Posesión infernal (Evil Dead)

Si Evil Dead (1981) es el icono que es en el cine, es gracias a su tono irónico haciendo del terror algo cómico, cuando Fede Álvarez coge esta película y se toma en serio ese tono irónico queriendo dar una sensación de miedo al espectador, no hace más que volverse el producto ultra explotado de terror que hemos visto mil veces en la última década y perdiendo obviamente todo su interés.
No está a la altura de sus predecesoras.

Salí muy decepcionado del cine (no porque no pudiera meterle mano a mi guapa acompañante femenina, sino porque la película me había decepcionado sobremanera). El tráiler prometía poco menos que la experiencia de horror definitiva: posesiones demoníacas, violencia explícita de la buena, sustos para pararle el corazón al espectador desprevenido… Todo lo necesario para hacer feliz a un tipo tan retorcido como yo. Y sí, amigos, el “remake” de “Evil Dead” tiene todo esto: mozas de buen ver que se convierten en espantajos cuando el mal se apodera de ellas, abdominoplastias hechas a lo bestia (sin anestesia y con un trozo de cristal), parejas que se rompen cuando uno de los enamorados le abre el cráneo al otro con un trozo de mármol… Entonces, ¿por qué la película no colmó todas mis expectativas? Os contesto rápido: porque… que no, hombre, que no… que no es para tanto. La película tiene esa textura sucia tan característica del cine de los setenta (y que directores como Rob Zombie o Alexandre Aja han vuelto a poner de moda); no se corta un pelo a la hora de mostrar la violencia, es escabrosa y sádica; la cabañita en el bosque, la fiesta loca que se monta con la pistola de clavos, los gatitos del sótano, más tiesos, los pobres, que mi abuelo cuando se lo encontraron muerto en su habitación (era un mal bicho que vivía apartado de todo el mundo)… detallitos que tienen su punto y le dan a la película el toque malsano que necesita; una gran producción con efectos especiales magníficos, una iluminación perfecta (ni en La Casa de las Lámparas, oiga) y un director que sorprende en su debut.. Viendo el tráiler, nadie podía pensar que se trataba del típico estreno para adolescentes pajilleros con escasa hondura intelectual (los hay más exigentes, no generalicemos: se han descubierto dos casos en la India, dos chavales que leen, libros, no cómics, y saben que no todas las películas son en 3D –lo de masturbarse desaforadamente se ve que es común a esas edades y no está relacionado con la educación de cada uno-). Qué impresión más equivocada: “Evil Dead” (2013) es un producto muy convencional, que tira de clichés (a pesar de buenos momentos de puesta en escena) y no provoca ningún desasosiego (es burra, sí, algunas imágenes son muy gore e impresionan, pero no te van a asaltar más tarde, durante el sueño, ni te van a traumatizar de por vida, a ti, que eres un machote y estás harto de ver el mismo espectáculo en los programas de Zapping de la tele). Nada canalla y sin chispa. Es como “Destino final 5”, pero con un poco más de mugre (y las tías buenas se despeinan). Comparadla con el “Ciempiés humano”, “May” o “American Mary”… vale, esto es trampa… comparadla con una cinta menos “underground”, con “I spit on your grave” (2010), por ejemplo, y luego me decís que es igual de enfermiza y que os deja el cuerpo tan descompuesto. No. El “remake” de la estimable y simpática “Posesión infernal” de 1981 (desde que hay Internet esto de recordar fechas ya no tiene mérito, ¿verdad?) es un título que no va a pasar a la historia. Una película correcta, digna, pero no perdurable. Lo mismo que las nuevas “La matanza de Texas” o “La cosa”. En ningún caso, un hito como “Las colinas tienen ojos” de Aja. No sé, quizá estoy siendo demasiado duro, quizá es que, cuando uno está tan curtido (soy un aficionado “pro”, uno de esos que ven Buzz en vez de los Simpson a la hora de comer), difícilmente algo puede asombrarle. Bueno, algo sí me ha estremecido últimamente: enterarme de que “Carrie” también va a tener un “remake”.
Bromas y críticas inmisericordes aparte. Hay tres o cuatro momentos realmente logrados en la película:

Me recuerda a las películas de adolescentes tipo Viernes XIII en el que el argumento es muy malo y solo hay sangre por todos lados. Solo le faltaban chicas desnudas para rematar esta terrible película. Es para frikis.

Haría falta que explicaran lo que es el Necronomicón, ya que no todos han leído a HP Lovecraft.

Terror = 0
Asco = 10

Y con eso lo tengo todo dicho. Un remake innecesario, ya que se cambian unas pocas cosas y ya está, el resto es más o menos lo mismo, bueno no, hay mucha más tinta roja y más plástico simulando cuerpos humanos.

A parte de que es gore (cosa que no me gusta nada, porque para que una película te dé miedo no tiene porque dar asco), el argumento no está muy bien cogido, porque si el demonio está muerto, como es que sigue? ¿Qué es eso de contagiar?

Y sobre todo, para reanimar a alguien, ¿no es mejor quitarle la bolsa de plástico de la cabeza para que respire? En fin... fallitos de estos que se cometen por estar más atentos a dar asco que mirar que no haya filtraciones en el argumento.

El momento ha llegado! Mi película más esperada en mucho tiempo. Entre ese pedazo de tráiler y las buenas críticas cosechadas, mis expectativas eran extremadamente altas. Vamos, que tenía todas las papeletas para salir del cine decepcionado…Y bueno, el caso es que no ha sido así, me encontré exactamente lo que esperaba, que ya es bastante.
Evil dead es un remake respetuoso, mantiene el espíritu de la original en muchos aspectos, pero varía y actualiza otros. La historia es, básicamente, la misma, sencilla y directa, la de toda la vida. Grupo de chicos aislados en una cabaña en el bosque, que van siendo poseídos uno a uno por un ente maligno que invocan involuntariamente al descubrir el Libro de los Muertos. En esta nueva versión, se añade un prólogo para introducirnos mejor en la situación y nos dan un motivo diferente por el que este grupo de amigos se reúne en la cabaña (que a su vez hace más lógico que no se vayan de allí a la primera de cambio). De esta manera aprovechan para presentar un poco a los personajes (y a las armas que cambiarán en breve de función), dándoles un poquito de profundidad (tampoco demasiada, no es necesario). A partir de este momento comienza el espectáculo, el ritmo va in crescendo, al igual que los sustos, la tensión, el agobio y, claro está, la sangre. Y cuando llega el gran final que se merece una película de estas características, entiendes porque se han gastado tantos litros y litros y litros de sangre. El Peter Jackson de Braindead, tu madre se ha comido a mi perro, estaría muy orgulloso.
Escenas como la del cutter, la del vómito o la de la ducha, están destinadas a formar parte desde ya de los grandes momentos gore en el cine. Porque no sé si lo he dicho, pero aquí hay mucho gore, gráfico y gratuito, como tiene que ser. Si te tienes que cortar un brazo con un cuchillo eléctrico, lo haces delante de la cámara, sin cortes ni elipsis remilgadas.
Algo muy de agradecer, y otro de los motivos por los que creo que se ha hecho esta película desde el respeto por el clásico original, es la casi total ausencia de efectos CGI. Viva la sangre de verdad, viva el latex!
A pesar de que sólo hay 4 muertes, las mutilaciones son tantas y variadas, que es inevitable preguntar, ¿cuál te ha gustado más? Pues yo creo que me quedo con lal de Olivia, diciéndole a su novio “que le duele la cara”. Magistral.
Alguien ha dicho por ahí que esta versión es mejor que la original… igual es un poco osada la afirmación… está claro que aquí se gana en ritmo y entretenimiento (y en sangre, claro). Hablamos de épocas, medios, presupuestos diferentes. Hay sitio para las 2 en la historia del cine, así que no me voy a mojar. Gracias a un clásico como The Evil Dead se ha podido hacer un futuro ¿clásico? como Evil Dead.

Dos consejos:
1. Evitad ver la película doblada! Putos doblajes cutres que hacen que la protagonista poseída parezca una parodia de Regan en El exorcista.
2. No veáis el tráiler 20 veces (como yo hice), porque prácticamente todas las escenas importantes salen en el (excepto el final), y claro, el efecto sorpresa… se pierde.
Además de la sangre y los sustos, también tenemos a unos actores que dan el pego, una banda sonora adecuada, una fotografía cuidada y unos efectos especiales y de maquillaje magníficos.

La película mainstream serie B del año.

Más críticas en mi blog!

Mesientotenebre