La leyenda del samurái (47 Ronin)

Que nadie se vaya a engañar con esta película basándose en el trailer y la portada de la misma. La cinta es entretenida y con un argumento aceptable que hubiera sido mejor de haberle puesto más dedicación e invertido mayor presupuesto. En resumen, código de samuráis, aventura regulada, fantasía sacada de las leyendas orientales, paisajes que acompañan una anómala banda sonora y diálogos sobre el honor y el deber que le dan un punto épico mejor del que cabe esperar.

Resulta curioso que haya personajes llamativos a los cuales se les hacen spots para difundir la película y luego no son más que meros actores terciarios cuya aparición en la cinta es breve y espontánea…

47 Ronin son 47 películas en una, sensación constante de haberla visto ya. La historia del bastardo repudiado, el patito feo, el rechazado por todos menos por la doncella del lugar, ese al que pisotean pero que sabes que al final le pedirán ayuda e incluso acabará siendo el héroe, porque siempre fue el elegido. Eso mezclado con la clásica historia de samuráis con honor, traición y venganza entrelazados.

Keanu Reeves es el señalado y a la vez elegido (si, otra vez) aunque al final, su papel como todo lo demás, se queda a medio gas. Y no lo digo porque siga sin gesticular emulando a Chuck Norris, sino hablando de la película en general, la cual no acaba de resultar satisfactoria ni como película de acción ni fantástica ni mucho menos en sus elementos dramáticos. Los combates no están mal pero tampoco destacan ni hay alguno que permanezca en tu memoria; pese a su prometedor inicio, la fantasía es un elemento desaprovechado y puntual y en ningún momento emociona ni en su vertiente romántica ni de venganza ni te importa los que van muriendo, conociendo sólo a 3 o 4 de los “famosos” 47 Ronin.

No tiene nada (aunque las sobreactuadas apariciones de la bruja lo rozan) que lo convierta en un film malo, pero tampoco aporta nada ni hay algo que lo aparte de lo olvidable y prescindible. Ya no es que sepas de forma telegrafiada todo lo que va a pasar, sino que incluso sin haberla visto puedes adivinar algunos diálogos. Además diría que su final es lo peor de la cinta pero a la vez lo mejor porque aunque no cuadra en su conjunto, puede mínimamente aportar alguna sorpresa o algo diferente.

Nota: 4'5

Que tras ver el avance de esta película me eché las manos a la cabeza como acto reflejo, pasé de verla en el cine y ahora que ya la he visto en mi casa, puedo asentir que me he ahorrado un dinero bien empleado en ver otras película que por entonces le daban mil vueltas a esta especie de mezcla entre Zu-Warrior y Azumi pero con el toque yankee que tan mal sienta a las películas de corte japonés.
La historia de los 47 Ronin bien contada está en la versión de Inagaki del 62, pues no necesita introducir elementos fantásticos por ordenador y vestuarios imposibles y de sobra artificiales.
Keanu Reeves sigue proclamando su nula expresividad y no me cansaré de decir que es un actor con muchas muchas limitaciones. Sanada y algún otro actor japonés dan un toque de calidad a una cinta que continuamente se intenta deshacer de dicha calidad.
Intenta crear escenarios y diseños visualmente potentes pero todo queda en un artificio de falsedad y cartón piedra.
Lo mejor, los momentos previos a batalla y alguna escena aislada.
Lo peor, Reeves y la violación sistemática de la historia de los 47 ronin.

No apta para amantes de la cultura japonesa.

No me esperaba lo que me he encontrado. Y seguramente por eso me ha gustado bastante más que a la mayoría de la gente, por las notas que veo por aquí. Me ha vuelto a funcionar el truco de enfrentarme a una película sin saber prácticamente nada de ella para no tener prejuicios. Solo sabía el título y que salía Keanu Reeves, sin haber visto el tráiler ni imágenes.
Se trata de una fantasía de aventuras en el Japón medieval, con muchas espadas, peleas y magia servidas por unos decentes efectos especiales. La puesta en escena es espectacular. Los decorados, vestuarios, fotografía y banda sonora son bastante dignos y pueden llegar a pasar por superproducción (aunque obviamente no sea como "El último samurái").
La combinación de recreación histórica (en este caso la leyenda de los 47 ronin, que no sé hasta qué punto es real) con brujería y magia me ha parecido muy llamativa. Aunque sea un poquito larga, pasan muchas cosas y el ritmo no decae, siendo un buen entretenimiento palomitero.
Keanu Reeves vuelve a demostrar que es un pésimo actor sin dotes interpretativas pero que ha tenido suerte en su carrera a la hora de elegir títulos en los que su presencia pasa inadvertida y no se le puede exigir lo que él nunca nos podrá dar (una buena actuación). Desde luego se nota que solamente está para internacionalizar la película, de manera que los espectadores no rechacemos de lleno esta propuesta. Lógicamente, si solo salieran asiáticos desconocidos, mucha menos gente estaría interesada en verla, a pesar de ser de producción estadounidense.
En fin, una divertida película que me ha gustado más de la cuenta por no saber nada de ella a priori. Es como una película de manga japonesa pero en imagen real, y con muchísima más acción de lo que suelen ofrecer los animadores nipones.

La película que hoy nos ocupa mezcla de un curioso modo la cultura nipona con eso que vemos tantas y tantas veces en Hollywood últimamente que son los efectos especiales. Lejos de ser una fantasmada total también tiene referencias muy claras a dicha cultura, lo cual agradará a quienes les guste especialmente. Lo que es a mí personalmente no es que me llame mucho la atención y puede que esa haya sido la razón principal para que estuviera un poco reacio a verla.
Anoche le dí la oportunidad, aun esperando encontrarme un producto que no me iba a gustar, pero el resultado fue el opuesto. Con esto no digo que me haya fascinado, nada más lejos de la realidad, pero al menos me entretuvo y se dejó ver, que ya era más de lo que me esperaba.
La historia se sitúa, como es obvio, en Japón, contándonos la vida de los samuráis y todo su mundillo. No hay que ser ningún entendido en historia para saber que en dicho país es cultura nacional, algo común, y aquí lo han reflejado bastante bien. No obstante también posee momentos de acción e incluso interactúa con seres y monstruos que le dan esa pizca que, de no ser por ellos, le haría restar puntos. Se podría decir que intenta contentar a todos, desde los amantes de la ciencia-ficción hasta los más aficionados a lo real. Los primeros minutos son de tanteo, nos muestra un poco lo que significa ser un Ronin y a partir de ahí la cinta ya entra en materia. A medida que van pasando las secuencias nos vamos dando cuenta de que no es aburrida, al revés, y cuando llega a su último acto vemos que todo tenía sentido. Personalmente me ha gustado bastante dicha parte.
El reparto no es que sea nada del otro mundo. Cuenta con Keanu Reeves como protagonista absoluto de la función y alrededor del cual gira prácticamente todo en la trama principal. Es un actor que me convence bastante, pero sigo viendo que su antiguo papel de Neo para ''Matrix'' marcó una época y parece que, por muchas cintas que haga, siempre le veremos en ese personaje. No obstante cumple bien, se mueve bien y no hay motivos para quitarle méritos. Los demás no son conocidos, por tanto es imposible saber quien es quien. De ellos simplemente diré que son pasables a secas y olvidadizos a partes iguales. Nadie se acordará de ellos, y mucho menos de sus nombres, al poco de terminar la cinta.
Los efectos especiales no son malos, pero tampoco buenos. Hay momentos donde se aprecia demasiado la presencia del ordenador, por ejemplo en la bestia del principio. También hay otras escenas donde están algo más currados, como el maestro con aspecto extraño del final, pero nada digno de ser recordado. Le pondría un aprobado raspado al apartado digital, pero se puede comprobar que está en la parte baja de la tabla. Por otro lado la música es algo que me ha gustado bastante. No es un aspecto que suela remarcar mucho, pocas cintas lo merecen, pero aquí diré que han hecho un buen trabajo. Consigue plasmar en forma de sonidos algunos sentimientos de los personajes e incluso también lo hace en algunas escenas aisladas.
En resumen ''La leyenda del samurái (47 Ronin)'' es una película del montón pero que se deja ver y que es bastante entretenida. No es de lo mejor del pasado año 2013, eso está claro, pero puede serviros para pasar casi 2 horas con la mente en otro sitio, que al fin y al cabo para eso vemos cine, ¿verdad? Dudo que le sirva a alguien para un segundo visionado o para guardarla en vuestro disco duro, en mi caso desde luego que no, pero como os digo sirve como simple y llano entretenimiento.

Lo mejor: A niveles generales entretiene, algunas escenas aisladas y la banda sonora.
Lo peor: Tiene momentos que se alargan demasiado y los hacen pesados y el tráiler ya mostraba casi todo lo ''bueno'' de la película.

* Aprobado raspado *