Los indomables

Heston vuelve a Hawaii en este interesante film bien secundado por Geraldine Chaplin, John Philip Law, Tina Chen, etc. Sensacional banda sonora de Henry Mancini, estupenda fotografía. A veces se hace un pelín larga pero no te defraudará.

Película de aventuras algo superior a la media de lo que nos tenían acostumbrados allá por principios de los 70. Es una película algo mas completa a la hora de describir otras culturas como la china. El Hollywood clásico o el no tan clásico siempre había echado mano de estereotipos para describir otros pueblos, por ello es de agradecer el intento de esta película, que da casi el mismo protagonismo a Tina Chen que a Charlton Heston. Ella está fantástica y Charlton es Charlton, ese tipo duro y exigente pero de buen fondo. Geraldine Chaplin tiene un pequeño papel muy en su línea de mujer inestable mentalmente.
Dos horas de buen entretenimiento con dosis épicas e incluso históricas.

Impecable adaptación de una novela de James A. Michener, que anteriormente había dado lugar a Hawaii, con Julie Andrews. En esta ocasión todo el peso de la película lo lleva Charlton Heston.

Acapara la misma con la desconocida Tina Chen, cuya participación se antoja también fundamental para seguir fielmente la trama de la misma. No podemos decir lo mismo de Geraldine Chaplin, que si bien al principio, al ser la esposa del principal protagonista, desaparece casi por completo, y en su escueto papel pasa demasiado inadvertida.

Película de aventuras, con una trama muy entretenida en la que vemos desde los entresijos familiares con herencias envenenadas, hasta la creación de unas tierras indómitas convertidas en un vergel a causa de la pericia y de la suerte a partes iguales. Las costumbres chinas de padres a hijos, pandemias desastrosas…en fin, una peli muy entretenida, que se pasa en un boleo.

Fue nominada para alcanzar la estatuilla por el mejor vestuario. Un 7.

Teniendo en cuenta que el 6 es el equivalente a INTERESANTE, está película es de 5. No es creíble que sea interesante porque siendo una película de aventuras con un buen presupuesto, no tiene nada de atractiva; aunque no sea mala. Cuenta eso sí con Charlon Heston, tipo estimable donde los haya, actor con mayúsculas, americano impasible y monógamo de toda la vida para llevar la contraria a los de su gremio, pero su papel es de un ir y venir sin más tiento a pesar de su mano de hierro en el empiece como capitán de un barco de esclavos; que es lo mejor de la película.

Hawaii tenía un régimen monárquico suyo, propio y yo, personalmente, hubiera preferido que se hundieran las islas sólo por evitar que se las quedaran los americanos con el acuerdo de los masones ingleses. Y nada, la historia de la china lleva la mayor parte del metraje. La china es muy lista, eso sí, y relatará una vida melodramática bien detallada pero la película se hace larga y espesa como el engrudo.

Los dos títulos de la cinta, el original y el hispano, nos sirven para bautizar la reseña. Aunque los hawaianos que nos encontremos sean ingleses que apenas llevan en las islas un par o tres de generaciones, o se trate de esclavos chinos (3 dólares al mes de sueldo) que llegan allí en busca de fortuna. Eso sí, son indomables todos.
El comienzo es bien descriptivo. Whip Hoxworth (Heston) es el capitán de un velero que trafica con los esclavos chinos que lleva a Hawái en la bodega donde ya han muerto siete. Un tumulto en la misma nos indica que también hay esclavitud entre los esclavos. Ahí está la joven Nyuk (Chen) para demostrarlo.
Sobre estos dos personajes, indomables, se centra el tema. Las familias del esclavista y de la esclava.
Basada en la novela "Hawaii" de James A. Michener, la película es continuación de la primera adaptación cinematográfica del texto (Hawaii, 1966).
Se nota en exceso el peso literario en la narración que en la pantalla resulta premiosa, se quieren explicar demasiadas cosas cuando en el cine no es necesario ser tan detallista. Detallismo, premiosidad que lastran y hacen pesado el lenguaje cinematográfico.
La historia es buena, en realidad empieza por ser una auténtica lección de Historia de un territorio muy poco conocido. El paso de colonia británica a pequeño reino y a estado-colonia de la Unión.
Lo que ya no es tan buena es la adaptación de la novela al guion. Como se ha dicho, no es necesario en el cine contar todas las cosas que pasan. Y pasan muchas y se alarga el relato.
La realización es brillante, con abundantes aventuras que muestran la forma de vida en aquellas latitudes. Bellas imágenes de veleros en alta mar, selvas que surgen sobre suelo volcánico, los entresijos políticos de la colonia, "Envidio a los puritanos, pueden ser bastardos sin saberlo", la implantación de nuevos cultivos ... Y las enfermedades (lepra, peste, depresiones posnatales ...)
Excelentes interpretaciones de Chen y de Heston en dos personajes indomables.
Excelente también la ambientación, vestuario, paisajes, colorido, fotografía y música.
Una buena película de aventuras y de historia que recomendamos.