Corto y con filo

Primer largometraje dirigido por el cineasta alemán de origen turco Fatih Akin, antes de su gran éxito internacional «Contra la pared» (Oso de Oro en el Festival de Berlín de 2004). Es una historia de amistad y delincuencia que puede recordar un poco la atmósfera de ciertas películas de Scorsese, en particular «Malas calles». De hecho, el propio Akin ha señalado en ocasiones las similitudes de su cine, que aborda la situación de la comunidad turca en Alemania, con el de Scorsese, que ha tratado con frecuencia temas relacionados con los italianos de Estados Unidos.

La acción se desarrolla en Altona, un distrito de Hamburgo, y tiene como protagonistas a tres amigos, todos ellos inmigrantes de segunda generación, pero de diferentes orígenes étnicos, y todos ellos delincuentes de poca monta: un turco, Gabriel (Mehmet Kurtulus), un griego, Costa (Adam Bousdoukos) y un serbio, Bobby (Aleksandar Jovanovic). Cada uno de los personajes tiene su propia obsesión: Bobby, admirador de la película «Scarface», protagonizada por De Niro, sueña con convertirse en un poderoso gánster; Costa se debate entre sus tendencias delictivas y una extraña manía religiosa (que recuerda a la del personaje interpretado por Harvey Keitel en la citada «Malas calles»); en cuanto a Gabriel, de quien descubrimos al comienzo del filme que ha pasado una larga temporada en la cárcel, sueña con instalarse en Turquía. Se nos subraya desde el comienzo la fuerza e intensidad de la amistad entre los tres, que será puesta a prueba durante el desarrollo de la película.

Como luego en su obra posterior, Akin muestra la realidad multicultural de las grandes ciudades alemanas, o al menos de Hamburgo, ciudad en la que creció el propio cineasta (sólo dos de los personajes secundarios de cierta importancia son de origen alemán). A diferencia de lo que ocurre en sus películas posteriores y más conocidas, no se centra sólo en la comunidad turca, sino en las relaciones entre diferentes comunidades de inmigrantes. Sorprende la fluidez de estas relaciones, incluso entre nacionalidades tradicionalmente hostiles, como es el caso de griegos y turcos. Pero la película va más allá de este retrato de una nueva sociedad europea, y nos presenta un thriller bastante creíble, con ciertas resonancias de Scorsese y Coppola pero con personalidad propia, en el que interesan más las personas que las escenas de acción (no se busquen momentos espectaculares en este sentido, porque no los hay), con predominio de planos cortos y una fotografía oscura y deprimente.

No sé si este comentario puede servir a alguien, pero tengo que decirlo: Mehmet Kurtulus esta para morirse! La película esta bien, retrata la relación de tres amigos de la infancia con los bajos fondos de Hamburgo, cada uno de ellos lo hace desde un punto de vista distinto, y como simpre con Fatih Akin (creo que éste es su primer largometraje) aparece Estambul como elemento de esperanza al final del camino.

Europa es eso, una amalgama interracial donde se junta lo mejor y lo peor de las diferentes culturas, pero donde no se quiere aceptar la diferencia de las mismas, todo tiene que ser políticamente correcto, por lo que a las clases con raíces emigrantes solamente les queda la marginación y los pocos recursos que los nativos desechamos. La posibilidad de escarpar a esto encuentra trabas en todo lo que les rodea, la familia, los amigos, el trabajo, el barrio.... todo te ata a tu destino

Buena película que cuenta la historia de tres amigos que eligieron el camino fácil: el griego, ladrón pero que es un cacho de pan; el serbio, que pasa de vendedor a mafioso; y el turco, que acaba de salir de la cárcel e intenta enderezar su vida. En ella se mezclan sus negocios, sus amores, sus familias, con la parte sucia de la ciudad de fondo. Y sobre todo ello, sin importar sus diferencias o sus peleas, sus errores o sus traiciones, está una amistad tan enraizada que nadie puede romper.

El argumento se centra algo más en el personaje turco, pero a su lado, y como secundarios-principales están no sólo sus dos mejores amigos, sino también las novias de éstos. El reparto interpreta, más que verazmente en ocasiones, sus papeles; y la película resulta, como mínimo, muy realista, muy cercana. Un buen trabajo para Akin, aunque demasiado "típica" y negra para mi gusto.

Primera película de Fatih Akin, un tipo que ha tenido después una carrera como cineasta bastante variopinta y bastante interesante, y que aquí, aunque se le nota la falta de experiencia en algunas cosas (algún baile de cámara innecesario, algún altibajo de ritmo) ya apuntaba maneras con esta mezcla de drama sobre la amistad y thriller criminal que cuenta las andanzas de tres amigos, uno turco, uno serbio, y uno griego, los líos en los que se meten en los bajos fondos de Hamburgo, y cómo ello va afectando inevitablemente a su amistad.

La puesta en escena es sobria, la fotografía es áspera, hay como ya dije más arriba altibajos de ritmo, y se alternan escenas en que el uso de la cámara es muy creativo con otras donde se pasa de rosca y marea un poco. La ambientación está bastante bien, las interpretaciones son correctas, los personajes no están desarrollados a fondo pero tienen cierto carisma y su relación es creíble, los diálogos no están mal y el desarrollo de la trama es bastante interesante. Alterna con acierto momentos dramáticos con situaciones cómicas y algo de intriga, y en general funciona bastante bien.