Jasón y los argonautas

Esta versión peta a la que se hizo en el año 2000; casi 40 años después y con un resultado menos efectivo, hasta en los efectos especiales.
Gran caracterización del Olimpo y de los dioses, así como de las bestias y seres que aparecen durante toda la historia.
La fotografía es más que notable, la música que acompaña, onmipresente, se acopla a la perfección en cada momento.
A la dirección no le tiembla el pulso (bueno, a los cámaras sobre todo, no hay movimientos a lo "dogma 95"). A los actores tampoco les tiembla el pulso, quizás un poco a Jasón cuando tiene que ligarse a su jamelga, muy a pesar de Hera, que querría para Jasón un estricto celibato y una continua devoción hacia ella. Las diosas son muy cojoneras, filosóficamente hablando.

Después de ver esta versión de "Jasón y sus amigos", la versión del año 2000 les parecerá algo así como unas zapatillas de correr muy usadas y ensuciadas por barro, col, coles de bruselas, arena mojada, "olor" a arena mojada (que ahora está muy de moda) y excremento de perro callejero (o de perro "faldero"). Y eso hace de esta versión (la de 1963) más notable, si cabe, que antes, pues demuestra que es muy sencillo pensar que uno puede superar una película, pero muy dificil llevarlo a efecto, y muy sencillo crear una obra superflua (que sobra).

Una gran hito del cine histórico.

Ésta es una de las mejores películas de aventuras que pude ver en mi infancia, quedó grabada en mi memoria y no he podido olvidarla, es la típica película que un nieto ve con su abuelo y ambos disfrutan como niños. Es un espectáculo de principio a fin, bien servido y muy recomendable, sobre todo para un público joven y sediento de fantasía. Partimos de la epopeya griega para describir un viaje por los confines de una tierra exótica poblada por seres extraños y amenazantes -algunos de ellos realmente terroríficos-: gárgolas aladas, gigantes de bronce, minotauros encabritados, animales quiméricos, dragones de siete cabezas, esqueletos con espada, pitonisas embrujadas y, cómo no, Doña Medusa haciendo de las suyas con su clásico peinado de víboras crepitantes. Un derroche de fantasía sin desperdicio y un regalo para el espectador.

Es entretenida al 100%, llena de misterio y de acción, muy bien ambientada, variada y amena; ya quisieran muchos realizadores actuales hacer algo así, pero ni con muchos más medios lo consiguen, y es que el secreto de una buena peli de aventuras está en el ritmo y en la ambientación, y no sólo en los efectos especiales. Incluso se agradece que sea un poquito ingenua, es una película entrañable, de muy grato recuerdo y que se deja querer.

Esta cinta británica tiene un poder visual portentoso, impactante, y muy difícil de olvidar, no en vano la sigo considerando a día de hoy todo un clásico del género, del cual podrían aprender mucho los cineastas actuales. Jasón es un plato fuerte de aventuras variadas -imposible aburrirse con esta propuesta-, está tan bien llevada que hasta podemos disculpar los decorados de cartón piedra y los monstruos acartonados, los efectos son precarios -sí-, pero es lo de menos, lo importante es la imaginación que destila y el hecho de que hace disfrutar a niños y mayores, y además lo hace sin recurrir a las trampas efectistas del cine actual. Por supuesto tiene el encanto trasnochado de lo añejo, la cinta es pura artesanía visual, puro amor al cine, y esto -además de ser un valor añadido-, tiene un mérito enorme considerando las severas limitaciones que había en la época a la hora de abordar un proyecto de tamaña magnitud, sobre todo en lo que respecta a los efectos especiales.

Me llama la atención la nota media otorgada por los usuarios -no sé qué más esperan-, pero para mí este Jasón se merece no menos de un diez. He visto pocas aventuras mejores que ésta. Una propuesta que no envejece. Para ser vista no una, sino mil veces. Imposible superarla.

Película de aventuras con efectos especiales antiguos y divertidos. La película avanza según las dificultades que tiene que superar Jasón para cumplir su misión. Le falta algo de ritmo. Los dioses del Olimpo intervienen en la trama, pero su papel resulta algo forzado. Tiene algún episodio curioso, aunque en general son algo sosillos. Me gustó particularmente el del titán de bronce. Me llamó la atención la discreta apariencia física de los personajes, para ser una película en la que aparecen muy escasos de ropa. El contraste con los actores de hoy en día es espectacular. Muy divertido el dios Neptuno. Película entretenida sin más pretensiones.

Interesante adaptación al celuloide del relato clásico sobre Jasón y los Argonautas. Nos encontramos ante una cinta de aventuras ubicada en la antigua Grecia donde Jasón inicia su viaje en búsqueda del vellocino de oro, objeto místico ubicado en el fin del mundo, que le permitirá recuperar el trono que legítimamente le pertenece, usurpado a su padre 20 años atrás por el codicioso Pelías.

Al contrario de lo que piensan muchos, para mi la primera media hora de la cinta es tal vez lo mejor, pues si bien aquí no hacen acto de presencia los enemigos sobrenaturales a los que ha de enfrentarse Jasón con posterioridad, es en esta primera parte donde se contextualiza perfectamente la obra de forma rápida pero eficaz, conocemos un mundo antiguo en el que se cruzan dioses y mortales, donde las deidades del panteón griego tratan a los hombres como fichas de ajedrez para su divertimento pudiendo llevar la dicha o la desgracia a sus vidas. Jasón se rodea de los mejores atletas de Grecia y monta en la embarcación construida por el viejo, pero vigoroso y pleno de fuerza Argos. La epopeya está servida.

Sin embargo a partir de aqui la historia se vuelve mucho más plana, en ocasiones bastante simplista y bien se podría resumir en una sucesión de combates contra sus inhumanos enemigos, donde el argumento peca por su ausencia y donde no hay personajes definidos, ni siquiera el mismo Jason. Los diálogos se hacen muy esquemáticos en beneficio de la acción. Memorable y para el recuerdo la lucha contra los esqueletos guerreros nacidos de los dientes de la Hidra.

Con todos sus fallos es una cinta entretenida, digna de ver.

Aunque no se tratara de una producción multimillonaria, entretiene y mucho, y la historia es bastante fiel a la contada con letras en los libros de la mitología griega.
De pequeño, las escenas que me pusieron la piel de gallina, aún hoy me fascinan (Talos).
Teniendo en cuenta que no era una super producción, y que los actores no eran de renombre, a mí me parece una joya del género.