Alicia a través del espejo

La segunda parte de “Alicia en el país de las maravillas” no llega al nivel de su predecesora (también vapuleada por la crítica general de manera injusta, bajo mi punto de vista), pero eso no quiere decir que sea una mala película. Me explico.

Empezando por lo negativo, he de decir que estoy de acuerdo en lo que algunas personas han comentado sobre la presencia de personajes que “están por estar” (véase el Gato de Chesire y la tropa que le acompaña). Más allá de esto, a pesar de los errores que cualquier película pueda tener, no entiendo el porqué de tanto odio a esta cinta.

Las actuaciones son más que correctas, y me alegro de que no hayan histrionizado aún más al sombrerero, pues es algo que desentonó un poco en su primera parte (el personaje lo requiere, sí, pero no hay necesidad de llevarlo a la parodia). Mia Wasikowska cumple, como siempre puesto que es una gran actriz. Destaco a Helena Bonham Carter, la cual consigue que sintamos empatía hacia su personaje y cierto rechazo, en algunos momentos, hacia el interpretado por Anne Hathaway (en ellas claramente se puede captar aquello de “ni los buenos son tan buenos, ni los malos son tan malos, y todo acto tiene su consecuencia, hasta el más estúpido”).
La historia es correcta, entretenida y con muchas metáforas que, lejos de ser obvias para el público infantil, les invita a reflexionar (lo digo porque he leído en muchos sitios que la película tan sólo busca contentar a los pequeños, y en mi sala pude escuchar de la boca de algunos críos “no entiendo por qué pasa esto, ni por qué dicen esto, etc”). Creo que tanto en esta segunda parte como en la primera lo que se buscaba era reinventar el mundo de Lewis Carroll, y se consigue competentemente.
Respecto al apartado técnico, nada que criticar, un mundo colorido y extraño que invita a soñar y a divertirse.

La conclusión es que, sin llegar a ser un peliculón, esta segunda parte cumple sobradamente. Espero que se empiece a valorar más a actores como Helena Bonham Carter y Wasikowska porque son dos fieras que todavía no han obtenido, para mí, su merecido puesto en Hollywood.

Como gran seguidor de Tim Burton y de casi todo lo que hace, era mi obligación ver esta secuela de su muy personal "Alicia en el país de las maravillas" a pesar de que de que esta segunda parte llevara la firma de James Bobin, el cual hizo la mediocre "Los muppets". Así que las expectativas no eran muy altas, pero esta vez, puedo decir que "Alicia a través del espejo" ha sido una gran sorpresa.

Partimos por la dedicación que han puesto para semejar este film con su predecesor. A nivel técnico, excelente, un diez absoluto. Si no te fijas, piensas que está película es de Burton segurísimo. Sin duda alguna, lo mejor del film, aunque en lo demás, tampoco se queda corto. Los primeros 15 minutos, descolocan. En esta introducción todo parece que hay que hacerlo deprisa, sin dedicación y con ganas de que acabe ya el rodaje. Sin embargo, después de esta desdeñable opertura, el film se vuelve una alocada historia de viajes en el tiempo, muy entretenida, y con muchos enredos divertidos. Otro gran acierto de la película es que no se toma en serio así misma. El continuo uso de en su mayoría graciosos gags y el delirante argumentó que se forma nos lo afirma. Esto, a muchos filmes les viene mal, pero en esta ocasión es un factor beneficioso. Las explicaciones a algunas dudas que podían surgir tras ver el film de Tim Burton, son un hecho a recordar, pues son tan disparatadas como la película en sí. Los guiños a su predecesora abundan, y aunque se puede decir que es una versión libre del libro que da título al film, alguna que otra referencia hay. En el reparto no hay mucho que remarcar, pues en líneas generales todos los actores cumplen su personaje aceptablemente, pero voy a destacar el trabajo de Anne Hathaway y Mia Wasikowska. Por el lado de Hathaway, me sorprende que haga un papel tan malo, pues al fin y al cabo todos sabemos que no es mala actriz. Y por el otro, vuelvo a poder decir que Wasikowska hace un muy loable trabajo. Esta chica dentro de poco podrá considerarse una de las grandes de nuestra era (si es que aún no forma parte).

En conclusión, puedo decir que "Alicia a través del espejo" no es para nada lo que me esperaba, y no en el mal sentido. No es una obra maestra por los errores ya citados y por algún que otro gazapo en el guión, pero al fin y al cabo, te deja un buen sabor de boca que no todas las películas dejan. Muy recomendable.

Soy de los que aman Alicia. He leído sus libros en varias ocasiones, me encanta ese mundo lleno de locura y recuerdo con cariño aquella película de dibujos de Disney , que aunque no tenía mucho que ver con el libro, era muy simpática y graciosa. Por eso me decepcioné con la anterior a esta, pensando que Tim burton haría un gran trabajo. Si bien no me pareció mala del todo, si que en ocasiones era ridícula, carente de gracia, un sombrerero cargante y otras cosas más. Sin embargo con esta pasa todo lo contrario. Es amena, tiene toques del humor, la reina Roja destaca ante todos y el sombrerero no se hace cargante y hasta en esta ocasión te saca más de una sonrisa. En cuanto a los paisajes son espectaculares. Especial mención a la casa de la reina Roja y a los viajes del tiempo. Creo que se la está machacando porque la anterior no gustó demasiado y se tienen prejuicios sobre ella.

‘Alicia en el país de las maravillas’ es quizá la película menos lograda del director Tim Burton a pesar de haber conseguido darle su particular sello personal, ahora en la secuela Burton se mantiene solo como productor y cede la dirección a James Bobin, el responsable de las más recientes películas de Los Muppets.

Han pasado algunos años y Alicia (Mia Wasikowska) es una experta navegante, al acudir a su regreso a una recepción con Lord Ascott se da cuenta que todo lo que tenía lo ha perdido, tras un encuentro con Absolem (la voz de Alan Rickman en su último trabajo en cine), Alicia deberá regresar a la tierra de sus amigos para ayudar a salvar a su amigo el Sombrero Loco (Johnny Depp y sus interminables tics) que padece una terrible depresión.

Para ello, Alicia deberá viajar en el tiempo y remedar algún pasaje del pasado familiar del Sombrerero, pero antes deberá enfrentarse al Tiempo (Sacha Baron Cohen), un personaje al que deberá robar un instrumento que le permita viajar al pasado.

Este secuela, que solo toma como referencia el nombre de la segunda novela acerca del personaje de Lewis Carroll más un par de detalles mínimos, carece de la ambigüedad de la historia de Alicia que incluso, en menor medida, tenía la primer entrega dirigida por Burton.

Ahora la historia es reducida a una mera aventura con un exceso de efectos digitales y la novedad de los viajes en el tiempo, que son solo un pretexto para conocer los orígenes de algunos de los personajes, con muchas decisiones arbitrarias que justifiquen por ejemplo, el forzado protagonismo de Johnny Depp.

Esta nueva entrega del mundo de Alicia padece de todas esas malas decisiones, resultando una película donde pasan muchas cosas pero ninguna llega a emocionar, sin ese halo delirante que la película se supone debería tener, quedando todo en un diseño de producción si, muy llamativo y vistoso, pero que poco aporta para una película que termina por ser bastante convencional, poco entretenida y por momentos terriblemente aburrida.


http://tantocine.com/alicia-a-traves-del-espejo-de-james-bobin/

En el año 2010 Tim Burton estrenó el film más taquillero de toda su carrera. Su particular adaptación de “Alicia en el país de las maravillas” recaudó más de mil millones de dólares en todo el mundo. Pese a lo elevado del presupuesto invertido (doscientos millones de dólares), el negocio para la productora fue más que evidente. Sus llamativos decorados y vestuario (obtuvo el Oscar en ambas categorías), unidos a una colorista fotografía y al siempre estrambótico y, sin embargo, atrayente universo del célebre director californiano, formaron una curiosa combinación que, si bien atrajo al público, dejó bastante fría a la crítica especializada. Esa delgada y resbaladiza frontera entre la genialidad y el esperpento, entre lo artístico y lo grotesco, entre la imaginación desbordante y la extravagancia no controlada, concitaba con igual facilidad aplausos y silbidos.
Seis años después se estrena “Alicia a través del espejo” con la intención de repetir el éxito de recaudación y reproduciendo las virtudes y los defectos de su predecesora. Ahora James Bobin se encarga de la realización (Burton se centra en la faceta de productor), quien cuenta con alguna experiencia en el mundo de la televisión y con dos contadas apariciones en la pantalla grande a través de los personajes de “Los Muppets” en 2011 y 2014. Como era de esperar, esta segunda parte hereda lo bueno y lo malo de la primera, por lo que, seguramente, gustará a los espectadores que salieron satisfechos de “Alicia en el país de las maravillas” y decepcionará a los que en 2010 abandonaron desencantados las salas de proyección.
En esta ocasión, la protagonista regresa otra vez a su universo mágico atravesando un espejo y allí se reencuentra con sus amigos el Conejo Blanco, Absolem, el Gato de Cheshire y el Sombrerero Loco (que no es el mismo de otros tiempos, puesto que ha perdido su “muchosidad”). Para cambiar las cosas, deberá utilizar un enigmático artilugio conocido como “cronosfera”, enfrentarse de nuevo a la Reina y detener al malvado Tiempo, antes de que se cumpla el plazo marcado por el reloj y el País de las Maravillas se convierta en un mundo estéril y sin vida.
El espectáculo visual que ofrece la película es innegable, así como el grado de imaginación y el nivel de atracción que atañen a los personajes creados por Lewis Carroll. Por lo tanto, resultará toda una experiencia para las personas que disfruten dejándose llevar por el vivo colorido y la original y fantasiosa puesta en escena. Sin embargo, para aquellos que apreciamos un guión bien escrito, sólidamente estructurado y con el trasfondo de una historia mínimamente coherente, el despliegue de medios técnicos y la agudeza y chispa iniciales tienden a diluirse a medida que transcurren los minutos. Casi dos horas de proyección es un metraje excesivo para reservarlo exclusivamente al componente ocular. Queda, pues, la sensación de haber asistido a una impresionante exhibición de luz y sonido, donde el propio espectador debe poner de su parte para rellenar las lagunas de la narración. En definitiva, la estética y las formas son muy brillantes, la novela en la que se basa, muy interesante, pero la habilidad para conformar con todo ello un producto final a la altura de las expectativas generadas no es suficiente.
Dentro del equipo artístico repiten la cada vez más efectiva Mia Wasikowska (joven actriz que ya ha demostrado su gran talento en títulos como “Jane Eyre” o “Stoker”), Johnny Depp (con un personaje hecho a su medida para esta etapa profesional de desenfreno y loa a los papeles estrambóticos en los que se ha especializado, lo mismo que su compañero de reparto Sacha Baron Cohen), la siempre grata Anne Hathaway y la también inclasificable Helena Bonham Carter. Junto a ellos, se encargan de poner voz a las figuras animadas Stephen Fry y el tristemente fallecido Alan Rickman.
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@gerardo_perez_s