Gattaca

La verdad es que "Gattaca" es de esas películas que me van gustando más a medida que la veo más veces. Voy, poco a poco, descubriendo cosas nuevas cada vez que la veo y me va conquistando con paciencia. Agradezco a JM el habérmela recomendado, como tantas otras antes. Para ser el debut como director de Andrew Niccol me tengo que quitar el sombrero viendo con la corrección y seriedad con la que se desenvolvió aquí. Uno de los mejores trabajos como actor de un joven Ethan Hawke, quién se enamoraría aquí de su compañera de reparto, una bella y gélida Uma Thurman, con la que acabaría casándose poco después. Hawke es un actor alejado del star system, sencillo pero serio y cumplidor en cada película que interpreta y ella, Uma, está más bella que nunca y muy correcta. No es una actriz que me apasione pero le reconozco su buen hacer aquí. Junto a ellos, un increíble Jude Law, maravilloso y perfecto. El actor aseguraba en una entrevista que con esta película era la primera vez que sentía estar haciendo buen cine. Alan Arkin tiene un pequeño papel como detective y Loren Dean tienen aquí uno de los papeles más relevantes de su discreta carrera como actor. La música es preciosa, una maravilla que realza aún más el atractivo de la película, compuesta en este caso por Michael Nyman. Es enternecedor ver a Ernest Bornigne en uno de sus últimos papeles en el cine. Muy interesante película, en la que pone los pelos de punta ver en qué puede derivar nuestro mundo futuro, en el que los seres humanos vamos a ser prisioneros de nuestras propias células, en el que los genes lo van a decidir todo en nuestro futuro, en el que los hijos engendrados de forma natural o por amor van a ir despareciendo y en el vamos a programas a nuestra descendencia como si fueran muñecos a la carta. Da escalofríos y me horroriza pensar que pueda llegar ese día, en un futuro no muy lejano...
Un saludo.
Gracias, JM.
Tess

Si hay alguna película que creo que con el paso de los años será valorada al alza , para mi gusto es GATTACA.
Lo reúne todo para dejar en la memoria un sabor que perdura durante años como lo hacen los buenos vinos en el paladar minutos despúes de degustarlos. La banda sonora es magnífica, realzando simpre los momentos más emotivos. Las interpretaciones soberbias. La narración en tercera persona de la infancia y adolescencia del protagonista (con ese lenguaje tan culto y conciso) hipnotiza, y deja la frase del final para el recuerdo. No me puedo creer que alguien vea esta película y no se emocione con la fuerza de voluntad y la fe de Vincent, que no se sienta identificado con él cuando mira hacia las estrellas deseando cumplir su sueño. Una auténtica apología al afán de superación del ser humano aderezada con una crítica subyacente a nuestra sociedad competitiva y racista.
La pregunta del hermano, asombrado: ¿Como lo consigues Vincent?. No sé cómo lo consigue pero yo he deseado muchas veces ser como Vincent. ¿Tu no?¿

Es de esas veces que me siento muy pequeño a la hora de hacer una crítica sobre una película.

Soy amante de la ciencia ficción a todos los niveles, y he tardado, atención, 22 años en ver Gattaca. Algo en mi interior sentía pereza, me tiraba para atrás una película que debía haber visto hace mucho tiempo, y tal y como sospechaba quedé encantado con lo que vi.

El futuro que plantea Andre Niccol es más que interesante, y sí, factible tal y como dejan caer, aunque éste esté hiperbolizado en la película. Además, parece que en 1997, cuando el tema de la clonación y por ende la genética estaba como más de actualidad, el futuro parecía todavía más factible. En cualquier caso, un contexto inmejorable que plantea ya de base un montón de cuestiones sobre ética, moralidad y humanidad.

Pero aquí está el giro, un giro que rara vez veo. En lugar de centrarse en las típicas preguntas morales y existencialistas que derivan de este tipo de sociedades la película no va de eso, y cuenta una historia de superación y de relaciones personales que hacen que, te guste o no la ciencia ficción, sea un placer verla. Una fotografía increíble junto a una selección de planos completamente memorables convierten una historia que, no nos engañemos, es un poco "adolescente" en una producción llena de sentido y madurez.

Gattaca es otra de esas películas que tienen un algo especial que no sé definir, una cantidad de intangibles que la convierten en una nube de sentimientos por encima de la propia ciencia ficción, que actúa de forma casi contextual en una trama completamente atractiva. Llegas por la sinopsis y te quedas por lo que sientes.

Hacer una crítica a una película después de más de veinte años no es fácil. Sobre todo de una icónica como esta. Ya se ha dicho casi todo. Yo no la había visto. A mí me ha gustado mucho, buenas imágenes, buenos actores, muy cuidada en el aspecto visual.
Pero es en el tema argumental donde se ha producido el aluvión de opiniones. El eje central, quizás sea la búsqueda de la perfección a través de la genética, la búsqueda del superhombre (los válidos). Pero aquí hay una contradicción: perfectos, fuertes, pero clones, rebaño, guiados. No es el superhombre nietzscheano “que sería un nuevo ser que no respondería ante nadie más que ante sí mismo”.
A mí me parece que Andrew Niccol sobre todo plantea el asunto del determinismo frente a la libre elección y la rebelión del individuo frente al rebaño. Se sitúa al individuo por encima de todo, aunque imperfecto toma sus decisiones, incluso la de suicidarse por un sueño (Eugene. Jude Law).
En la vida real están difícil y complejo eludir al rebaño y sobre todo al que es más amplio y menos visible, a la construcción social de la realidad, al sistema de opiniones y creencias homogéneas sin saltar afuera, sin emigrar a lo marginal.
En fin, la película acaba bien y nosotros espectadores nos emocionamos y soñamos, es el cine, es ficción.

Debido a mi obsesión de ver películas de los rankings de Filmaffinity, tenía ganas de ver ''Gattaca'', dirigida por Andrew Niccol, que luego fue el guionista de El show de Truman, una de mis películas favoritas. Vi que la película aparecía en el Ranking de ''películas infravaloradas'', cosa que me extrañaba ya que la película tiene una nota muy buena en la página. Sin embargo, parece que la película fracasó (de forma muy injusta) en taquilla en su momento, ya que a pesar de que tenía un presupuesto escueto de 36 millones, apenas recaudó 12 millones (un 1/3). Y como el título iba a ser eliminada inminentemente en Prime Video para el momento en el que escribo la crítica, tenía ganas de verla. Y tengo que decir que me ha parecido un film muy bueno que afortunadamente el tiempo la ha puesto en su lugar como una gran película.

Gattaca explora profundamente las implicaciones éticas y sociales de la ingeniería genética en un futuro distópico. La película presenta una sociedad donde la genética determina el destino de las personas, relegando a aquellos nacidos de manera natural a una posición de desventaja. La trama sigue la vida de Vincent Freeman (Ethan Hawke), un hombre concebido de forma natural en un mundo donde la mayoría son genéticamente seleccionados para la perfección. A través de su determinación y tenacidad, Vincent se propone alcanzar su sueño de viajar al espacio, desafiando las barreras impuestas por su "invalidez genética".

Niccol crea un mundo visualmente muy bonito, donde la estética minimalista y futurista resalta la frialdad y la rigidez de la sociedad representada. La cinematografía subraya la opresión de la perfección genética y la lucha de Vincent por encontrar su lugar en un mundo que lo rechaza. El guion es muy inteligente y reflexivo. Niccol no solo presenta dilemas éticos y morales sobre la manipulación genética, sino que también cuestiona la naturaleza misma de la identidad y el libre albedrío. La narrativa está llena de giros inesperados y momentos de suspenso que mantienen al espectador totalmente comprometido con la historia.

Las actuaciones son cautivadoras y emocionalmente convincentes. Cada actor aporta una profundidad y una complejidad significativas a sus personajes, lo que hace que la historia cobre vida de manera vívida y conmovedora. Y el mejor aspecto más destacado de Gattaca es la sublime banda sonora de Michael Nyman. La música complementa perfectamente la atmósfera tensa y reflexiva de la película, elevando las emociones y aportando una dimensión adicional a las escenas más impactantes.

En resumen, Gattaca es una maravilla de la ciencia ficción que ha perdurado por su relevancia y su capacidad para provocar debates sobre temas éticos y sociales aún vigentes en la actualidad. La combinación de una historia fascinante, una dirección magistral y actuaciones excepcionales hacen de esta película una experiencia cinematográfica imperdible, merecedora de estar entre los clásicos del género. Gattaca sigue siendo una joya del cine que desafía y cautiva a su audiencia en igual medida.