Adam Shankman nos tiene acostumbrados a comedietas que, con mucho esfuerzo, nos intenta entretener como en pelis que ya dirigió como 'Planes de boda' con JLo y el novio de la Pe el McCounaghey o 'Un canguro superduro' con el cachas Vin Diesel y que, ahora vuelve a repetir con Steve Martin en la secuela de 'Doce en casa'.
Típica y tópica película con gags vistos hasta la saciedad al servicio de la reina cómica yanki Queen Latifah y al ya apagado Steve Martin (aún lo recuerdo en sus films 'Roxanne' versión moderna de Cyrano de Bergerac, 'Pennies from heaven' de Herbert Ross, 'La tienda de los horrores' interpretando a un dentista muy peculiar, films muy aceptables) cómico que siempre me había gustado y que en esta peli los gags que interpreta los salva pero con mucha discreción.
Los secundarios Eugene Levy (el papá entrometido de 'American pie')o la gran Joan Plowright, qué hace en un film como éste???, apenas aportan al film de lo que ya hayan hecho los protas.
Nada más que analizar sino que es producto para el espectador con risa muy fácil.

El 9º pasajero