G-Force: Licencia para espiar

Con la loable misión de salvar el mundo, aterrizan en nuestra cartelera los "G-Force", unos animales que abandonan el laboratorio dispuestos a embarcase en la acción más frenética y, con el afán de dejar claro que: "no son hamsters, son conejillos de indias".

Y es que, el punto a favor de "G-Force" son sus simpáticos protagonistas que, además de estar dotados con un buen diseño y dinamismo, seguro que harán las delicias de los chavales con sus peripecias. Los encargados de dar voz a estas criaturas son estrellas como Nicolas Cage, Steve Buscemi o Penélope Cruz (incluso su personaje, Juarez, suelta alguna palabrilla en castellano); actores que realizan perfectamente su labor y logran dar una personalidad diferenciada a cada miembro del equipo.

La gran pega, pues que en el lado contrario hay una gran falta de emoción en todo lo referente a "los malos" y sus planes... vamos que, para no perder la sana costumbre, en Disney se han calentado poco/nada la cabeza. Todo muy moderno y poquita cosa más.

Ciertamente la peli se hace distraida gracias a que cualquier excusa es buena para que los "G-Force" entren en acción. Si la trama no vale un pimiento, lo mejor será rodearlos de fuegos artificiales, todo tipo de gadgets, maquinitas de última generación y la música más actual (cuantas veces llegan a sonar los Black Eyed Peas en esta cinta?).

Lo mejor: aprueba visualmente.
Lo peor: deja muchísimo que que desear en el apartado argumental.

Si eres un adulto y no estás enormemente aburrido posiblemente no te merezca la pena pagar la entrada del cine para ver "G-Force". Sin embargo este invento producido por Jerry Bruckheimer tiene su coña y funciona bastante bien dentro de sus parámetros. Se trata de una parodia de los típicos filmes de acción de los que el propio productor sabe bastante con los estereotípicos agentes especiales en misiones de alto riesgo que implican uso de alta tecnología. Algo así como los G.I. Joe, sólo que aquí son conejillos de indias y otros animalejos, doblados por actores famosos en la versión original, entre ellos nuestra querida Penélope Cruz.

La idea ya fue medio explotada con el personaje de Rhino en "Bolt" pero aún así la mezcla entre la seriedad del concepto y la ridiculez de que lo protagonicen roedores tiene su gracia. Pero sin duda lo mejor de todo es que los actores humanos como Bill Nighy o Zach Galifianakis-aka "el colgado de Resacón en Las Vegas"- en lugar de hacer el gilipollas asumiendo que están en una película de broma para niños, ofrecen actuaciones más bien sobrias, con sólo una pizca de ironía (o en el caso de Galifianakis ni eso), lo cual hace que la idea de que estos animalejos puedan ser agentes especiales resulte mucho más creíble y por tanto, más gracioso.

Desgraciadamente estas virtudes no son suficientes para convertir la película en buena o siquiera en interesante ya que el diseño de los personajes animados no es muy atractivo, como tampoco lo es la personalidad de algunos de ellos (el flatulento Hurley) y el final es tan aparatoso como el de cualquier blockbuster que se precie, lo cual tal vez sea apropiado si se trata de parodiarlos pero acaba saturando de la misma forma que en las producciones serias. Es de agradecer, sin embargo, que su duración es ajustada, algo de lo que , sin duda, podría aprender Michael Bay.

No obstante, es una aceptable película para críos que Pixar hubiera hecho mucho mejor pero seguro que no le hubiera otorgado un ritmo tan trepidante, lo que en ocasiones funciona bastante bien.

Sólamente la había visto una vez y fue en cine con un amigo mío y tendría unos 14 años. Desde entonces han pasado 3 años desde que la vi y recibí un bonito recuerdo de esta película. Me entretuvo de principio a fín, me reí y pasé un rato agradable. Me arrepiento ahora que lo pienso de no haberla visto en 3d porque hubiera sido una delicia. Visualmente está muy lograda pese a sus 82 millones de $ de presupuesto. La cinta no se dio mucho a conocer y no fue un éxito muy reconocido a nivel internacional o crítico, es más fue vapuleada por la crítica. Personalmente me gustó, quizás cuando tenía 14 años me lo pasé algo mejor que ahora con 17 pero me sigo divirtiendo como un niño y riéndome de situaciones absurdas que supone la gente intelectual y cinéfila. Desde mi punto de vista me parece original e innovadora. No conozco ninguna película que vaya de cobayas espías por lo cual en ese aspecto es innovador y aunque el papel de Bill Nighy pase sin pena ni gloria durante la cinta y esté totalmente desaprovechado, aparece un entonces desconocido Zach Galifianakis en este caso en plan jefe de la misión en plan serio y con el doblaje de chico inteligente y no en plan macarra y estúpido como el de Resacón o Salidos de cuentas. La banda sonora es digna y visualmente está muy bien además de elegir una selección musical que a mi me gustó con esas canciones de Black Eyed Peas o el Just Dance de Lady Gaga. La escena de los fuegos artificiales con el Fortuna Imperatrix Mundi de fondo es bestial tanto visualmente como sonoramente aunque dure poco. Son 80 minutos para disfrutar con niños y dejar la mente en blanco y simplemente reírte un rato. En fín, no es gran cosa ni una obra maestra, es más, el título y póster lo dejan claro de que va, tiene cosas previsibles y cosas que no como quien es el villano al final de la película que al menos yo no me lo esperé en su momento y aunque el robot final sea una copia de Transformers entretiene que no es poco.

Nuevamente el famoso productor nos regala una película que a primera vista parece ya vista y con poca pinta de arrasar en taquilla. Sin embargo igual que ocurrió con "El bar coyote", se trata de una película entretenida, con unos efectos especiales muy buenos, con diálogos y guión escritos de forma sencilla. Me han gustado los personajes, sobre todo su aproximación a los humanos, en lo que son capaces de utilizar el "facebook", o ser los malos de la película. El mensaje es muy Dysney haciendo valor de que todos somos especiales. Me parece una buena película de acción y de aventuras disfrutable por toda la familia. En el reparto el rostro conocido es Nigthy que sin embargo no resulta muy aprovechado.

La verdad es que esta enfocada a todos los públicos y no es cansina en ninguna de sus escena, muy bien adaptada entre los protagonistas y los "humanos", con escenas de acción bastante bien logradas y que resultan divertidas. Enfocada a la amistad y el trabajo en equipo.