La última profecía es un filme que parece producción del canal SyFy, sólo que protagonizada por una estrella cada vez mas decadente, el bien recordado Nicolas Cage.

Apocalíptica y religiosa en su discurso, cuenta la historia de una familia compuesta por el personaje interpretado por Cage, un piloto de avión que debe volar de NY a Londres en el día de su cumpleaños, su esposa, una fanática religiosa, el hijo pequeño y su hija mayor, que acude al aeropuerto a darle una sorpresa a su padre y lo sorprende en pleno flirteo con una azafata.

Cuando el vuelo ya va rumbo a su destino, millones de personas desaparecen de la faz de la Tierra dejando sus ropas y demás pertenencias flotando ante el asombro de todos las personas, lo que deviene en un caos total.

La acción del filme se divide entre lo que sucede en el avión piloteado con Cage quien trata de salvar a la tripulación que aún sigue dentro del avión, quienes no entienden nada de lo que sucede, mientras la hija busca a su hermano y su madre que también han desaparecido, por lo que ambos harán lo imposible por volver a reunirse.

A pesar de su premisa interesante, la película es fallida desde el guión mismo, y ni hablar del resultado final, una película con una falta de calidad en su acabado, con un montaje descuidado, música de ascensor para dar cohesión a planos que nada aportan y efectos especiales poco lucidores.

Una película flojísima que inevitablemente se mueve hacia el humor involuntario en escenas que intentan generar tensión y suspenso.