Straight Outta Compton

'Straight Outta Compton' es sin duda el sleeper del año y personalmente una de las experiencias más completas que he podido disfrutar en un cine.
Antes de nada me gustaría decir que no entiendo cómo una película que ha costado 28 millones y que lleva una recaudación de más de 200, convirtiéndose en el biopic musical más taquillero de la historia y siendo número uno en las taquillas de Estados Unidos, Gran Bretaña, Irlanda, Alemania, Suiza e Islandia, es estrenada en España en tan pocos cines. Y menos con la excelente crítica que esta recibiendo en general...pero bueno, a lo que vamos.

¿Le puede interesar esta película a quien no le guste el hip-hop? Por supuesto que sí, es más, diría que es a ese tipo de gente a quien más está sorprendiendo la película. Como dato bastante curioso, según las cifras que publicó Universal tras el fin de semana del estreno, un 46% de los espectadores que la vieron son negros, un 52% mujeres y un 51% menores de 30 años. Nada que ver con las previsiones iniciales, lo que demuestra que 'Straight Outta Compton' ha fulminado los criterios racistas de la industria.

Lógicamente los que escuchamos esta música y conocemos la historia, disfrutaremos muchísimo más, pero la película no se limita solo a contar la historia de un grupo musical que van desde lo más bajo del ghetto hasta convertirse en multimillonarios de la industria musical como Dr. Dre o incluso de Hollywood como Ice Cube. El fenómeno que causó N.W.A. en su tiempo fue algo más. Por eso los que no estén tan relacionados con el género, tienen la oportunidad de conocer la historia de un grupo que revolucionó, no solo el mundo musical, sino también la mentalidad de miles de jóvenes que vieron sus letras como un arma de libertad de expresión contra la opresión policial y el abuso de autoridad. Además también se muestra los entresijos de la industria musical de manera muy realista.

El trio protagonista me ha sorprendido mucho, con unas actuaciones muy realistas, realmente parece que estes viendo a esos personajes de jóvenes.
Eso sí, aunque me considero un amante de los buenos doblajes, si hay una película que hay que ver sí o sí en versión original subtitulada, es esta. Es imposible doblar a los niggas y menos con las voces de niñatos pandilleros que le han puesto en España, que no te meterán lo más mínimo en lo que realmente intentan transmitirte esos personajes. Además que al ser una especie de "documental musical", parte del encanto está en escucharlo tal como fue. Y por cierto, los subtítulos que he visto en el cine me han parecido muy bien hechos, buena traducción y ajustándose según los momentos a un lado o a otro de la imagen.

En definitiva es una película que entretendrá y emocionará a cualquier amante de la música y de las buenas historias en general, pero que sin duda fascinará a los fans del hip hop, ya que abarca de manera muy completa y perfectamente realista, los orígenes de unos iconos del rap como Dr. Dre, Ice Cube o Eazy-E.

A mitad de los años 80 Compton, una ciudad en los suburbios de Los Angeles, se ubicó en el mapa mundial gracias al movimiento musical de rap gestado en sus entrañas, entre una gran cantidad de problemas sociales, abusos policiales y odio a causa de la diferencia de razas.

En ese contexto emergió una banda que le puso letra a todas las injusticias que vivían en las calles de su comunidad, N.W.A., surgida a iniciativa de dos amigos, Dr Dre y Ice Cube, quienes con el apoyo económico de un traficante de la zona y posterior vocalista, Easy-E, junto con MC Ren y DJ Yella, consiguieron dar voz a su gente, con letras y rimas que sin tapujos narraban y denunciaban cualquier injusticia que sucedía a su alrededor.

Su primer álbum, del mismo título que el film, se convirtió rápidamente en toda una declaración de principios para su comunidad y evidenció una realidad que el resto de la población estadounidense no quería ver, hasta volver demasiado popular su estilo musical que sería después conocido como gangsta-rap y que convirtió a su integrantes en superestrellas. La aparición de un manager abusivo devendrá en la separación de la agrupación y posterior despunte de algunos de sus miembros.

El filme de F. Gary Gray, con más experiencia en filmes de acción además de un documental de Cypress Hill, consigue narrar la breve historia de la agrupación y al mismo tiempo exponer una problemática que aún hoy en día no parece, lamentablemente, haber cambiado mucho, y lo consigue a pesar de la excesiva duración del filme y con la gran aportación de sus intérpretes, donde se destacan Jason Mitchell como Easy-E, y sobre todo O’Shea Jackson Jr., quien interpreta a Ice Cube, su padre en la vida real.

Gary Gray consigue una película que contagia la indignación e impotencia de los abusos y opresión a cabo de las fuerzas del orden, con un afortunado retrato de ese momento basados en prejuicios bañados de odios, a través del retrato de cada uno de los personajes del grupo, aunque algunos obviamente no muestra la historia completa, como en el caso de Dr. Dre, uno de los productores de la película, que consigue empatar sin problemas escenas duras y tensas con los momentos musicales tanto desde el estudio de grabación como las actuaciones en vivo.

Intensa y atrapante, Straight Outta Compton es un filme que lo mismo entretiene y mueve a la reflexión, con una narración sólida, grandes actuaciones y las poderosas letras de N.W.A., en la primera película que se perfila como favorita en la incipiente temporada de premios.

http://tantocine.com/letras-explicitas-de-f-gary-gray/

Que "Straight Outta Compton" no haya estado nominada a los principales premios de cine de este año, siendo una de las películas más taquilleras y con mejores críticas tanto de público como de expertos en cine, es algo incomprensible, y no solo en el apartado técnico y actoral, ni siquiera se le ha dado la oportunidad de optar a algún galardón referente a lo musical! por eso flipaba tanto Jamie Foxx en la gala de los Globos de Oro, y esto yo creo que no tiene nada que ver con el boicot a los actores negros que ha habido este año en los Oscar, creo que la han considerado una película de menor categoría, cuando definitivamente no lo es.
La historia está tan bien contada que es necesario su largo metraje. Es cierto que NWA fue un grupo de corto recorrido, pero en ese espacio de tiempo ocurrieron tantas cosas, la mayoría de interés desde un enfoque social (la lucha racial, la vida en los suburbios, la creación de un estilo musical que se convirtió en rebelión y libertad de expresión para mucha gente...) que era importante que se nos narrara todo paso a paso y lentamente, por lo que no comparto la opinión de aquellos que dicen que se hace larga y de que sobran cosas.
El género musical del hip hop no ha sido muy popular en España, pero si ves esta película, si eres de los que no te gusta el rap, quizás comprendas algo de su esencia al final, o quizás simplemente termines entendiendo los comienzos difíciles de ese grupo de chicos con "actitud". Si eres un seguidor y amante del buen hip hop, esta película es para disfrutar, agradeciendo que en la versión doblada al español, las partes en las que rapean las hayan subtitulado.
Un aplauso para quien haya elegido el cásting; los actores que encarnan a Dr Dre, Ice-T y Eazy-E son clavados, parece que los estás viendo con treinta años menos, pero sus virtudes no solo se ciñen a sus caracterizaciones, sino también a sus interpretaciones, concienzudamente estudiadas, con un poder gestual y oral que embauca al espectador.
Notable. Necesaria.

Resulta increíblemente satisfactorio el sentimiento de excitación que crea esta asombrosa película biográfica. Straight Outta Compton origina en cada uno de los espectadores las ganas, e incluso la pasión, por la música rap y genera la sensación de ser expertos en los artistas de la película en el ámbito biográfico y discográfico, además nadie sale de la película sin tener toda la cultura y la gente de Compton iladas al pensamiento.

La película, desde el minuto uno, empieza pisando fuerte con escenas insustituibles de acción y música de la mano (y voz) de los propios personajes protagonistas, que constituirá una de las bandas sonoras más electrizantes que se hayan escuchado. Recuerdo que cada vez que sonaba una canción, los altavoces bajos del cine incrementaban su volumen, creando, así, una película excitante y motivadora para los amantes del rap. Sin embargo, en diversas ocasiones se puede apreciar que Straight Outta Compton parece ser una película para gente con gusto musical y ningún gusto por el cine, ya que la música eclipsa los diálogos resultando, de esta manera, ser enervante. Yo, personalmente, he escuchado más a MC REN “rapeando” que conversando. Y, además, es la primera vez que veo una película musical en la que en ningún momento se hace uso de música ambiental, sino de canciones de un mismo género y artistas (Gangsta Rap de NWA) cuya reproducción en la película resulta previsible y poco agradable.

No obstante, resulta ser una película enriquecedora desde un punto de vista cultural y moral. Los alumnos en la escuela aprenden “discriminación” como concepto, pero este concepto no cobra importancia hasta que no ven su gravedad en ejemplos físicos como es Straight Outta Compton. Durante la película, el director, Gary Gary, nos ilustra con imágenes reales de la discriminación racial acompañada por una perturbante, pero cierta, violencia policial que es ejercida con uso inadecuado de la autoridad, cuya visualización es necesaria para la comprensión de la realidad actual en los barrios conflictivos.También refleja la división jerárquica de las calles y la dificultad para la supervivencia. Pero esto es necesario para revivir el fuerte golpe que este género musical, el Gansta Rap, dió en la cultura. De esta manera, la película nos enseña testimonios y hechos olvidados de los años 80 que la gente no puede encontrar en los libros de historia.

Finalmente, he de mencionar, cómo no, a los actores. Muchos críticos coincidimos en la interpretación genuina de O’Shea Jackson Jr, Corey Hawkins, Jason Mitchell, Neil Brown Jr y Aldis Hodge, todos excelentes en sus respectivos papeles. Y, aunque el vocabulario sea excesivamente soez, generando un diálogo repetitivo y vulgar, y la historia de cinco protagonistas deje una trama pobre y poco completa, los actores hacen que esta película sea más que real y eso, la emoción que son capaces de contagiarte, no tiene precio.

Para concluir, únicamente voy a decir que es posible que esta película sea excesivamente comercial, e incluso puede parecer un anuncio publicitario de dos horas y treinta minutos, y puede que la introducción de los personajes deje mucho que desear (me refiero a DJ YELLA y MC REN), pero de una cosa estoy seguro: esta es una de las mejores películas biográficas jamás vistas y despertará un interés apasionado de todos los públicos por la música rap sin ninguna duda.

Compton, un condado de Los Angeles, California era en los 80 el reflejo oeste del Bronx en Nueva York, donde diez años antes había surgido la cultura hip hop en el que el rap era un pilar fundamental como medio básico de expresión artística del desarraigo social de las comunidades afroamericanas.
Uno de los grupos que surgieron del underground de Compton fue NWA (negros con actitud) donde los pandilleros dominaban las calles hostigados por la brutalidad indiscriminada de la policía. Eric Lynn Wright conocido como Eazy-Z fue uno de estos chicos de la calle que supo canalizar la frustración de su entorno con el estilo gangsta en la música apoyado por la visión comercial del manager Jerry Heller. Un estilo donde los textos reflejaban con deliberada crudeza el contexto de sexo, drogas, discriminación racial y violencia en que se movían sus interpretes. El éxito fue inmediato y mayoritario así como las críticas de los sectores moderados y conservadores incluido el FBI que acabó por darles más publicidad que otra cosa.
El triunfo de NWA no fue solo creado por Eazy-Z, a su alrededor confluyeron en la banda el talento del resto de miembros que tuvieron su propia carrera exitosa por separado.
Todo ello nos lo cuenta en dos horas y media de las tres que se rodaron Gary Gray que andaba desaparecido desde hacia 6 años, relanzando su carrera con el récord de recaudación de la historia en biopic-musicales. Con un comienzo potente, Gray se deja llevar por los cánones al uso de los bio-pic narrando de forma lineal y cronológica la sucesión de hechos más relevantes aderezados con los hits del grupo. Excelente el trabajo de producción entre el que se encuentra Ice Cube, uno de los miembros iniciales de NWA, actuaciones correctas y algo de espacio, poco, para el entorno social más relevante desde finales de los 80 hasta la muerte de Eazy-E en el 95 y la vida personal de sus protagonistas.
Es curioso constatar como se repiten invariablemente los patrones de las grandes estrellas de la música contemporánea , desde los orígenes humildes, el desenfreno de la fama, los egocentrismos, el reparto desigual de las ganancias, los taimados managers, hasta llegar a la disolución para tiempo después añorar el pasado. Todo tan previsible y entretenido como esta cinta donde más vale que no odies el rap.