Podría recurrir a todos esos recursos cobardes del "No sos vos, soy yo" o del "es que me pilló en un mal día para algo tan profundo.", pero voy a ir a cara descubierta: Paterson es una gafapastada pretenciosa, hueca e intensamente aburrida. Soy de la opinión de que una película cargada de lirismo, sencilla y de ritmo pausado te puede tener dos horas en éxtasis pegado a la butaca, pero en este caso Jarmusch tira de su "universo personal", ese término pintoresco que se suele utilizar para defender y/o justificar las excentricidades dificilmente defendibles y/o justificables, para darnos una lección magistral del bostezo. El intríngulis de este invento es un Adam Driver supuestamente profundo y sensible que vive cómodamente instalado en el Día de la marmota, salvo por el hecho de que aquí no nos descacharramos con Bill Murray, sino con lo siguiente:
- Me despierto (sin el "I' got you babe") , miro el reloj, desayuno. Intercambio alguna frase absurda con la loca de mi parienta.
- Voy al tajo, garrapateo unos poemas... peculiares y arranco el bus.
- Recorro las calles pendiente de las interesantísimas conversaciones (sarcasmo) de los pasajeros.
- Me tomo el bocata en soledad, porque la gente profunda piensa en sus cosas mirando a algún punto indeterminado del horizonte. Y por supuesto, no tengo móvil: eso es incompatible con un ser humano profundo.
- Vuelvo al bus, recorro las calles, aparco el bus, vuelvo a casa donde me espera mi esposa, que se puede etiquetar como un torrente de creatividad o como una desequilibrada de tomo y lomo. Ceno.
- Como soy alguien profundo, no veo la TV: so pretexto de pasear al perro me voy a un bar sórdido donde bebo hasta que todo se pierde en la bruma y apenas recuerdo cómo llegué a casa... sería el perro.
- Y vuelta a empezar.

Claro, así contado parece una absoluta apología del tedio. Y lo es. Adam Driver no cambia la p* jeta en todo el metraje, no aporta ni un solo matiz que permita entrever la (supuesta) vida interior espectacular que posee, no hace nada de interés, no dice nada de interés: solo es un tipo de Paterson, NJ, que se llama Paterson, y que garrapatea cosas en un cuaderno en el sótano como podría estar fabricando una bomba para demoler un edificio federal. Y ya está: no hay sentido del humor, algún plano brillante, un triste diálogo que haya sido escrito para humanos y no para besugos... para leer más despotriques, ir a la zona de spoilers.