Haz click aquí para copiar la URL

Cómo defender a un asesino (Serie de TV)

Serie de TV. Drama. Thriller. Intriga Serie de TV (2014-2020). 6 temporadas. 90 episodios. Trata sobre un grupo de ambiciosos estudiantes de Derecho y su brillante y misteriosa profesora de defensa criminal. Estos jóvenes se verán envueltos en un complot de asesinato que cambiará el curso de sus vidas. (FILMAFFINITY)
<< 1 2 3 4 5 7 >>
Críticas 34
Críticas ordenadas por utilidad
27 de enero de 2017
17 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
A veces la “afinación” de Filmaffinity deja mucho que desear y este título es un buen ejemplo de ello. Que esta serie se sitúe bastante por encima de clásicos de su mismo género jurídico-criminal como Murder One o El Abogado, y codeándose de igual a igual con otras como Bates Motel es algo que clama al cielo.

La serie es un entretenimiento muy menor, los personajes no son caracteres sino monigotes en manos de los guionistas que los van enrollando entre sí a medida que temporada tras temporada van acumulando asesinatos y ocultándoselos unos a otros. La asignación de los diferentes culpables es aleatoria y daría lo mismo que fuese uno u otro porque las motivaciones son superficiales o construidas ex profeso para justificarlos superficialmente a posteriori.

Es una serie efectista cuyo visionado solo se justifica si se tiene una extraordinaria cantidad de tiempo libre para estos menesteres y ya se han visto todos los excelentes thrillers anglosajones, tanto británicos como americanos, que son mucho más honestos en la presentación de sus argumentos y respetan un mínimo al espectador.

Bollería industrial calificada aquí a como Delicatessen.
bloche
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8 de enero de 2015
11 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Que mas da si tu cliente es culpable? Esa es la premisa con la que empieza esta serie. Se trata de una de las mejores abogadas criminalistas que al mismo tiempo imparte clases de derecho penal en una universidad estadounidense. Ella inculca a sus alumnos que lo importante es que te pagan por que tu cliente sea absuelto ya sea culpable o no. Ella se parece mucho al doctor House pero en otro ámbito de lucha. Tiene también un grupo de becarios que hacen el trabajo sucio de investigación y a los que da caña. Es ácida a más no poder y por supuesto muy buena en su trabajo y un desastre en su vida privada. A Viola Davis le viene al personaje como anillo al dedo, le da todo lo que necesita para que al mismo tiempo la odies la compadezcas y quieras seguir viendo más. La trama es bastante interesante y los flash que aparece de vez en cuando te incitan a ver más. Los casos de cada capítulo además son bastante buenos y bien hilados, lo más importante la mayoría no son muy predecibles.

No se a que esperaís para verla
batulius
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de febrero de 2015
11 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sin dejar de seguir algunos cánones ya vistos en este tipo de series, "Como defender a un asesino" es un gustoso caramelo para todo seguidor de las series de misterio criminal.

La nueva creación de Shonda Rhimes nos sitúa en el mundo de Annalise Keating (Viola Davis), una de las mejores abogadas defensoras de Philadelphia, que recluta a sus cinco mejores estudiantes de la universidad donde enseña para que la ayuden y asistan en sus extraños (y a veces un poco fantásticos) casos de defensa... en los que la ética a veces brilla por su ausencia. A estos casos individuales a los que se enfrenta en cada capítulo, hay que sumarle una gran intriga criminal de asesinato (la muerte de Lila Stangard) que envuelve irremediablemente a Annalise y a su mundo; a su familia, a sus asistentes y a sus cinco estudiantes.

"Cómo defender a un asesino" no es quizás el drama de abogados más destacado de la historia televisiva (sin ir más lejos, "Damages" tenía un mejor acabado en su primera temporada tanto en la conformación de sus personajes como en el desarrollo de su guión), pero resulta superior a la media a la que la pequeña pantalla nos acostumbra en cuanto a tramas criminales y su desarrollo se refiere.

Lo que genera más cautivador interés y sorprendente conmoción es sin duda la gran trama que se va desarrollando a lo largo de toda la temporada (al tener más tiempo de dedicación, está trama es la que resulta más compleja, intrincada y multidimensional); el caso de Lila Stangard (aun sin resolver a falta de tres episodios), un caso en el que se nos van otorgando pistas en pequeñas dosis a lo largo de todos los episodios en forma de flashbacks, flash-forwards y presente con ambiguos precedentes, dudosas confesiones, oscuros complots, equívocos indicios, inesperados giros y adictivos enredos. En ocasiones algunos de los flashforwards de "Cómo defender a un asesino" se denotan algo redundantes y accesorios (mostrando lo mismo una y otra vez en cada capítulo para recordarnos lo mismo), pero en otras ocasiones son tan clave y exquisitos que necesitan (y merecen) más de un visionado.

"Cómo defender a un asesino" nos deja pues convertirnos en ávidos y voraces detectives; nos permite crear nuestras teorías, hacer cábalas y obsesionarnos medianamente y sin esfuerzo (tal y como pretende este drama televisivo, no nos vamos a engañar) con esta sazonada y sombría intriga criminal.

Lo cierto es que este enredo se desenvuelve con perspicacia, matices, ponderación e inteligencia. Y, aunque eso no signifique el acabosé, es de agradecer y sumerge al espectador en el mundo de la serie con un gran interés.

Ahora bien, las tramas individuales de cada episodio resultan algo más irregulares y superficiales. En ocasiones un poco descuidadas y esperpénticas, estas defensas de criminales a veces son más lastre que otra cosa para la serie (lo cual es una pena).

Pero la trama principal y su desarrollo cargado de multitud de hondas capas e ingeniosas sorpresas, la acertada puesta en escena a nivel general de la serie (cuenta con un diseño de producción de lujo y con una fotografía excelente), el ágil y enervado ritmo que imprime este producto de Sonda Rhimes, y las interpretaciones (Viola Davis demuestra lo grandísima actriz que es con este personaje poderoso y perspicaz... y a la vez dubitativo en su moralidad. La actriz lega una naturalidad e intensidad agradecidas... aunque no llegue al insuperable e inolvidable nivel de Glenn Close y su pérfida Patty Hewes de "Daños y perjuicios". Los jóvenes actores han sido genialmente escogidos y sacan oro de sus personajes. Y otros geniales secundarios como Marcia Gay Harden o Lisa Weil tampoco desmerecen en sus momentos) son más que suficiente para que "Cómo defender a un asesino" consiga hacer las delicias de los espectadores deseosos de encontrarse con una serie de intriga criminal notable y satisfactoria.

Muy recomendable para todos aquellos que disfrutaran con series de intriga detectivesca del nivel de las internacionales "Damages", "Mentes criminales", "The Killing", "The Practice", "Ley y orden"... o las patrias "Acusados" o "Gran Hotel".

Lo mejor: La trama de Lila Stangard. Viola Davis y Marcia Gay Harden. Como la serie muestra y trata con normalidad y naturalidad temas considerados tabúes como el sexo, el sexo gay o los romances inter-raciales.
Lo peor: Alguna que otra de sus tramas episódicas.
Spark
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
28 de mayo de 2020
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hay series que acompañan el tiempo que tardarías en cambiarte de ropa y hay otras que acompañan toda una vida.
"How to get away with murder" no fue eterna (afortunadamente) como Grey's Anatomy (por favor), pero para quienes iniciaron con ella desde el día 1, por alla en algún día de 2014, saben que en seis años pasan muchas cosas, cosas que podrían significar la vida misma o una porción importante de ella.

La serie que equívocamente se ha asociado a la mente de Shonda Rymes (realmente creada por Peter Nowalk con asosiación de Rhymes), finalmente emitio su último episodio el pasado 14 de mayo en medio de una pandemia que ha puesto a temblar cualquier terreno de lo conocido hasta entonces y muy sabiamente decidieron cerrar tramas en medio de tal vorágine.

Hay un efecto natural que ocurre cada vez que terminas historia (de cualquier índole) y es que el sentimiento de nostalgia juega tan bien con tu psique que olvidas todos los "ay, que se acabe ya", "hasta dónde", "¿es real?" y por supuesto se deja venir aquel sentimiento de duelo y la sensación nefasta de pérdida al saber que has concluído algo y no volverá a ocurrir.

Pero dejando el dramatismo post-tusa, "How to get away with murder" acabó (como acaban con todas) con una narrativa irregular y un tambaleo poco sólido en aspectos argumentales que estuvieron redondos hasta un momento dado. Así vamos a desglozar a groso modo cada temporada (SIN SPOILERS) para dar una opinión final:

PRIMERA TEMPORADA: Debe el cimiento de todo, aquí todo comenzaba, conocíamos a los personajes, se establecía la primera catástofre y el ritmo cardíaco y desenfrenado tanto en la trama principal como en las demás paralelas entre juicios y casos por resolver establecieron la personalidad siniestra y adictiva de la serie. Los giros y aquel halo tramposo frente a la mirada del espectador hacían que al término de cada episodio quisiéramos que esta gente tuviera algo de misericordia con el prójimo y no dejarnos tan picados. (4.8 de 5 estrellas a esta temporada)

SEGUNDA TEMPORADA: La mejor a mi modo de ver. Los cabos sueltos de la primera etapa se empezaban a atar aquí, la grandiosidad histriónica del elenco fue de ovación (especialmente en la escena cumbre), los giros argumentales muchos más bruscos y con cada final de episodio dejabas el agua a un lado para que uno de estos capítulos te quitara el hipo, perfectamente. Excelente Viola Davis, excelente todo el elenco y excelente el guion.
(4.9 de 5 estrellas a esta temporada)

TERCERA TEMPORADA: Hasta aquí podemos hablar que tuvimos un guion y una historia redonda. Por supuesto los ratings seguían por las nubes y era necesario la prolongación de tramas, y desde luego es cuando todo se vuelve cada vez mas rebuscado. Un atisbo de eso se empezaba a ver a partir de los últimos episodios de esta temporada, pero aun así, saben que la fidelidad hace sus cosas y había que seguirla viendo por supuesto.
(4.3 de 5 estrellas a esta temporada)

CUARTA TEMPORADA: Efectivamente. Se ha cambiado drásticamente lo que la serie venía exponiéndonos. Se empezó a perder la grandiosidad de los casos en la corte (cada vez más escasos para darle prioridad al ir y venir de la trama principal), se trasladaron a un nuevo escenario, cambió el look de la serie misma y a excepción de la escena cumbre en esta temporada (bastante agitada y de una agonía interminable) ya empezaba a flojear en lo que nos seguía mostrando.
(4.0 de 5 a estellas a esta temporada)

QUINTA TEMPORADA: La peor de todas, a mi consideración. Sosa, rebuscada, repetitiva y, como siempre, solo el misterio o suceso central a resolver era lo que incentivaba su visionado rogando que esta vez sí terminara, terminara enserio porque ya lo estaban pudriendo. Ya el estiramiento de tanta tela sin capacidad de alargue estaba a punto de quedar en hilachos y fue cuando muy sabiamente decidieron que la próxima temporada sería la definitiva. ¡Bravo!
(3.5 de 5 estrella a esta temporada)

SEXTA TEMPORADA: Nostalgia pura. Como suele ocurrir, muchas series en su momento cúlmen echan mano de elementos que evocan al punto en donde todo comenzó. Algunos guiños por ahí, algunas escenas para el recuerdo y el conflicto central fue mucho más enmarañado y punzante al más puro estilo de la segunda y la primera temporada. Con dos giros bastante interesantes de enganche, sucesos tramposos y macabros, la serie finalmente cerraba su arco dramático y el resultado ha sido completamente melancólico y cargado de realidad (sabrán de karma cuando vean sus últimos minutos). A excepción de un par de aspectos rebuscados a decir verdad, uno cumple con terminarla por aquello de terminar lo empezado y aquí viene el comportamiento tóxico en cuestión: deja un vacío importante en la audiencia que se tarda en llenar.

Y bueno, no los aburro más (cual quinta temporada), "How to get away with murder" es esencia una de las mejores tramas penales y una de las mejores series de la última década. Merece su visionado por un cúmulo de elementos que justifican su grandiosidad, empezando por una Viola Davis ideal en cada escena.
¡Gracias, gracias por enseñarnos a escapar del aburrimiento! Y por supuesto cómo salirse con la suya...
Deiccito
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
30 de septiembre de 2014
9 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Se ha convertido en todo un talismán. Proyecto que toca Shonda Rhimes, proyecto que se convierte enseguida en un imán para los fieles seguidores de su estilo. Un estilo que la cadena ABC se ha sabido apropiar y que parece contener la pócima perfecta para captar adeptos. Sólo así se entiende que Anatomía de Grey lleve ya once temporadas en antena y que ahora How to get away with murder arrancara el pasado jueves como el mejor estreno de la temporada. Ni Steven Spielberg ni J.J. Abrams. Ella tiene las claves del éxito.

La noche de los jueves ya se ha convertido en la noche de Shonda en la televisión norteamericana y poco pueden hacer sus contrincantes para remediarlo. El desembarco de How to get away with murder ha conformado un trío de ases infalible, el que cierran esta nueva Annalise Keating con Meredith Grey y Olivia Pope. Todo un woman power televisivo con el que Rhimes se ha asegurado un puesto de honor en el olimpo de las más influyentes, marcándose ya un tête à tête con la mismísima Oprah Winfrey.

Con un toque femenino, incluso feminista, consigue convertir el clásico procedimental en un agitado y adictivo enredo. No importa si estamos en los pasillos de un hospital o ahora en las aulas de una prestigiosa facultad de derecho. El ritmo siempre es frenético, sin pie al aburrimiento. Shonda tiene la fórmula secreta y seguro que pasa por un reparto variopinto e intergeneracional, con todas las opciones posibles de interacción, y por una cuidada selección musical. Siempre con una buena dosis de locura, la que sólo sus seguidores son capaces de tolerar.

De ahí que How to get away with murder sólo sea apta para Shondadictos. Porque a pesar de una premisa en principio tan alejada de Anatomía de Grey y de Scandal, la serie no pertenece al género thriller ni al género legal. Pertenece al género Rhimes. Y eso significa que el rigor y la verosimilitud se sacrifican por el bien del espectáculo. Así pues, pasando por alto que la figura protagonista, una eminente profesora de derecho que involucra a los alumnos en sus casos, es insostenible y que los propios sucesos son meras excusas para embrollar la trama de sus protagonistas, el piloto se disfruta como una montaña rusa. Subidones, giros, adrenalina y escasos segundos para reflexionar.

La serie arranca fuerte, con cuatro de sus personajes principales involucrados en un asesinato. De ahí a un flashback que nos sitúa tres meses atrás y que nos muestra la rivalidad entre un centenar de estudiantes para hacerse un hueco en el prestigioso bufete de su estricta maestra. A continuación, otro caso de asesinato, infidelidades, flirteos, traiciones, sexo gay y hasta un cunnilingus. Jamás 40 minutos dieron para tanto.

Pero, sin duda, el gran logro, y la gran baza, de la serie es el fichaje de Viola Davis, omnipresente e indispensable durante todo el capítulo. Esta nueva femme fatale de la televisión, agresiva, ambiciosa y sin escrúpulos, promete darnos grandes dosis de ambigüedad y de imprevistos. La protagonista perfecta para una productora que no se anda con sutilezas. Agárrense fuerte, porque si Shonda ha descargado tamaño arsenal en el piloto, es que todavía dispone de artillería pesada. Imposible ya detenerla.
polvidal
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 5 7 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow