¿Quién no ha tenido que lidiar más de una vez con la situación de conocer al recto padre de tu novia? ¿O incluso algunos a la inversa, a conocer al novio liante de su hija? Seguro que la gran mayoría, por no decir casi todos, han pasado, al menos, por la primera opción y no suele ser un momento agradable. En esta película juegan con ambos puntos de vista y consigue calar especialmente porque son cosas que casi todos hemos vivido en la vida real.
A rasgos generales la cinta nos propone un entretenimiento sin más, es decir, estamos ante la típica película del montón, pero que funciona. Bajo mi punto de vista, y siempre hablando de estos géneros, me gusta que se utilicen cosas cotidianas porque consigue que enfaticemos o incluso que nos pongamos en esas delicadas situaciones una vez más.
La historia se basa, en esencia, en un padre de la vieja escuela que conoce al novio macarra de su hija adolescente. Polos totalmente opuestos que, obviamente, chocan en casi todo. Sabe jugar bien sus cartas, incluso con algunas escenas francamente bien ideadas para la ocasión. No obstante no nos engañemos, el guión es el que es, no pretende engañar a nadie. Tiene los típicos esquemas en esta clase de cine, la misma forma de arrancar, el mismo nudo y un desenlace previsible. Aun con todo es entretenida, se deja ver y creo que ofrece lo que prometía su tráiler.
El reparto tira bastante del carro, al menos todo lo que permite este tipo de guiones. Bryan Cranston, el eterno Heisenberg de la excelente ''Breaking bad'' es el padre protagonista. Justo hace poco veía ''Infiltrado'', otro de sus últimos trabajos, y es evidente que talento le sobra. Encaja tanto en papeles serios como en la comedia. Se le ve fresco, a gusto y la verdad me ha convencido; tiene sus puntazos. James Franco es la contraparte, el novio liante y la otra cara conocida del elenco. Es un actor que me gusta especialmente en comedias gamberras. Aquí es pasable a secas, no es de sus mejores trabajos. Y el resto olvidadizos sin más, nada destacable (cameos y cosas así aparte).
Tratándose de una comedia hay que hablar sobre sus gags y puntos cómicos. ¿Hace gracia? Si tuviera que dar una respuesta sería que sí. Personalmente me sacó varias carcajadas, pero como siempre digo sobre gustos no hay nada escrito. Lo que a uno hace mucha gracia a otro le puede ser insignificante, y viceversa. No obstante contiene una cantidad bastante aceptable de gags, unos mejores que otros, pero que aprueban. No es de las mejores comedias de los últimos años pero funciona bastante bien.
En resumen ''¿Tenía que ser él?'' es una cinta del montón, que no os perdéis gran cosa si no la veis, pero que si buscáis un entretenimiento barato y simple quizás os sirva. Hay que saber a lo que se viene para luego no pedirle cuentas a nadie y como consejo os diré que la veáis sin echarle un ojo al tráiler; gana bastantes más enteros.

Lo mejor: Es entretenida, la idea principal, algunos gags muy buenos y Bryan Cranston, es un pedazo de actor.
Lo peor: El desarrollo, especialmente en el tercer acto, se vuelve demasiado previsible.

* Un 5 *