El hundimiento

Espeluznante, Berlin 1945, bunker del Führer.
Recreación histórica que con rigor y valentía, nos muestra el valor de conceptos como honor, patria y orgullo para los nazis.
Si usted puede veala en alemán, con subtitulos, aparecen matices que en castellano se pierden. Apreciará usted mejor las dos horas y media que nos ofrece de bombardeos, asesinatos, torturas y podrá reflexionar durante el transcurso de la película de todo ello, pues el iter te lo permite.
Adolf se nos muestra sencillamente tal y como es, a través de una excelente fotografía y muy buen sonido y banda sonora.
Miseria, desesperación, sangre, incredulidad, locura, agresividad e histeria, son los caminos que conducen inexorablemente al desenlace final.
Bajo mi criterio merece un 8 sobre 10.

Me ha gustado mucho. Creo que es un serio intento de reflejar el ambiente aproximado que muy probablemente debía darse en aquel claustrofóbico escenario. Me ha gustado especialmente la proyección de la imagen de un Hitler respetado y temido, pero ya alejado de sus momentos gloriosos, y claramente envejecido, acabado y hundido. Encaja mucho con el retrato mental que yo me habia hecho. Magistral, a mi entender, mostrar un Hitler con tildes de humanidad, educación y delicadeza, que obviamente debía tener. Las maldades y perversidades son llevadas a cabo por personas humanas y no por monstruos ni extraterrestres feos, sucios y maleducados.

Una buena película, muy bien documentada. Basada en gran parte en el libro Hitler de Ian Kershaw, que es uno de los mejores trabajos que se han publicado sobre el tema.

La película recoge fielmente los hechos mas relevantes y los plasma con implacable crudeza.

Cuenta los últimos días de un Hitler, vencido, obcecado en su gran visión y muy enfermo que se niega a ver la realidad y obliga a su pueblo a una lucha ya suicida en las calles de un Berlin destruido.

Memorable Bruno Ganz en su papel y Alexandra Maria Lara que llena la pantalla cada vez que aparece.

Sin duda alguna, el gancho de la película es Bruno Ganz, que consiguió meterse en el personaje de Hitler y hacerlo creíble en su desesperación y en su incredulidad ante la sucesión de acontecimientos que acabarán destruyendo su proyecto. Queda demostrado que el Führer desconocía muchos detalles de la psicología humana, y se sorprende y desespera al conocer los supuestos actos de traición de sus subordinados. Alrededor de este retrato psicológico que deja en evidencia al protagonista, se construye una historia sobre el fanatismo, las convicciones y la sinrazón; una historia que no sólo pretende ser un retrato sino además añadir un componente didáctico inherente. Ahí es donde tiene su principal valor.

Causó polémica y era obvio, como que Hitler no es especialmente un figura carismática y el solo hecho de ver más allá de la caricatura que se ha hecho de él en el cine, supuso una apología para muchos o un blanqueamiento del nazismo para otros, a mí particularmente me pareció uno de los mejores estrenos de ese año, creo que ya se ha dicho hasta la saciedad: gran interpretación de Bruno Ganz (es justo decir que no ha habido un mejor Hitler que él), quizá con un ritmo algo lento, pero con una intrigante y perturbadora visión hacia la casi nunca tocada (tan realistamente) personalidad de un hombre monstruoso y cruel, extrañamente poseído por una "verdad", que finalmente no lo hizo libre; interesante recreación de su entorno, de su trono desde donde veía desmoronarse su mundo con una solemnidad patética y despreciable; no podemos ser totalitarios y decir que "todos los alemanes eran unos nazis sedientos de sangre y con un sentido de la moral retorcido"; recuerden que "la mayoría" no son todos, no hemos estado allí; Der Untergang es solo la versión alemana, quizá la versión oficial más difícil y dura que le ha tocado dar a una nación en toda la historia de guerras que tenemos.