Encantada tiene todo los ingredientes para ser el bombazo de las próximas semanas. Una historia de princesas, brujas malvadas y héroes como las de siempre pero tratada con la suficiente gracia y originalidad como para resultar divertida y novedosa.
Encantada tiene la ingeniosa idea de trasladar a unos típicos personajes de cuento de hadas al Nueva York actual, con los equívocos y situaciones divertidas que eso conlleva. El desarrollo de esta divertida idea resulta previsible, correcto y seguramente no aprovecha todas las posibilidades que la historia tiene. Pero, aun así, el director Kevin Lima dirige la película con ritmo aunque sin resultar en ningún momento brillante. El humor que salpica la historia va desde lo ingenioso y original hasta lo más paródico y facilón, pero sin caer nunca en la vulgaridad.
En cualquier caso, lo mejor de Encantada, es la presencia de su protagonista femenina, Amy Adams. Como ya demostrara en Junebug, película que le proporcionó una candidatura al Oscar, su rostro es prodigioso a la hora de expresar todo tipo de emociones. Aquí su interpretación vuelve a desprender un entusiasmo desbordante. Ella es la auténtica estrella de Encantada, y el principal motor del éxito de la película.