que el guionista no sabía cómo sacar al pingüino de esa situación, y numerosas incoherencias**. Quizá el público más pequeño pase por alto esto, pero obviamente aquel que pueda mirar la película con un poco más de crítica, se dará cuenta.
Es cierto que tiene a su favor la calidad de la animación y la música, pero todo lo que tiene en su contra ha hecho que haya sido una experiencia más mala que buena.
En definitiva, película para entretener a los más pequeños.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
*Le echan la culpa a Mumble de la desaparición del pescado y se embarca en un viaje para descubrir quién es el responsable y acaba metido en un zoológico… De repente, en la siguiente escena, está de nuevo en su casa, ¿cómo? Resulta que se ha puesto a bailar claqué y los humanos han dicho “Ala, vamos a llevarlo de vuelta a casa”. Es un sin sentido. Porque un pingüino “baile” no se lo van a llevar de vuelta, ¿a caso sus pataditas describen un mensaje en Morse?
Una vez en casa, los humanos le pegan un dispositivo que permita localizarlo… Cuando llegan, todos los pingüinos bailan, y no se les ocurre otra cosa que ponerse a bailar, ¿cómo saben entonces que el problema es que no hay pescado? ¿y toda esa repercusión en los medios cómo y por qué? Lo más escandaloso es que toda esta comunicación sucede en la última parte de la película…
**Y por cierto, el Doctor Amor llevaba ese plástico enganchado en el cuello desde el principio de la película, ¿qué es lo que hace que de buenas a primeras se asfixie? ¿le ha engordado el cuello de comer pescado? A no, que no había.
Una vez en casa, los humanos le pegan un dispositivo que permita localizarlo… Cuando llegan, todos los pingüinos bailan, y no se les ocurre otra cosa que ponerse a bailar, ¿cómo saben entonces que el problema es que no hay pescado? ¿y toda esa repercusión en los medios cómo y por qué? Lo más escandaloso es que toda esta comunicación sucede en la última parte de la película…
**Y por cierto, el Doctor Amor llevaba ese plástico enganchado en el cuello desde el principio de la película, ¿qué es lo que hace que de buenas a primeras se asfixie? ¿le ha engordado el cuello de comer pescado? A no, que no había.