Haz click aquí para copiar la URL

12 años de esclavitud

Drama Basada en un hecho real ocurrido en 1850, narra la historia de Solomon Northup, un culto músico negro que vivía con su familia en Nueva York. Tras tomar una copa con dos hombres, Solomon descubre que ha sido drogado y secuestrado para ser vendido como esclavo en una plantación de Louisiana. Solomon contempla cómo todos a su alrededor sucumben a la violencia y a la desesperación. Pero él decide no rendirse y esperar a que llegue el ... [+]
<< 1 10 16 17 18 62 >>
Críticas 309
Críticas ordenadas por utilidad
8 de abril de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tener paciencia y esperar en la justicia divina o rebelarse con fortaleza ante una situación inmoral que clama al cielo. Ese es el dilema que atormenta al protagonista de "12 años de esclavitud", Solomon Northup, un hombre negro y libre que es secuestrado en el estado de Nueva York para después ser vendido como esclavo en el Sur. Entre la consternación y la indefensión, Salomon pierde su condición, su familia y hasta su nombre... pero no la dignidad ni la esperanza de recobrar su libertad y de reencontrarse con su familia. Aunque debe pasar por analfabeto y silenciar su pasado, aunque tenga que soportar humillaciones y torturas, aunque se le obligue a actuar contra su conciencia, Solomon es un hombre íntegro que entiende lo que son las leyes humanas y las divinas... y por eso espera el día en que la Historia haga justicia con tan lamentables barbaridades.

Al comienzo de la película, Steve McQueen nos advierte que la historia está basada en hechos reales, a partir de la autobiografía del propio Solomon publicada en 1853. Eran momentos previos a la Guerra de Secesión estadounidense y la cuestión esclavista/abolicionista estaba a la orden del día. En las plantaciones de algodón o de caña de azúcar y en las explotaciones de madera, los trabajadores de color eran considerados propiedad de sus amos... que les trataban como mano de obra sin derecho alguno o como mercancía para satisfacer sus propios instintos más primarios. Por esas difíciles y penosas situaciones tuvo que pasar Solomon, y dar muestra de aguante físico, de astucia e inteligencia, y también de personalidad y estabilidad emocional. En esa historia épica, McQueen consigue ir cargando poco a poco de tensión a su protagonista, mientras que un genial Chiwetel Ejiofor sabe transmitir con su semblante esa angustia creciente... y el espectador espera el momento en que las cuerdas se tensen demasiado y se rompan, como sucede a las del violín.

La fuerza de la historia y del guión es innegable, mientras que la estética realista hace que resulte muy dura y en ocasiones espeluznante. Se suceden momentos de crudeza como el azote hasta la rasgar la piel de la joven, con otros de angustia como el del ahorcamiento interminable, o de íntima dureza emocional como el de la carta (en un alarde fotográfico). De cualquier forma, se nos da mucha violencia y brutalidad solo suavizada con algún apunte de humanidad porque siempre hay algunos hombres buenos... también en el Sur, y porque una familia que le espera en un emotivo -aunque no demasiado- encuentro final. Por otro lado, la historia está bien contada en sus saltos temporales -buen trabajo de montaje- y mantiene un constante ritmo narrativo, mientras que el espectador sufre con Salomon al vivir su misma tragedia y encontrarse en la encrucijada de callar o gritar. La cuestión moral y la oportunidad de actuar se la plantea el protagonista y quien está sentado en la butaca... que no sabe cuál será el menor mal y hasta dónde se puede ceder.

Entre seres despiadados que descargan su ira con el látigo y su lujuria con cualquier indefensa jovencita -Michael Fassbender resulta creíblemente sádico y banal-, entre mujeres orgullosas que liberan sus celos y su vanidad con los más inocentes, entre capataces que arrastran un ego o un sentido de culpa que ahogan con el alcohol o con violencia... aparecen algunos individuos que aún creen en la humanidad, en la igualdad y en la libertad. Por otra parte, esa tensión social que se vive en algunos momentos cruciales de la Historia es acertadamente recogida en la película de McQueen, para trasladar ese universo en conflicto y lleno de paradojas a la cabeza de un Salomon que debe debatirse entre vivir o sobrevivir, entre velar por los de su condición o salvar los muebles de su casa. La película es una de las favoritas a los principales premios del año y, aparte de su buena factura técnica e interpretativa, tiene a su favor tratar temas de vital importancia y hacerlo con profundidad moral... y también de nadar a favor de la corriente.
La mirada de Ulises
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 de mayo de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tras la gala de Los Oscar 2014 me atreví a echar tiempo de mi vida en ver, la que para la gran mayoría, es la película del año. Si bien, a pesar de contar con diversas actuaciones brillantes, la historia no termina de convencer por varias razones:

Los esfuerzos de Steve McQueen por retratar la historia de Solomon Northup a través de una cinta épica se quedan a mitad de camino. A primera vista el drama que se vive no parece avanzar y la única pista que te advierte del tiempo del sin vivir del protagonista es el titulo. Además queda el hecho de que tanto sufrimiento pasa a un segundo plano, detrás de lo lenta que llega ser la cinta.

A la tosquedad del argumento se le suma la más que sobrevalorada actuación de Chiwetel Ejifor. El protagonista de la trama consigue que tan gráfica historia parezca sobreactuada, llegando al punto de que no hay para mí, diferencia en su interpretación al comienzo y al final del filme.

Pese a los mas que apreciables fallos y excesos de la película, hay dos grandes actuaciones que, para mí salvan del aburrimiento. No son otros que Michael Fassbender y Lupita Nyong'o. El haciendo de negrero cruel consigue los escasos momentos de la cinta que se pueden considerar de verdadero enganche; y ella, pese a tener un escaso papel, nos brinda de una interpretación de lo más lograda y creída (no como Ejifor). Sin duda los únicos dos Oscar a los que debía haber optado y llevado este más que sobrevalorado filme, a expensas de los técnicos.

Mi nota: 10 para Fassbender,9 Lupita y 5 para la cinta en general ( 6/10).
pablo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
2 de mayo de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Leo por ahí que ya hemos visto suficientes películas sobre la esclavitud en los EE.UU. El proceso de conquista y colonización de este gran país dió al cine un glorioso género, el western, de indudable aliento épico. El hombre blanco avanzaba hacia el oeste y dominaba a la naturaleza salvaje y a sus salvajes pobladores. Las minorías autóctonas eran el enemigo a someter. Al sur estaban los mexicanos, fundamentalmente cuatreros, aunque también había algún noble hacendado. En el este estaba la buena sociedad, las primeras colonias de anglosajones, verdadero motor del impulso. Pero al sur de estas, estaban las grandes plantaciones de algodón y caña explotadas con mano de obra esclava importada desde África, la demostración más sangrante de que la carta fundacional de este jóven país, que nació para librarse de la tiranía, no se aplicaba a toda la población. Una situación injusta que llevó a una guerra civil.
Para el papel decisivo que tuvo la esclavitud en la historia americana, creo que ha sido un tema muy escasamente abordado por el cine. Y, repito, hay todo un género que se ocupa de las gloriosas gestas que forjaron ese gran país (añádase una pizca de ironía). Vease el paternalista tratamiento que reciben los negros en la gran epopeya de la guerra civil, "Lo que el viento se llevó". Por ello, cuando se empezó a tratar el tema con realismo (en los 70, "Mandingo", donde el protagonismo lo siguen teniendo los blancos, o "Raíces") ya vimos todo lo que había que ver: que era una monstruosa injusticia y que sólo podía ejercerse usando una implacable crueldad y un infinito desprecio hacia el ser humano.
¿Qué aporta la peli que nos ocupa? Pues que el protagonista no es un Kunta Kinte arrebatado a África, sino un señor que goza de todos sus derechos y es apreciado en su comunidad, pero que llega a la esclavitud tras ser secuestrado y vendido. Alguién que ha sido un conciudadano y al que han arrebatado sus derechos y. con ellos, su humanidad. Que ha pasado de ser una persona a ser un semoviente. Y todo por el color de su piel.
A partir de su esclavizamiento, nuestro protagonista inicia un proceso de renuncias forzadas a golpes y otros sufrimentos: a su dignidad, a su identidad, a sus pensamientos, a sus sentimientos, en aras de la supervivencia. Aprende que sobresalir en ese entorno supone una desgracia. Que una muchacha que no puede evitar ser bella se esté acarreando su propia perdición. Que hay amos con tan buenos sentimientos como escaso coraje y otros que carecen de lo uno y de lo otro. Que mire hacia donde mire, nadie le sacará de ese infierno. Que tendrá que renunciar también a la esperanza y hacer trizas su último vestigio de humanidad.
Solomon Northup vivió para contarlo. No se hasta que punto es fiel la película a su relato, pero no me parece que esté de más el recuento de sevicias de las que son objeto él y sus compañeros de infortunio. Simplemente para que el espectador pueda ponerse en su pellejo. Y si te lo sirven con unos medios técnicos y artísticos irreprochables, no seré yo el que diga que esto ya está muy visto.
iñaki
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8 de mayo de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como si fueran perros, "domesticar" a los negros tenía varias fases. Si éstos se negaban a su nueva vida, palizas. Si se volvían rebeldes no acatando órdenes, más palizas y humillación. Así hasta que éstos acaben mansos sin una pizca de dignidad, acabando por aceptar su cruel destino. Pero con todo, jamás se le podrá quitar a nadie la esperanza de volver a ver a los seres amados, de volver a sus casas, de poder mirar a una persona a los ojos sin que ésta se sienta superior, de poder respirar aire libre que no esté contaminado por personas mezquinas, crueles e hipócritas. Sí, hipócritas, como aquellos que se daban de bondadosos porque trataban a sus perros amablemente (me refiero al primer blanquito que compra al prota), esos son quizás aún peores, en el sentido moral me refiero. Puagg, me daban asco, le trata bien porque es buena persona, sí, pero compra esclavos. Al menos el otro no pone excusas a lo que hace, es un hijo de puta de los pies a la cabeza y punto. Aunque eso sí, por lo visto la Biblia lo aceptaba así que no pasa nada.

En fin, la cinta me ha parecido sobresaliente en general. La ambientación muy lograda, y la historia pfff, muy cruel, emotiva y sobretodo, muy muy dura. Aunque no sabría decir por qué, pero no emociona lo que otras de éste tipo, sí que es emotiva pero al menos a mí, no se me llegan a humedecer los ojos vaya. Luego, las interpretaciones están al nivel de la cinta, de lujo. Putsy, "los amos", y sobretodo nuestro protagonista, que desde luego ha hecho la interpretación de su carrera. Quería mencionar al personaje de Fassbender, lo interpreta bastante bien, vamos que le llegas a coger asco a más no poder, y eso en éste caso es un cumplido. Pero creo que le falta frialdad, no en los gestos ni en las palabras, sino en la mirada. No veía en sus ojos el hijo de puta que sus palabras y gestos me decían que era. Pero bueno, eso era en algunas escenas muy concretas, en general también está muy bien.

Es curioso que en un país donde hasta hace nada se ha esclavizado a la raza negra se proclamen ellos mismos como el "País de la Libertad", aunque es de suponer que eso es propaganda que expanden para esconder su oscuro y vergonzoso pasado.
ariakan
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
19 de mayo de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Correcto es el adjetivo a emplear. Corrección en su presentación, en su estilo y en su realización. Todo un alarde de estilo visual y narración esquemática elevada a la máxima potencia....

Sin duda un buen trabajo artesano, que, a pesar de su indudable dureza, ha ido hilando muy fino balanceandose en un equilibrio dificil del que sin duda, su director y el equipo de realización salen holgadamente triunfadores, aquí no esxiste sobrevaloración, es una buena película, con una narración ejemplar y una claridad de ideas que es de alabar; ¿la polémica?. no la veo por ninguna parte...las narraciones historicas y las basadas en hechos reales suelen columpiarse y tomarse licencias artísticas y narrativas, generalmente necesarias, y este, desde luego, no ha debido ser un trabajo facil de acometer.

Gran interpretación de la pequeña Lupita Nyongo que, sin duda aporta el lado mas dramático y sobresaliente de la película, extremadamente duro este papel, a pesar de su corta presencia : magnífico Michael Fassbender, impecable, terror real en estado puro, hipocresia y tirania mostradas como pocas veces se ha visto...el resto ya es historia.

Gran parte técnica, buena fotografía y un montaje perfecto...

En definitiva, no te deja indiferente, aunque este tema, a pesar de lo que se dice o digan, ya ha sido tratado con igual o mayor dureza, recordemos levemente la subvalorada "Amistad" de Spielberg, también en Grandes Series de Tv, etc...
Aunque desde luego es posible que sea el trabajo que mejor a entrado en el ambiente y las circunstancias del tema a tratar, recomendable, buen trabajo.

LO MEJOR.- Su claridad de ideas, Lupita Nyongo, sus extraños planos generales y la poca ambición comercial.
LO PEOR .- Al final no sabes exactamente si han pasado 12 años, al menos en la narración no lo parecen, raro si.

Saludos.
JAVIER TOLEDO
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 10 16 17 18 62 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow