Haz click aquí para copiar la URL

A la caza

Intriga. Thriller Un policía (Al Pacino) se ve obligado a infiltrarse en los ambientes gays más sórdidos de Nueva York para atrapar a un asesino de homosexuales. (FILMAFFINITY)
<< 1 7 8 9 10 11 >>
Críticas 54
Críticas ordenadas por utilidad
20 de octubre de 2018
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
William Friedkin el director de "El Exorcista" la famosa película de terror con Linda Blair dirige a Al Pacino en "Cruising".
Es una de las películas de mi infancia, la ví muchas veces y a mí me encantó.
La actuación de Al Pacino como no puede ser de otra manera: Excelente.
Paul Sorvino el jefe de la mafia en (Goodfellas) excelente.
Es una película muy atrapante, entretiene y los Razzie exageraron para mi gusto.
Cierto es que a muchos no les gusta pero a mí me pareció genial.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
cripta
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9 de septiembre de 2011
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Película casi terrorífica que deja una sensación de desasosiego brutal. Quizás la trama se vaya perdiendo pasada una hora de metraje pero la sordidez alucinada con la que Friedkin impregna la historia te mantiene enganchado hasta el final. Final por cierto tan de Marte como la propia película.
paco
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
31 de agosto de 2022
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película seguramente más sórdida en la carrera de Pacino, de la de Friedkin y una de las de la historia del cine americano. Un thriller policiaco sin compostura académica que ofreció, de segundo plato, todo hay que decirlo, al sucesor de Vito Corleone la ocasión de lucirse como actor una vez más. William Friedkin ('The French Connection', 'El exorcista') adaptó la novela homónima de Gerald Walker y terminó por brindarle a Al Pacino uno de esos personajes que todo actor dice querer, uno de esos con riesgo, de propensión directa al ruido, nada amodorrado en la comodidad. La ambigüedad sin mesura es un arma de doble filo utilizado con perfidia en este film: por un lado, la perspectiva sexual siempre ofrece dudas acerca de hacia qué preferencias se orientan más los gustos de Steve Burns, el papel de Pacino, quien encarna a un policía encargado de investigar la secuencia de crímenes acontecidos en la comunidad gay en Nueva York, momento creciente en paralelo a la realidad del colectivo homosexual del que se aprovecha para armar una trama llena de tenebrosidad, además de las citadas ambigüedades.
El segundo punto por el que siembra la duda razonable, se sobrentiende con malsana intención, se encuentra en la misma investigación del turbio caso. Realmente la incertidumbre sobre la identidad del asesino se prolonga hasta sus últimas consecuencias, es decir, se juega intencionadamente con ella hasta el punto de prestarse al debate. Todo parece indicar que es A, pero bien podría ser B, con un beneplácito planteado hacia el interrogante ante la irresolución de un asunto peliagudo, de demasiadas sombras, que se adentra con realidad insólita en mundos suburbanos, de perversiones chaperas y enfermedades venéreas.
Todo respira a indecoroso, a documental de investigación, a criminales que podría haber firmado Don Siegel junto a una versión sodomita de Tinto Brass. Sin embargo, es la mano firme del señor William Friedkin la que vuelve a endurecer la intriga, ya de por sí facilitada desde una argumentación opaca en la que Burns es como un péndulo que tan pronto oscila hacia un lado como hacia el otro.

Circulan por ahí versiones de distintos metrajes, con y sin censura, claro. Lo lógico es intentar hacerse con el contenido completo, por respeto, por clarividencia. Juega con nosotros como con la sexualidad indeterminada de Burns (grande Pacino), del que nunca sabremos a ciencia cierta hasta qué punto es absorbido por el trabajo asignado por su superior Edelson (Paul Sorvino) y los peligros y consecuencias sobre los que es advertido. Su vida personal con su novia Nancy (Karen Allen) termina siendo tan enigmática como la profesional.
Sin duda, una obra extraña con mucha dualidad que no deja nunca indiferente por muchos años que pasen por ella.
John Dunbar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de noviembre de 2022
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es la segunda vez que a veo y la primera me impactó mucho. Friedkin le tengo por un director competente, que sabe su oficio, que tuvo dos éxitos descomunales: The french connectión (1971), y El exorcista (1973) y que más tarde su estrella para el gran público y la crítica se apagó o se hizo más tenue, porque siempre ha seguido rodando hasta hace relativamente poco (2011, con Killer Joe, que tiene su gracia). Todavía está vivo, pero parece que no va a rodar más, pues han pasado muchos años desde la última cinta.
La sordidez está bien tratada, y todo parece indicar que el director tuvo que cortar parte del metraje, haciéndolo más suave, porque si no hubiera sido imposible que pasase cualquier examen de calificación por edades y materias. La música tiene que ser de la época, dura y sin concesiones.
No deja de ser una cinta de policías y crímenes. Algo especiales, por la temática y los personajes.
La transformación del personaje principal tiene su aquel. Su evolución está bien expuesta, con un cambio físico evidente: se hace más fuerte, se pinta el ojo, se viste de una manera muy característica. Es el fuerte de la película, su verdadera gracia.
Obviamente el trabajo necesariamente afecta a su relación personal en general, y a su relación de pareja en particular.
Al Pacino funciona con sus códigos, sus maneras, sus tic, pero en un actor tan amanerado este papel le va bien.
Paul Sorvino en su papel, aunque no te puedes quitar de la cabeza verle como un mafioso vestido de negro dando consejos a los recién llegados a la cosa nostra. Karen Allen está bien, sin más, no tiene mucho metraje pero cumple.
El tiempo no la ha tratado nada mal, se ve con interés y no ha perdido ese punto de frescura que requiere que las cintas no pierdan el paso del tiempo. La tengo por una cinta de culto, de esas que pueden estar en un estante por la temática y, sobre todo, por el tratamiento cinematográfico.
ÁAD
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
27 de agosto de 2011
8 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Jooooder, madre del amor hermoso que bodrio. Yo esperaba una película sordida, al estilo de "Hardcore" (con George C Scott), que te adentrase en los entresijos de cierto mundillo con un buen guión. Pero aquí el guión brilla por su ausencia, al igual que los diálogos o los personajes. No hay desarrollo de la historia, ni evolución de los personajes y los pocos diálogos que hay son totalmente intrascendentes.

Atentos a la escena del negro zumbón: de repente, mientras interrogan a un sospechoso, hacen entrar a un negro gigantesco en calzoncillos y con sombrero de vaquero. Y le da una hostia a Al Pacino. Y todo dentro de una comisaría!!!!!!!!!!. Probablemente de las escenas más estúpidas que he visto en mi vida.

El punto se lo doy por la fotografía y algun plano que merece la pena, el resto es basura.

Desde luego a Al Pacino se la metieron doblada con esta película. Se pensaría que iba a hacer algo polémico que le daría cache y lo que hicieron fue darle una basurilla de cuidado. No me extraña los comentarios que he oído sobre que Al Pacino siempre ha renegado de este engendro.
Siniest
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 7 8 9 10 11 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow