Heavy Metal

Recuerdo que ví de estreno en 1981, con 21 añitos, cuando aún leíamos atónitos los cómics 1984 de Richard Corben. Os podéis imaginar la satisfacción de ver trasladados los dibujos a la gran pantalla y más aún aderezados con el rock de Black Sabbath, Devo, Sammy Hagar, etc...
En fin, una verdadera gozada en aquellos tiempos que hoy a duras penas resiste el avance de las tecnologías de animación. Pero lo pasamos pipa!!.

Heavy Metal es un milagro. En mi cómoda ignorancia no tenía muy claro hasta qué punto se podía sacar un proyecto así en 1981, época del desvarío estético y comercial por excelencia... Supongo que no era fácil convencer a nadie con el sub-título "animación para adultos"...Lejos de desvelar el motor argumental de los episodios que componen este opiáceo de fantasía y ciencia-ficción épico-espacial...Me limitaré a aceptar lo comentado por muchos tras visionar la película (no sé si llegando a terminarla)

-Sí, las muestras gratuitas e insultantes de sensualidad femenina son uno de sus puntos fuertes...
-Sí, los argumentos de sus cortometrajes son, en la mayoría de los casos, semiplagios mutantes de otros clásicos del género de terror, ciencia ficción y fantasía...
-Sí, el hilo argumental es una chapuza digna, aunque respira cierto surrealismo a lo Charlie Kaufman puesto ácido...

¿Y qué!

Esta película es un testimonio generacional (de un sector un tanto freak), una declaración de intenciones gamberra que persigue únicamente responder a las más locas y épicas fantasías del imaginario post-adolescente; niños grandes con un poder adquisitivo que se pierde en los confines del espacio. Para aquellos que quieran entrar en el soporífero debate de su inmoralidad y mala educación, simplemente me reitero una vez más en el ¿y qué!

De todos modos, vayamos al meollo...

Parece ser que un tal Leonard Mogel, editor de revistas por amor al arte, viajo a Paris con la intención de sacar una versión francesa de la publicación norteamericana National Lampoon, y de pronto se cruzó con otro subproducto del cómic conocido como Métal Hurlant; una paranoia de fantasía y ciencia ficción para adultos por entregas trimestrales, que llevaba editándose desde 1975...Lo que se dice una joya del coleccionismo moderno. Moebius, Corben o Druillet pusieron los mejores momentos de su originalidad artística al servicio de este tipo de proyectos dadaístas.

Y así nació la versión americana de "Métal Hurlant" rebautizada como "Heavy Metal" y dispuesta a adentrarse en las perturbadas mentes de otros genios adolescentes de la época... Por su cuenta y riesgo, asombrado con la capacidad subversiva que desprendían estas imágenes, nada menos que Ivan Reitman (director y productor de Cazafantasmas) logró, no sabemos cómo, inmiscuir en el proyecto a otros visionarios como Elmer berstein (vete tu a saber por que nuestro querido Elmer aceptó semejante oferta) y gerlad Potterton (éste último responsable de animación del video-clip Yellow Submarine y de algunas de las magistrales majaderías de Sesame )Street... Vamos, lo que se dice un RatPack de lo más oportuno...

Este producto inclasificable tiene momentos mágicos que sorprenderán al espectador más adormilado...Pero que nadie espere concesiones, si no te gusta Heavy Metal quizá sea porque estas tan metido en el negocio del azúcar que ya no saboreas la auténtica miel...

Cuando la ví por primera vez tendría unos trece años, por lo cual la recuerdo mitificada y no puedo ser totalmente objetivo, la recordaba como un peliculón, donde salían tetas, robots montándoselo con secretarias, tias buenorras con poca ropa repartiendo mandobles a diestro y siniestro matando a todo lo que se les pone por delante y lo más impactante, sexo en una peli de dibujos animados.

Ahora la he vuelto a ver más de una década despues, y a pesar de haber vuelto a ver con una sonrisa en los labios todo lo que recordaba, también he visto cosas que no recordaba, porque con trece años te la soplan, como el trazo irregular y descuidado de los dibujos, la historia de la bola, como ya han dicho antes que yo, metida con calzador, hay trozos de historia que no pintan nada, como los alienígenas que se dedican a esnifar coca como si fueran aspiradores, y algunos diálogos son casi absurdos, con esto no me refiero a los típicos chistecillos, (ej.: Dieciocho años sin comerme una rosca y hoy... doblete.) pero hay muchas cosas que no terminan de cuadrar.

Sin embargo cuando la he vuelto a ver me ha vuelto a molar, aunque no a sido como verla de chaval, al menos si que me ha traido el recuerdo de la primera vez que la ví, y mirándolo más objetivamente, la peli tiene todo lo que necesita: ostias, tías en tetas, batallas, monstruos y polvos interestelares, ¿Por qué pedir más?

Solo apta para incondicionales del comic más macarra y la animación clásica, donde me incluyo, veo criticas atroces, y cierto es que hay momentos que pierde el hilo de la historia, y que la animación no es tan buena como otras películas de la época, pero en conjunto es una gran película, con una gran banda sonora, la he visto más de 10 veces, pero vamos clasificarla de mierda y de royo seudoporno claramente es de gente que no ve más allá de sus gafas de pasta.
Entre las historias más memorables están, la adaptación del Den de Richard Corben, y la de Taarna que está claramente inspirada en Moebius, para 2015 están preparando una nueva versión dirigida por Robert Rodríguez.

La verdad es que no son muchas las películas de animación de los 70-80 que me gusten (bueno, y las de ahora tampoco). De hecho gustar, lo que se dice gustar, sólo lo consigue "El señor de los anillos" de Ralph Bakshi. El resto de obras del bueno de Ralph me parecen vistosas en el mejor de los casos (Tygra) pero totalmente prescindibles ("Fritz de Cat", "Wizards"). A la altura de estas últimas incluiría la presente "Heavy Metal" del tal Potterton, que causó en mí una decepción que empieza a ser habitual. Buenas intenciones, un espíritu que se agradece (estamos algo cansados de las pelis moñas de dibujos a lo Disney) pero poco más. Un dibujo y animación a años luz de las ya mencionadas "Tygra" o "El señor de los anillos", pibones en tanga, peleas de cuatro duros, personajes sin enjundía ni carisma, historias intrascendentes y en cuyos elementos más interesantes se profundiza poco debido al tiempo disponible... El capítulo del "Capitán Stern" me parece una buena muestra de cómo una idea de partida interesante puede tirarse al vertedero convirtiendo el cortometraje en 5 minutos basura de persecución soporífera. Sin duda, de las 6 historias, es la más desaprovechada, que no la peor. Respeto a los usuarios que disfrutan de esta peli y su música (si hace falta que te guste un tipo de música en concreto para poder apreciar un film, mal vamos), de hecho no les voto negativo porque en el fondo la peli es mejor que la mayoría de mierdas de animación que pululan por ahí, pero antes que ver ésto te pillas un cómic de Lobo y lo relees. Mucho mejor.