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Voto de Sandro Fiorito:
6
Thriller. Acción La única conexión del ex-agente especial Cha Tae-sik con el mundo es una niña que vive cerca de su casa. La madre de la pequeña trabaja para una organización mafiosa que se dedica al tráfico de drogas y le confía a él la mercancía. Cuando los traficantes se dan cuenta, secuestran a la madre y a la niña. Además, confunden a Tae-sik con un camello. (FILMAFFINITY)
5 de abril de 2012
19 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
Su capacidad para transmitir sensaciones y no cortarse un pelo a la hora de dibujar las escenas de acción más explícitas y violentas sigue el ejemplo mostrado en los últimos thrillers de acción sur-coreanos, que han creado un género en el que ya sabes a lo que te vas a enfrentar: lo más oscuro de la condición humana visto desde la perspectiva de unos personajes desalmados inmersos en una ascendente y sangrienta espiral de violencia, con protagonistas que generalmente no tienen absolutamente nada que perder. Se aferran a sus propias miserias, a cualquier desconocido que puede ser la única persona con la que puedan estrechar un vínculo medianamente familiar en sus vidas, a esa niña que, como en esta película, comparte con el protagonista el hecho de ser una solitaria, abandonada e incomprendida víctima de lo incontestable. Es la fórmula de películas como “The Yellow Sea” (2010) o la brillante “The Chaser” (2008).

Aquí su personaje central es Tae-Sik (Won Bin), un enigmático propietario de una casa de empeños que refleja su oscuridad en el traje negro en el que siempre va enfundado. Aunque aún no ha estrechado ningún vínculo demasiado profundo con So-Mi (Kim Sae-ron) -una niña que siempre ronda su tugurio- la presencia de ésta cerca de él deja entrever que, en el fondo, el imperturbable protagonista deja abiertas las puertas de poder sentir algún tipo de emoción. El principio de ese “algo” se dinamita cuando unos mafiosos van a por la madre de la pequeña, una prostituta que les ha robado droga. Lo que respecta a las escenas de acción que se suceden a continuación es -a mi modo de ver- impecable, tanto por el pulso por el que se manejan como por la crueldad y cierta originalidad de las mismas.

Si bien es cierto que no rompe esquemas respecto al cine de acción, aporta una frescura necesaria. Las artes marciales y los tiroteos se mezclan con los recursos más vastos e imprevisibles, así como con sorprendentes peleas de cuchillos en las que la rapidez y pulcritud de los movimientos se digiere con mucho interés.

(Sigue en el SPOILER sin desvelar detalles del argumento, por falta de espacio)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Sandro Fiorito
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