Si hoy es martes, esto es Bélgica

Un acelerado recorrido turístico de Londres a Roma. El entorno de la Europa post 68, que en aquel momento sería de gran interés para el público norteamericano, ya casi nos puede resultar también interesante a los europeos que no conocimos aquellos años míticos. A lo largo del viaje, como no podía ser menos, entre los viajeros se van produciendo cambios, amoríos y desengaños, aunque son demasiados personajes para que se pueda profundizar mucho en todos. La película aún resulta agradable, sobre todo si se mira con cierto espíritu arqueológico.

Sátira sobre el turismo desordenado de los americanos por Europa, anticipando lo que serían luego los japoneses.
Filmada en mitad del movimiento hippie y tras el 68, meten el tema central (if its thuesday it must be Belgium) y una actuación de Donovan, sin que venga mucho a cuento. También incorporan una pseudo trama juvenil de rebelión contra los padres.
Por lo demás, bastante anodina. Como curiosidad, aparte de los temas de Donovan, los cameos de Vitorio de Sicca y Joan Collins

En mi opinión es una comedia entretenida, que entreteje diversas historias individuales enlazadas por un viaje turístico de un grupo de turistas estadounidenses en autocar por Europa, desde Londres hasta Roma. No obstante, la historia de amor entre la turista interpretada por Suzanne Pleshette y el guía británico encarnado por Ian McShane es tópica, floja y poco interesante. Lo mejor es la crítica al turismo de masas, y, en segundo lugar destacan los cameos de diversas estrellas de cine de la época.

*Cómo conocer siete países europeos en dieciocho días

Charlie, Ian McShane, es un guía turístico que vive en Londres con su mujer entre cada circuito en los que trabaja durante varios días fuera de su ciudad. Ella mientras tanto, espera paciente su deseado regreso a casa.

Si hoy es martes, esto es Bélgica comienza mostrando variopintos viajeros estadounidenses, éstos acuden al aeropuerto londinense para comenzar un muy ambicioso programa turístico. La agencia World Wind Tours les llevará durante dieciocho días a conocer siete países europeos con el acompañamiento del guía Charlie. Para empezar éste llega, con retraso a recogerlos, cuando ya comienza a cundir la ansiedad, luego algo calmada con el consabido reparto de habitaciones al llegar al hotel.

Aunque Si hoy es martes, esto es Bélgica es de hace cincuenta tres años sin embargo en lo fundamental sigue siendo realista con la descripción de éste tipo de intensos circuitos. Ahora los turistas ya no viajan con traje y sus maletas ya tienen ruedas, han cambiado las modas y se han modernizado los viajes.

Sin embargo sigue existiendo el viajero muy exigente, con demandas y expectativas irreales, que en ocasiones trata de poner en problemas a los organizadores. Un variado y famoso elenco protagoniza el crisol de hombres y mujeres deseosos de conocer Europa en apenas medio mes. Entre otros, Ian McShane, Santa Berger, John Cassavetes, Joan Collins, Vittorio De Sica, Anita Ekberg, Ben Gazzara, Virna Lisi, Catherine Spaak, Elsa Martinelli y Robert Vaughn.

*Revoltijo de países con mala digestión posterior

El primer día del tour devoran dos mil años de historia en apenas una jornada. El revoltijo, Carnaby Street, la Guardia Real, los Museos Victoria y Albert más los pubs nocturnos, empieza a hacer sus primeros divertidos estragos.

Al día siguiente tocan diana a las seis de la mañana para madrugar, empezando dos horas después viaje por carretera en autobús con dirección a Holanda. Tras asistir al conocido mercado de quesos, Irma, Reva Rose, una turista del grupo se confunde de autobús continuando el viaje en otro autobús lleno de japoneses. A partir de entonces su marido, Harve, Norman Fell, hará continuos esfuerzos por localizarla a lo largo del tour de país en país.

La astracanada continúa en los más conocidos lugares de Amsterdam, antes de seguir ruta a Bélgica. El Atomiun, la Grand Place o el Manneken Pis, son digeridos con rapidez como un vulgar plato combinado.

El guion de David Shaw está lleno de gags y alocadas aventuras en la trama que adereza ésta película y con historias cruzadas dentro de ésta road movie.

Si hoy es martes, esto es Bélgica es una comedia recomendable para pasar unas horas divertidas y aún más si la visionamos al comienzo o final de nuestras vacaciones anuales. Quien haya vivido alguna experiencia similar por tierra o a bordo de un crucero puede sentirse muy identificado. Éste modo de viajar sin respiro deja al ansioso viajero más cansado y con gran confusión sobre lo visto. Su posterior recuperación necesitará a su vuelta de una cura de reposo y desintoxicación visual.

*Temo que nunca quiera volver a casa

Nuestros inconscientes e intrépidos viajeros, deseosos de volver a sus casas para contar y presumir de todo lo visto, continúan por Luxemburgo, Suiza, Liechtenstein e Italia.

Mientras tanto el hiperactivo Charlie va atendiendo como puede a sus amigas de cada ciudad visitada, y aún tiene tiempo para tantear entre las viajeras del circuito. En ésta ocasión empieza a sentirse especialmente interesado por Samantha , Suzanne Pleshette, atractiva mujer que pone en jaque al caprichoso y enamoradizo guía.

Hay que destacar la banda sonora a cargo de Walter Scharf, con varios temas musicales de sabrosas letras que añaden pimienta al alocado ritmo del ambicioso tour.

Si hoy es martes, esto es Bélgica contiene varias secuencias muy divertidas llenas de ocurrencias cómicas. Disfrutad con los intentos seductores del guía, la parada obligada del autobús en medio del campo o la apurada visita de un viajero con una clásica gran familia italiana. La trama también recoge las canciones a coro en el autobús y las consabidas fotos del grupo de viajeros, en ésta ocasión sobre las escalinatas de la Plaza de España en Roma.

Si hoy es martes, esto es Bélgica aporta una acertada e irónica crítica a éste tipo de viajes exagerados, donde con frecuencia se desconoce en qué ciudad se encuentra el estresado turista. También nos hace pasar un buen rato entretenido al tiempo que nos muestra paisajes y monumentos de nuestra tan diversa Europa.

Muy acertada la secuencia del conocido actor Vittorio De Sica, que interpreta a un fabricante artesanal de zapatos, tratando de entender a un turista estadounidense desconfiado. También son clásicas las escenas en éstos circuitos, con la última cena del grupo de viajeros o las sentimentales despedidas al final del tour.

*Conclusión

Si hoy es martes, esto es Bélgica es un título ya clásico en el género de las películas de viajes. Divertida e irónica crítica del empacho al que se someten voluntariamente los ambiciosos turistas que pretenden conocer un país, o Europa en éste caso, en apenas medio mes.

Un amplio reparto, con actores y actrices muy conocidos, dan buena réplica al variado grupo de estadounidenses que viajan aceleradamente por Europa.

Recomendable para pasar una divertida jornada y necesaria de prescribirse para ver antes de plantearse hacer una alocada hazaña parecida.

Escrito por Fernando Gálligo Estévez