Blue Jasmine

Es curioso pero cada vez que se estrena una nueva película de Woody Allen siempre se dice que es la mejor del director en los últimos años, como si el maestro tuviera algo que demostrar. Si repasamos su filmografía creo que no tiene mucho que demostrar el genio neoyorkino. Como no podía ser de otra manera con el nuevo estreno de “Blue Jasmine” se dice algo parecido con su nueva película, lo mejor de Woody Allen, personalmente me gusto más “Midnight in Paris”.

Estamos hablando de un director que lleva estrenando una (o más) película cada año desde 1982 sin faltar ni un sólo año a la cita, y que desde que empezó rodando su primera película “Lily, la tigresa” en 1966 sólo ha faltado a la cita en 1981, 1976, 1974, 1970, 1968 y 1967. Obviamente experiencia tras una cámara, le sobra.

“Blue Jasmine” nos cuenta la historia de una mujer Jasmine o Janette que vive en Manhattan casada con un hombre adinerado y con una vida de lujo aparentemente tranquila. De la noche a la mañana se queda sin mansiones, joyas, lujos y demás bienes materiales. Apenas conserva unas maletas y el orgullo. Con esto viajará a San Francisco para vivir con su hermana que parece el lado opuesto a ella, trabajadora y con amigos humildes obreros que intentarán hacerla entender que su vida de lujo terminó y que ha de forjarse un nuevo camino trabajando.

Woody Allen aprovecha esta premisa para contarnos con su particular estilo esta historia. Quizás si es cierto que podamos ver al Woody Allen más crítico hasta la fecha ya que aborda el tema de la crisis, desde el lado de los que tuvieron mucho, nadaron en la abundancia y de repente se quedaron sin nada. Eso sí, sin perder su particular toque cómico. Allen usará algunos flashbacks para desvelarnos que le ocurrió a Jasmine exactamente para estar tan perdida y como se fue deteriorando su relación con Hal (Alec Baldwin).

Los actores siempre desempeñan un papel importante en las películas de Woody Allen y en “Blue Jasmine” el peso de la película recae completamente en la sobresaliente Cate Blanchett, en su papel de Jasmine o Janette. Explota sus dos extremos, cómico y dramático, rozando la perfección en lo que estamos convencido será una excelente carta de presentación para la candidatura al Oscar de este año. Notable también Alec Baldwin en el papel de hombre adinerado le queda el papel como el traje que lleva, la mejor actuación que le recuerdo. En el otro extremo de Jasmine está su hermana Ginger (Sally Hawkins) interpretada perfectamente y de una manera barriobajera en contrapunto con el lado burgués de Jasmine que aportará buenos momentos cómicos. Destacar también el resto de secundarios o debería decir mejor, novios de Ginger, Chili (Bobby Cannavale), Augie (Andrew Dice Clay). En un segundo plano quedan Louis C.K. y Peter Sarsgaard.

Como decía, todo el peso de la película recae en Cate Blanchett, los momentos más cómicos como esos intentos por tener un trabajo normal, así como los más dramáticos en su difícil adaptación a su nueva situación y los tanteos desesperados por recuperar su posición de privilegio. Es curioso pero esto es lo bueno y lo malo a la vez de la película, lo bueno porque Cate Blanchett está excepcional y lo malo es que si no estuviera ella sería, seguramente, una película más.

“Blue Jasmine” es recomendable por varios motivos, por ver la excelente actuación de Cate Blanchett y la relación con su hermana Sally Hawkins, en mundos diametralmente opuestos. Hay que verla para mirar la crisis económica desde otro punto de vista y para disfrutar de una película bien hecha y amena. Sus 98 minutos de duración están bien montados y contados, apenas quitaría nada. Aún con todo no es una película que vaya a perdurar en mi memoria por sus excelentes diálogos, hace falta algo más que una gran actriz, la historia en algunos momentos flojea y no acaba de convencerme en su tercer acto pese a un final bastante curioso.

+ info: http://www.zinefilos.com/estrenos/critica-blue-jasmine

¡¡Sí señor, como Woody Allen no hay dos!! Inteligente, ingenioso, divertido, malicioso, con buen gusto para la música, sus personajes siempre son interesantes... Y en "Blue Jasmine" tiene encima a una Cate estupenda, igual que el resto del reparto. Genial el trabajo de Blanchett (Hawkins tampoco se queda atrás) que le da cuerpo y fuerza a toda la cinta.
Esa mezcla de drama y comedia, con diálogos bien escritos, que se le da tan bien al director.
Todo aquel que alguna vez haya disfrutado alguna de las 43 películas del inmenso Allen debería ir a ver Blue Jasmine. Es una buena película.

Por delante vaya toda mi admiración por el cine de Woody Allen a quien considero un genio del cine. Por delante vaya todo mi respeto para quienes consideran “Blue Jasmine” una de las mejores películas de Allen y una de las mejores interpretaciones de Cate Blanchett. Y ahora voy yo: ¿Qué diablos sucede? “Blue Jasmine” no me parece una obra a la altura de Woody Allen (es facilona y torpe en su desarrollo), incluso parece que ni la haya dirigido él o la hubiese escrito cualquier aspirante al Olimpo del melodrama con insuflas de culebrón barato de barrio. Y encima a Cate Blanchett la he encontrado especialmente irritante. Y si a eso le sumamos un doblaje que dinamita los acentos de algunos personajes convirtiéndolos en paletos… Vamos, que el que suscribe estaba deseando que acabase esta tortura histérica de uno de los creadores que más admiro. ¿Dónde está el error –para mí- de “Blue Jasmine”? Creo que el guión no tiene la suficiente entidad y la dirección de Allen parece cansada y repetitiva. No hay nada en “Blue Jasmine” que me sorprenda, a diferencia que pasaba en las últimas películas del maestro donde tomó ciertos riesgos narrativos que aquí son inexistentes. No soy capaz de reconocer a Woody Allen en la película mas Woody Allen que ha rodado hasta la fecha, me aburre y me irrita, no me creo la historia que me cuenta y tampoco quiero creérmela, no me interesa, me suena a algo ya visto antes y sobretodo me molesta sus continuas discusiones vacías de toda intención. La puesta al día del universo Allen de los 80s parece más despistada que nunca. Pero claro, el problema debo ser yo, que no entiendo como alguien puede ser tan torpe haciendo lo mejor que sabe hacer. Cuando uno de los actores dice “Eh Jasmine, déjate de gritos” ha sido el único momento en que me he sentido identificado con algo de la película. “Eh Woody, deja de ir con el piloto automático puesto”, “Eh Cate Blanchett, deja de gritar y llorar e interpreta”. Para ver discusiones irritantes sin sentido, para eso enciendo la televisión y pongo "Sálvame" que al menos hacen pausas para ir al lavabo. ¿Os parezco demasiado duro con el maestro? Puede que tanto grito me haya puesto nervioso o puede que simplemente suceda que me ha decepcionado completamente.

Lo último de Woody Allen por fin repunta luego del desgaste que sufrió su periplo cinéfilo por la Europa Clásica, ese que tuvo como punto más alto "Vicky Cristina Barcelona" (2008) y como fondo la más reciente "A Roma con amor" (2012).

"Blue Jasmine" (2013) es una exhibición dual del modo que al realizador neoyorkino le gusta hacer lucir a su estrella, especialmente en un rol femenino, y a su vez, como esta debe y en este caso está a la altura no sólo de lo que pide el estilo del director, si no de las expectativas del público.

Cate Blanchett mezcla en esta cinta parte de su destacado y sabido repertorio, llevándonos desde su elegancia natural hasta esos episodios dignos de Almodóvar. Incluso abre el apetito para verla trabajar con el español, pero lo cierto es que su participación en el protagónico es un derroche de talento innegable.

Sobre la realización misma, a esta altura seguir pidiendo al Woody Allen de antaño, de otras décadas es un ejercicio inútil. Su cine tomó otros rumbos que no volverán a transitar por el absurdo más que por momentos o más bien, a cubrir esa comedia de aires negros, sarcásticos y oscuros acerca de la vida misma y las personas. Allen deja en claro que todo cambia; las personas, sus historias, pero en el fondo, curiosamente la esencia es similar pero con otro enfoque.

Posiblemente este sea un film que descoloque o resulte inentendible para muchos. Sin un objetivo claro quizás, pero ese desconcierto es uno de los propósitos de esta película que logra lo más difícil, verse liviana aún cuando posee un argumento cargado de detalles y de escenas con evidencias tan contrastantes como el ying y el yang, donde el dire se da el lujo de hacerse impredecible, un tremendo plus.

En una hora y media vemos una historia que quizás hayamos visto mil veces, pero con los lentes de Woody Allen, el oscuro, todo se ve distinto. El aplauso por esta levantada argumental y de puesta en escena es evidente. Te puedes reír, pero emocionarte -más aún con actuaciones como las de Blanchett- es a ratos inevitable.

Recomendación:
Bien por Woody Allen y Cate Blanchett. Un drama de sonrisas oscuras y reflexiones interesantes

Reconozco que lo último de nuestro neurótico universal me producía una cierta sensación de hastío, y Blue Jasmine es una película bien construida que aleja la desagradable sensación que transmitía Midnight in París: Woody Allen está completamente ga-gá.
Hay pocos reproches que puedan hacerse a esta mezcla de análisis de la fútil burguesía de Manhattan y de la enfermedad mental, puesto que el guión dibuja perfectamente unos personajes que son interpretados con esmero, en especial el de pobre niña rica de Blanchett. En mi opinión acierta completamente con el tono y combina los momentos de ridícula pose aristocrática con los de derrumbre personal, mostrando su rostro una mezcla de aturdimiento farmacológico, infelicidad y locura a punto de desatarse al alcance de pocos intérpretes. Todo lo demás no se sale de los cánones de Allen, con pulcritud y sencillez en la dirección y sin ninguna intención de hacer cine complicado o artificioso. En definitiva, amena película en la que se destroza sin misericordia el personaje de la desdichada Jasmine, y en la que tampoco se muestra mucha simpatía por el resto del género humano.