Lamentable parodia del llamado género de asesinos en serie. No hay por donde coger tamaño montón de despropósitos. Su irrisorio, absurdo e inverosímil guión forma ya parte del genuino mundo de las películas basura.
Que se intenten reír del personal con semejantes artificios es algo que empieza a cansar. La receta es muy sencilla: Cogemos unos actores bien conocidos, (aunque sean dos putos dinosaurios malos de solemnidad), los introducimos en una historia de asesinatos, (da igual que el guión sea una puta mierda, basta con que tenga un par de giros argumentales y un final que el espectador recuerde durante un cierto tiempo), lo rehogamos con un buen trailer y una buena campaña mediática y ya tenemos peliculita lista.

Esto es Hollywood, un auténtico engañabobos, una gigantesca fábrica de hacer dinero a base de gilipolleces supinas. Solo alguna mente privilegiada, en algún momento de divina inspiración es capaz de hacer una película mínimamente decente.
Pero en fin, es lo que hay. Solo nos queda rezar como rezaba el protagonista de este pedazo de mierda, para que los genios del celuloide causantes de semejantes bodrios se ahoguen en su propia estupidez.

Como diría el ilustre "genio" televisivo citado en el título de esta crítica: "Así son las cosas y así se las hemos contado"