El último cazador

Me ha sorprendido la naturalidad de los personajes, que te hacen creible en la totalidad la historia, como si hubiesen vivido o vivieran en contacto directo con la naturaleza, conviviendo como aunténticos tramperos con el entorno cercano, natural.
La fotografía es fantástica, luminosa, te recrea en unos paisajes maravillosos, llenos de nostalgia, aparte de darte una lección de humanidad, de respeto hacia le el medio ambiente, el cariño y amor hacia los animales, y su aspecto didáctico de querer transmitirnos la esencia de eso últimos cazadores que equilibran la evolución, la conservación, el mantenimiento de lugares paradisiácos. Una película hecha para los amantes de los documentales y a los que nos gusta conocer la tierras casi inexploradas bajo la tutela de un experto y conocedor de su ambiente. Recomendable para incluso transmitir los valores de respeto a los niños/as, ya que tiene un gran aliciente educativo.

Quizás no se trate de una película que hará historia por su guión o efectos especiales, "solo" es una película para los amantes de la naturaleza. Película simple, pero llena de imágenes de belleza sublime, a las que prefiero antes que buenos efectos especiales. Animales salvajes y perros fantásticos son los protagonistas de un film que, en algunos aspectos, supera a "el oso" de Jean-Jacques Annaud.
Para relajarse y disfrutar de sus paisajes

224/24(20/06/09) Una oda a un mundo que agoniza, un canto a la comunión del hombre con la naturaleza, contada de forma simple, sin hacer machacón su mensaje, te lo inyectan de forma sutil, a través de la vida de un cazador, Norman, que en estos tiempos vive apartado del mundanal ruido urbanita, hace vida en las bellas e inhóspitas tierras de Yukón en Canadá, donde coexiste con su pareja Kebaska, allí se dedica a la caza, caza que le sirve para comer y para vender las pieles, así obtener un poco de dinero para comprar las cosas que no puede obtener en las montañas. Este es un documental que me recuerda sobremanera al de “Nanook”, una obra contemplativa que hace énfasis en las maravillosas visiones de la salvaje naturaleza. En este “El último cazador” seguimos a Norman durante varios meses, asistimos a su dura vida y a la vez degustamos lo mucho que disfruta con esta forma de vida, sentimos su amor por los perros y caballos, presenciamos el amor que siente por lo que hace, llegando a conversar con los animales que caza, explicándoles el motivo por el que lo hace. Está rodada de forma que por momentos estemos visionando frescos de una belleza sublime, aprovechando el magnífico entorno para empequeñecernos con sus soberbios planos fotografiados excelentemente, donde la grandeza de lo que vemos nos invade hasta poseernos y hacernos participe de su mensaje de que para ser feliz no hacen falta tantos avances, hay gente que disfruta con lo primario, gente que aspira solo a ser parte de un hábitat salvaje esplendoroso como si del último paraíso en la Tierra se tratara. Recomendable a los que gusten de gozar con la naturaleza en unión perfecta con el hombre. Fuerza y honor!!!

Quizás no tenga unos diálogos geniales y puede parecer simplista pero tampoco le hace falta nada más para mostrar lo que quiere, la vida de uno de los últimos tramperos y el amor por la naturaleza, siéntate y disfruta... Buena fotografía

Una película preciosa, es una mezcla de documental y película, tiene un ritmo lento, tal y como es la naturaleza que nunca va con prisas. La fotografía es maravillosa, que paisajes, que ríos, que montañas, los animales de todo tipos. Cuenta la historia de un hombre, su compañera, y sus animales (2 caballos y sobretodo los preciosos 7 perros), el modo de vida que llevan en mitad de unos bosques lejanos a la civilización en Canadá. Sin necesidad de un guion muy extenso en palabras, se consigue una historia muy bonita y que te atrapa durante toda la película, queriendo que no se termine en ningún momento. Tiene algunos momentos que te ponen en tensión, y hace que no te relajes del todo. Me ha encantado, es todo natural, sin nada artificial. La recomiendo a todo el mundo.