Spider-Man: La serie animada (Serie de TV)

Antes de que Sam Raimi reflejase con acierto al hombre araña en la gran pantalla con las dos primeras partes de la trilogía, todo lo que teníamos era esta divertidísima y entrañable serie de animación que echaban en Megatrix. Ciertamente no era ninguna maravilla a nivel técnico, con un estilo de dibujo bastante rutinario y algo cutre, pero tenía un encanto de la hostia. Las escenas de acción molaban y ver a Parker decidirse entre irse con Mary Jane o patearle la cara a algún villano era suficiente para que nunca decayera el ritmo.

La humanización de Parker era uno de los aciertos de esta serie que, pese a todo, tenía toda su magia en la cantidad de personajes que había y que hacían impredecible el curso que iba a seguir: Venom, Duende Verde (varios, de hecho), Morbius, Octopus, Shocker, Rhino, un tío de hielo que no recuerdo cómo se llamaba, el doctor que se convertía en lagarto (como molaba), un murciélago gigante...

La diversión no se limitaba a eso, sino que además había numerosos cameos de otros personajes de la Marvel. Y esos eran, a mi juicio, los mejores capítulos: Spiderman echándole un cable a los X-Men, la aparición de Punisher, un capítulo donde salía Blade, otro con Capitán América... incluso había uno donde se juntaba un personaje de cada cómic para enfrentarse a nosequé cosa del futuro. No sé si todo esto seá muy fiel al cómic, pero con 10 años eso me la soplaba y de hecho sigue soplándomela ahora. Era divertida a rabiar y con eso, sobraba.

La serie de dibujos animados de Spiderman era uno de los motivos para que nos levantáramos cada fin de semana a las 8 de mañana a ver la tele...Si durante la semana teníamos que hacerlo por obligación, cuando llegaba el sábado lo hacíamos por placer, pues no nos importaba dormir mucho más, por lo menos ese era mi caso.

El club Megatrix, pero sobre todo Spiderman era uno de los grandes reclamos (en un tiempo en donde no se gozaba de la variada oferta que ofrece el canal digital), para que nos levantáramos a disfrutar de la caja tonta mientras nos tomábamos el cola-cao. Al margen de que Spidey sea uno de mis personajes favoritos de cómics, la serie de dibujos recogía la esencia que todo buen aficionado precisa del gran hombre araña con traje azul y rojo. No tenía nada que ver con aquella otra porquería de los 60 en la que el traje apenas tenía rayas y el dibujo era más allá de lo arcaico, o aquella otra en la que compartía elenco con el hombre de hielo y una heroína que ya ni recuerdo.

La serie de Bob Richarson mostraba a un Spiderman inteligente, con gran sentido del humor, enamorado de Mary Jane y enfrentado (menos que en las pelis de Raimi) con la responsabilidad que supone tener un gran poder. Los dibujos eran bastante notables para la época y las historias, si bien algunas eran un poco tontas, muchas eran espectaculares (cuando se desarrolla la historia de Veneno, la de Morbius o cuando el Peter se empezaba a transformar en un araña acosado por el "castigador"). No sé si ahora la veo y me parece infantil, quizás...Pero francamente que le quiten lo bailado, porque en aquella época me hacía disfrutar y eso me basta.

Por otra parte, había un gran esfuerzo por parte de los creadores para que la serie sea amena, ya que se preocupaban porque aparecieran casi todos los enemigos de Spidey, así como sus distintos amigos y superhéroes, tal y como ya apuntó Caith_sith en su crítica. Tipos como el doctor Extraño, Matanza, Blade, Kraven o Lobezno le daban el toque que hacía la serie aún más mítica...En mi opinión nunca hubo una serie de dibujos sobre Spiderman mejor que esta. Lástima que no haya durado más.

7´4.

Una de las series animadas que marcaron mi infancia, sin duda la mejor de Spiderman con diferencia, mucho mejor que las que ahora se hacen. Era una serie enfocada más para un público joven y adulto que para niños como es ahora, además tenía más realismo y calidad que las que hay ahora. Se veía mucho el lado humano del héroe y sus responsabilidades de justicia, así como los problemas personales que tenía que afrontar (Mary Jane especialmente), era una serie grande con buen contenido dramático y buenas escenas de acción. Recuerdo que salían casi todos los villanos clásicos del hombre-araña, repitiéndose muchos en varios episodios y hasta aliándose o enfrentándose unos con otros, lo cual hacía que hubiese con frecuencia cantidad de episodios en los cuales Spiderman no luchaba contra uno sino contra varios enemigos, tales como el Doctor Octopus, Camaleón, Misterio, el Buitre, Duende Verde, Carnage, Venom y como no Kingpin, este último era el villano por excelencia.
Pero a lo largo de la serie aparecían también héroes de Marvel que ayudaban a Spiderman como Ironman, Gata Negra, Daredevil, Blade o los X-men o el Capitán América, algunos de ellos se hicieron aliados de por siempre del protagonista y le acompañaron en los últimos episodios. Esta serie hizo grande a Spiderman, sobretodo porque en ella era el superhéroe que siempre salvaba al mundo (se llegó a reconocer en boca de otros superhéroes de la serie), y se vio especialmente en aquella última temporada en la que Spiderman se aliaba con los 6 guerreros olvidados y combatía junto con otros grandes como él en las guerras secretas que enfrentaban a héroes contra villanos (todos ellos de Marvel) en otras galaxias, para salvar la Tierra.

Esta serie animada se estrenó un 19 de noviembre 1994 en la televisión de Estados Unidos, dirigida por Bob Richardson.

Posiblemente la mejor adaptación del cómic del Hombre Araña, llevado a las pantallas televisivas con presentación animada. La animación es una maravilla para la época y para hoy en día también. Los personajes son muy bien caracterizados. Qué decir de los villanos, con apariciones que dan guiño positivo a los legendarios cómics del Trepador. Lo que me gusta es que es la única serie del Hombre Araña en la que se ha sabido aprovechar de manera brutal lo que es la saga de Venom.

Podemos apreciar a un Peter Parker fuera de los orígenes de cuando tuvo su picada de araña. Tal y como lo dibujo Ditko, que es cuando Peter Parker se hace valer y deja de ser el pelele que vimos en la primer película. Personas decían que el Hombre Araña de Nicholas Hammond (70’s) se parece al de esta serie animada, es por lo mismo, por el personaje que Steve Ditko creó para alejarse de la mala perspectiva que hacía que el Hombre Araña tuviera fuerza y Peter Parker no.

Los episodios tienen conciencia y son inteligentes. Las relaciones con los personajes, como Mary Jane y Peter, son tal como las coincide el cómic. Como he dicho, la adaptación de cómic es lo mejor que he visto en una serie animada; desde la aventura de los ocho brazos, las guerras secretas, la saga de Venom, los Seis Siniestros, los otros Duendes Verdes, hasta las Guerras Clon del Hombre Araña. Todo contado de una manera para que lo disfruten los más pequeños y hasta los eternos seguidores.

Muchos dicen que tiene un aire infantil y que es sólo para niños, ¿qué rayos esperaban al ver la serie? Es una maldita serie animada, para niños, para seguidores, para los que no tengan nada que hacer en el horario matutino y se avienten del edificio más alto de Nueva York para poder disfrutar con gusto lo que es esta magistral serie. En serio que, una serie muy recomendable.

Increíble pero cierto, esta serie le da mil vueltas a la última película de Spider-Man en todos los sentidos. Aquí el personaje de Peter Parker es más creíble, el personaje de Mary Jane es más creíble, Venom de más miedo, etc. ¡Y eso que solo es una serie infantil de dibujos animados!

He de reconocer que yo también estaba enganchada cuando la echaban en Antena 3, y es que es de las pocas series que adaptaron muy bien del comic. Por supuesto es una serie para niños, yo ahora no podría verla porque me aburriría como una ostra, pero para un niño de 7-12 años es ideal.

Lo mejor: Venom.
Lo peor: Demasiado infantil.